Agencias/Ciudad de México.- La guerra entre Israel y Hamás, que comenzó el 7 de octubre con un ataque sorpresa del grupo islamista, ha entrado en su sexta semana sin visos de una solución diplomática. El conflicto ha dejado más de 10 mil muertos, la mayoría de ellos palestinos, y una grave crisis humanitaria en la Franja de Gaza, donde más de dos millones de personas se enfrentan a la escasez de agua, electricidad, medicinas y alimentos.
Israel ha bombardeado sin cesar el enclave, donde dice que ataca a los combatientes y la infraestructura de Hamás, y acusa al grupo de poner en peligro a los civiles al operar entre ellos. Mientras tanto, Hamás sigue lanzando cohetes contra el sur de Israel y mantiene a más de 200 rehenes, entre ellos soldados y civiles, que fueron capturados durante el asalto del 7 de octubre.
En medio de este escenario, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, dijo el lunes por la noche que su país tendrá “responsabilidad general sobre la seguridad” en Gaza “por un periodo indefinido” una vez que termine la guerra. En una entrevista con ABC News, Netanyahu rechazó un “alto al fuego general” pero abrió la puerta a “pequeñas pausas tácticas” para la entrada de ayuda humanitaria en la Franja o la liberación de rehenes.
Netanyahu afirmó que el objetivo de Israel es “destruir” a Hamás y evitar que se rearme, y que para ello necesita “controlar la seguridad” en Gaza. “No vamos a permitir que Hamás se convierta en un mini Irán con miles de misiles apuntando a nuestras ciudades”, dijo. El primer ministro israelí también descartó la posibilidad de que Gaza se convierta en un Estado independiente, y dijo que solo aceptaría una solución de dos Estados con la Autoridad Palestina, que gobierna en Cisjordania y es rival de Hamás.
Las declaraciones de Netanyahu han generado reacciones de rechazo y preocupación entre los palestinos y la comunidad internacional, que temen que Israel imponga un régimen de ocupación permanente en Gaza, violando los derechos humanos y el derecho internacional. El portavoz de Hamás, Ghazi Hamad, negó que Israel haya logrado avances militares significativos o que haya avanzado profundamente en la Ciudad de Gaza. “Nunca le dirán la verdad a la gente”, dijo Hamad desde Beirut. Añadió que varios soldados israelíes murieron el lunes y que “muchos tanques fueron destruidos”. “Los palestinos luchan y luchan y luchan contra Israel, hasta que acabemos con la ocupación”, dijo Hamad.
El presidente de la Autoridad Palestina, Mahmoud Abbas, calificó de “inaceptable” la postura de Netanyahu y dijo que Israel debe retirarse de Gaza y respetar los acuerdos previos. Abbas también pidió la reanudación de las negociaciones de paz con Israel, basadas en las fronteras de 1967 y con Jerusalén Este como capital de Palestina. El líder palestino dijo que está dispuesto a formar un gobierno de unidad nacional con Hamás y otras facciones, y a celebrar elecciones generales.
Por su parte, el secretario general de la ONU, António Guterres, expresó su “profunda preocupación” por la situación en Gaza y llamó a un “cese inmediato de las hostilidades” para “proteger a los civiles”. Guterres también instó a aumentar la ayuda humanitaria ante la “situación extremadamente grave” que se vive en el territorio palestino. Según la ONU, más de 700 mil personas han buscado refugio en escuelas de la organización, y alrededor del 70% de la población ha dejado sus hogares. Los civiles de Gaza sobreviven con poca ayuda exterior y por su propia búsqueda diaria de alimentos y agua, ya que los suministros han disminuido tras semanas de asedio israelí.
La guerra entre Israel y Hamás ha sido la más sangrienta y destructiva desde que el grupo islamista tomó el control de Gaza en 2007, tras derrotar a Fatah en unas elecciones parlamentarias. Desde entonces, los territorios palestinos han estado divididos entre Cisjordania y Gaza, y los intentos de reconciliación han fracasado. La comunidad internacional ha apoyado la solución de dos Estados, pero las negociaciones de paz se han estancado por las diferencias sobre temas como las fronteras, los asentamientos, los refugiados y Jerusalén.
