Agencias/ Ciudad de México.- La prefectura de Fukushima prohibirá el acceso del público a las pruebas olímpicas que acogerá debido al aumento de las infecciones por COVID-19, declaró el sábado su gobernador, revirtiendo la postura anunciada dos días antes por los organizadores de los Juegos.

Dos prefecturas por fuera de la zona de Tokio han resuelto vedar la asistencia de público a los eventos olímpicos debido al aumento de casos de coronavirus, confirmaron los organizadores olímpicos el sábado. Los Juegos Olímpicos, demorados por la pandemia, deben comenzar en dos semanas.

La decisión supone un nuevo golpe a las esperanzas de Japón de aprovechar los Juegos Olímpicos para mostrar su recuperación tras el devastador terremoto y tsunami que azotaron la costa norte hace una década, destruyendo una central nuclear en Fukushima en el peor accidente nuclear del mundo desde Chernóbil.

Días atrás, los organizadores y el COI vedaron a los espectadores de los eventos en Tokio y tres prefecturas vecinas. Éstas constituyen la gran mayoría de las sedes de los eventos, aunque al principio algunas zonas periféricas podían permitir unos pocos espectadores.

Los organizadores habían dicho el jueves que no habría espectadores en Tokio ya que un resurgimiento del coronavirus obligó al primer ministro, Yoshihide Suga, a declarar el estado de emergencia en la capital, que se mantendrá durante los Juegos, que ya fueron aplazados un año debido a la pandemia de COVID-19.

Pero habían señalado que se permitiría la presencia de algunos espectadores en Fukushima y otras prefecturas fuera de la capital. El viernes dijeron que los partidos de fútbol en la isla de Hokkaido, la más septentrional de Japón, se celebrarían sin público.

Fukushima, que albergará siete partidos de softbol y béisbol, pidió a los organizadores de los Juegos que prohibieran la presencia de espectadores, y la solicitud fue aceptada, dijo el gobernador Masao Uchibori.

“La situación de aumento de las infecciones en la prefectura no justifica el optimismo”, señaló el funcionario en rueda de prensa.

Los organizadores afirmaron que no se modificaron los planes de limitar la afluencia de público en las prefecturas de Miyagi, Shizuoka e Ibaraki.

Japón es famoso por su funcionamiento en consenso, el cual se ha alterado por la decisión de efectuar los Juegos Olímpicos de Tokio.

En un lado, está el público japonés que enfrenta preocupaciones sobre el coronavirus en momentos en el que solamente 16% de la población está plenamente vacunada. En el otro, están los políticos que buscan salvar la imagen con la realización de los Juegos Olímpicos y el Comité Olímpico Internacional que tiene miles de millones de dólares en juego.

“Estamos acorralados en una situación en la que ya no podemos parar. Estamos condenados si lo hacemos y también si no lo hacemos”, escribió Kaori Yamaguchi, miembro del Comité Olímpico Japonés y medallista de bronce en judo en 1988, en un editorial publicado por la agencia de noticias Kyodo. “El COI además parece pensar que la opinión pública en Japón no es importante”.

El apoyo para seguir adelante con los juegos parece dividido y hay una oposición persistente. Gran parte de la preocupación se debe a las dudas en torno a los riesgos sanitarios. Aunque el gobierno ha intensificado su campaña de vacunación tras un inicio lento, la gran mayoría de la población no estará inmunizada para cuando comiencen los juegos dentro de dos semanas.

Debido a la fecha, el COI y el gobierno japonés han tenido que hacer malabarismos para sacar el compromiso adelante a pesar de las dificultades. El doctor Shigeru Omi, el principal asesor del gobierno para el COVID-19, consideró “anormal” efectuar la mayor justa deportiva del mundo durante una pandemia.

El costo oficial de los Juegos Olímpicos de Tokio es de más de 15.000 millones de dólares, aunque auditorías gubernamentales sugieren que la cantidad alcanzaría el doble. Todo, salvo 6,700 millones de dólares es dinero público. El COI sólo aporta 1.500 millones del costo total y algunas son contribuciones en especie que no involucran dinero en efectivo.

Más allá de las preocupaciones financieras, efectuar sin contratiempos unos Juegos Olímpicos también es gran fuente de orgullo para el país anfitrión.

Antes de que se pospusieran las competiciones hace 15 meses, Japón iba sobre ruedas para realizarlos aun cuando fueran costosos.

Contaba con un nuevo Estadio Nacional hermoso, diseñado por el arquitecto Kengo Kuma, una organización meticulosa y un gran escenario para un país que organizó unos históricos Juegos Olímpicos de verano en 1964, apenas 19 años después de su derrota en la Segunda Guerra Mundial.

“Mucha gente, incluidos los niños, esperaban con ansia los juegos, y lamento mucho quitarles su oportunidad de ver béisbol y softbol en el estadio”, dijo el gobernador de Fukushima, Masao Uchibori, el sábado. Fue una decisión muy difícil”.

El presidente del COI, Thomas Bach, describió y sigue describiendo al gran evento deportivo de Tokio como “los Juegos mejor preparados de la historia”.

Comentarios desactivados en Celebran sin aficionados en tribunas eventos de Juegos Olímpicos en Japón