Agencias/Ciudad de México.- El pateador Brandon McManus fue liberado por los Commanders de Washington a raíz de que dos mujeres lo demandaron por agredirlas sexualmente en un vuelo transatlántico.

Dos mujeres que trabajaban como azafatas en el vuelo de los Jaguars de Jacksonville con destino a Londres el 28 de septiembre alegan en una demanda presentada ante un tribunal civil que McManus intentó besar a una de ellas y se frotó contra ambas mientras intentaban realizar sus responsabilidades laborales. Piden más de un millón de dólares en daños y perjuicios, según documentos judiciales.

Un mensaje enviado al campamento de McManus no fue respondido de inmediato. Brett R. Gallaway, abogado que representa al pateador, calificó el lunes las acusaciones de “absolutamente ficticias y demostrablemente falsas”.

McManus, de 32 años, firmó con Washington en marzo después de jugar la temporada pasada, su décima en la NFL, con Jacksonville. A principios de semana, los Commanders y los Jaguars dijeron que estaban investigando la situación.

La demanda, presentada en Florida, alega que McManus agredió sexualmente a dos azafatas durante un vuelo privado a Londres para el partido de los Jaguars contra los Atlanta Falcons la temporada pasada.

Según las demandantes, el vuelo se convirtió rápidamente en una fiesta caótica en la que McManus y otros hicieron caso omiso de los protocolos de seguridad y las leyes. Las mujeres afirman que McManus intentó besar a una de ellas durante las turbulencias y que forcejeó con ambas mientras ellas estaban cumpliendo con su trabajo.

McManus ha negado categóricamente las acusaciones, calificándolas de “absolutamente ficticias y manifiestamente falsas”. Su abogado, Brett R. Gallaway, dijo que las afirmaciones son un intento de extorsión para empañar la reputación de McManus. Gallaway prometió una defensa agresiva para limpiar el nombre de McManus y exponer la demanda como infundada.

Los Jacksonville Jaguars también se han visto implicados en la demanda por supuestamente no supervisar a McManus y no garantizar un entorno seguro para su personal. El equipo ha declarado que está investigando a fondo el asunto y que se toma en serio las acusaciones.

Los Commanders, en respuesta a las acusaciones, subrayaron su compromiso de mantener la integridad de su organización. Su decisión de liberar a McManus subraya su política de cero tolerancia frente a este tipo de acusaciones y su intención de respetar las normas éticas.

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