De Primera Mano/Por Rodulfo Reyes/Villahermosa.- El delegado del CEN del PRI en Tabasco, Genaro Abreu, confirmó el miércoles que el nuevo presidente estatal del partido surgirá de una consulta abierta a las bases, y descartó que se pueda dar una “candidatura de unidad”, lo cual vislumbra una “guerra civil” en el Revolucionario Institucional choco.
El método de la elección directa lo impulsa una corriente a cuya cabeza se encuentra la diputada federal Soraya Pérez Mungía, cuya posición en el altiplano le ha valido convertirse en una voz con representatividad en Tabasco en general y en el tricolor en particular.
Calumniada por mercenarios del régimen por ser crítica de la llamada ‘Cuarta transformación’, la originaria de Cárdenas que hizo su carrera en Toluca, ha ido ganando adeptos en lo que se conoce como “nuevo PRI”.
La postura de la legisladora encontró eco en la capital del país, en razón de que el dirigente nacional, Alejandro Moreno Cárdenas, surgió él mismo de unas votaciones directas.
La percepción en círculos nacionales de poder es que el exgobernador campechano es un líder fuerte por haber sido electo por la inmensa mayoría de los priístas del país.
Empero, tal consideración no aplica en Tabasco, a juzgar por el resultado de las veces que se ha realizado dicho método en el tricolor criollo.
El primer experimento accidentado en la entidad se dio en 1991, durante el gobierno fallido del extinto Salvador Neme Castillo, quien trató de imponer a la fórmula compuesta por Jesús Madrazo Martínez de Escobar y Guillermo Narváez Osorio, que competían con Carlos Prats Pérez y Raúl Lezama Moo.
Durante el sexenio de Roberto Madrazo Pintado (1994-2000), el cenecista Héctor Arguello López le ganó la dirigencia del partido al gobernador en una consulta abierta, pero no terminó su mandato: fue obligado a dimitir poco después por el “apretón” económico que le dieron desde la ‘Quinta Grijalva’.
Las votaciones directas que quiere el líder nacional ya han pasado a la historia en Tabasco, y no precisamente por sus buenos resultados. La última vez que se dirimió abiertamente la plaza fue en 2013 mediante la votación de consejeros, que viene a ser una suerte de “dedazo disfrazado”.
En esa ocasión participaron Erubiel Alonso Que y Evaristo Hernández Cruz. El primero llevaba el apoyo de la nomenclatura y el hoy alcalde capitalino se aventó por su cuenta y riesgo.
Aún sin el sostén de los grupos de interés, a Hernández Cruz lo respaldaron mil consejeros. El que era ‘candidato de la línea’ se alzó con dos mil sufragios, pese a que con el soporte que llevaba debió haber barrido al rebelde priísta.
Que Moreno Cárdenas haya decidido que en el Edén tropical sean los militantes los que decidan el nombre de su próximo presidente estatal, es un indicio de que el campechano no está escuchando a los barones tabasqueños de su casa.
La votación abierta podría ser el último clavo en el ataúd del PRI en Tabasco.
PARA SU MAYOR INFORMACIÓN….
DE ACUERDO CON un recuento del portal ‘De Primera Mano Noticias’, el director de la División Académica de Ciencias Sociales y Humanidades (DACSyH) de la UJAT, Fernando Rabelo Hartman, recibe más comentarios positivos en columnas políticas que el rector de esa casa, José Manuel Piña Gutiérrez. Mañana le daremos más datos de este tema que podría arrojar pistas sobre las campañas contra su jefe.