Agencias /  Ciudad de México.- Un equipo internacional de astrónomos ha hecho un descubrimiento revolucionario que confirmó la existencia de un planeta con características similares a la Tierra que se encuentra a unos 4,2 años luz de distancia del Sol en la zona habitable del sistema estelar Próxima Centauri, según un estudio publicado esta semana en la revista Astronomy & Astrophysics.

Los primeros indicios del planeta rocoso Próxima b se encontraron en 2016 mediante el telescopio HARPS del Observatorio Europeo Austral (ESO), pero la última investigación se basó en los datos del nuevo espectrógrafo ESPRESSO, que tiene el triple de precisión, lo que permite calcular con mayor exactitud sus características.

Los investigadores señalaron que el exoplaneta tiene una masa de 1,17 veces la de nuestro planeta, orbita a su estrella cada 11,2 días, y confirmaron que se encuentra en la zona habitable de su estrella. Las nuevas mediciones revelaron que aunque Próxima b está unas 20 veces más cerca de su estrella que la Tierra del Sol, recibe aproximadamente la misma cantidad de energía, recoge Science Daily.

Los científicos estiman que la temperatura en la superficie de Próxima b podría oscilar entre los -90 y 30 grados centígrados. Una temperatura así sugiere que en la superficie del planeta se podría encontrar agua líquida, si se llega a comprobar su presencia. Además, es un buen indicio para una posible existencia de formas de vida.

¿Un sistema solar en Próxima Centauri?

Los astrónomos, dirigidos por Alejandro Suárez Mascareña, han concluido que Próxima b tiene como mínimo 1,17 masas terrestres. Han confirmado que está dentro de la zona habitable de su estrella, lo que quiere decir que puede tener agua líquida en superficie porque no está ni muy lejos ni muy cerca de ella, en relación con la radiación que emite. En concreto, Próxima b está siete veces más cerca de su estrella que Mercurio del Sol, y apenas tarda 11,2 días en completar una vuelta de la estrella.

Además de confirmar su masa, los astrónomos han captado una distorsión que les hace sospechar que Próxima b podría tener un compañero, en una órbita más cercana a la estrella, aunque no han podido asegurarlo: «Si la señal tiene un origen planetario– ha explicado en un comunicado Francesco Pepe, investigador de la Universidad de Ginebra y coautor del trabajo– este planeta acompañando a Próxima b tendría menos de la tercera parte de la masa de la Tierra –es decir, sería un poco más masivo que Titán–».

Es decir, incluso en la estrella más cercana podría haber un sistema solar en toda regla. «Estas estrellas tan pequeñas y frías que acostumbran a tener sistemas planetarios numerosos», ha dicho Ignasi Ribas. «Tal vez Próxima Centauri no sea una excepción. Además, hace un tiempo otros autores propusieron la existencia de otro planeta de largo periodo en el sistema. ¡Es apasionante que nuestra estrella vecina pudiera tener un sistema planetario tan rico!».

Pero, aparte de eso, los exoplanetas se pueden detectar por medio de la velocidad radial. Básicamente, los astrónomos miden el cabeceo que se produce en las estrellas cuando uno o varios planetas giran a su alrededor. Ocurre porque tanto las estrellas como los planetas se mueven alrededor de un centro de masas, y tiene la ventaja de que desde la tierra se puede medir cómo se acerca o aleja la estrella en relación con nosotros, lo que acaba permitiendo deducir cómo son los exoplanetas de los alrededores. Y es aquí donde el instrumento ESPRESSO ha alcanzado una precisión sin precedentes.

Búsqueda de vida

El equipo de científicos considera que determinar medidas más precisas de Próxima b es un gran paso en la búsqueda de vida en exoplanetas. “Estamos muy contentos de que ESPRESSO pueda producir mediciones aún mejores, y es gratificante y solo una recompensa por el trabajo en equipo que duró casi 10 años”, señaló Francesco Pepe, líder del equipo de investigación. ESPRESSO es un espectrógrafo de fabricación suiza instalado en el Very Large Telescope de Chile.

Por su parte, Alejandro Suárez Mascareño, autor principal del artículo, sostiene que confirmar la existencia de Próxima b fue “una tarea importante”, y que se trata de “uno de los planetas más interesantes conocidos en el vecindario solar”.

Aunque Próxima b es un candidato ideal para la investigación de biomarcadores, los científicos están conscientes de que todavía queda un largo camino por recorrer antes de poder sugerir que la vida ha podido desarrollarse en la superficie del planeta. Uno de los inconvenientes es que la estrella Próxima Centauri es una enana roja activa que bombardea su planeta con altos niveles de rayos X, aproximadamente 400 veces más que la Tierra.

¿Puede haber vida en Próxima b?

Sin embargo, hasta que no entren en funcionamiento los próximos telescopios gigantes, como el ELT o el TMT, o el observatorio espacial WFIRST, no se podrá estudiar la atmósfera de planetas tan pequeños como Próxima b. Pero, ¿sería realmente posible encontrar huellas de vida allí?

«Es muy difícil que ningún planeta en torno a un estrella M –una enana roja, más pequeña y menos brillante que el Sol– tenga vida en su superficie», ha explicado Enric Pallé. «Esos planetas teóricamente tienen una temperatura que permite la existencia de agua liquida, pero durante gran parte de su historia evolutiva han estado sometidos a procesos que probablemente hayan volatilizado cualquier atmósfera que pudiera existir».

Fundamentalmente, durante su juventud las enanas rojas son mucho más brillantes y abrasan a los planetas que están cerca. «Esa actividad estelar implica fulguraciones y muchas emisiones en el ultravioleta y rayos X que también es mayor en la juventud de la estrella, pero que se mantiene a lo largo de toda la vida estelar. Lo que no pasa en estrellas mas masivas como el Sol», ha enumerado Pallé.

Pero no todo está perdido. Todavía hay que comprobar que, efectivamente, los planetas en torno a estas estrellas no albergan atmósferas compatibles con la presencia de vida y es muy posible que se encuentren algunas sorpresas. «Efectivamente, Próxima b recibe (y ha recibido) una dosis de radiación de alta energía muy superior a la de la Tierra», ha comentado Ignasi Ribas. «Desde una visión geocéntrica, esto podría parecer que deja tocada de muerte su posible habitabilidad. Pero a decir verdad, sabemos tan poco sobre cómo funciona la vida y en qué condiciones se crea y se destruye que es demasiado temprano para hacer afirmaciones categóricas». Lo único que resta es explorar un fascinante vecindario repleto de sistema solares incluso en la estrella más cercana al Sol.

Comentarios desactivados en Confirman similitudes entre exoplaneta Próxima b y la Tierra