Redacción InsurgentePress/Agencias/Ciudad de México.- Un saldo de 30 muertos arrojó una sangrienta batalla entre sicarios de los cárteles Jalisco Nueva generación (CJNG) y de Sinaloa en las inmediaciones de la comunidad San Juan Capistrano, en la sierra de Valparaíso, en el vértice de Zacatecas y Jalisco.
El periódico La Jornada difundió que pistoleros de ambos cárteles rivales protagonizaron la refriega en las inmediaciones del río Tepetatita – a cinco kilómetros de la ex hacienda de San Juan Capistrano–, que extendieron hacia brechas y laderas de los cerros en los límites de Zacatecas y Jalisco, durante la madrugada del jueves.
Elementos del 97 Batallón de Infantería y Guardia Nacional arribaron a ese perímetro ocho horas después de concluido al intercambio de fuego entre sicarios rivales (08:00 horas del jueves).
Los elementos de ambos corporaciones constataron las huellas del enfrentamiento que dejó 30 cuerpos regados con múltiples impactos de bala y varios vehículos abandonados con pertrechos de guerra en su interior.
Desde el puente del río Tepetatita, oficiales de la GN hallaron una camioneta Nissan Frontier azul marino, baleada y desmantelada.
Más adelante, un convoy de militares y policías ministeriales encontró unidades con huellas de la batalla y cadáveres, a un costado de una brecha.
En cuentas de Twitter y otras redes sociales circularon de imágenes de decenas de hombres ejecutados, vehículos baleados y calcinados en la refriega en San Juan Capistrano.
La Secretaría de Seguridad Pública del estado informó en un comunicado: “Tras reportarse un enfrentamiento entre grupos antagónicos en Valparaíso, el Grupo de Coordinación Local (GCL) confirma que no se localizaron cuerpos sin vida ni indicios que refieran tal hecho”.
Al mediodía llegaron agentes de la Policía Ministerial Investigadora y peritos de la Fiscalía General de Justicia de Zacatecas. La caravana de vehículos militares y policiacos desplegada a un costado de la carretera estatal número 60 incluía cuatro vehículos para traslado de cadáveres.
El pasado 25 de junio, pistoleros de ambos cárteles chocaron en esa región de la Sierra Madre Occidental, limítrofe entre Zacatecas y Jalisco, con un saldo de 18 muertos.
Un día después protagonizaron otro enfrentamiento de menor intensidad, en el municipio de Pánuco.
El pasado 27 de junio, los pistoleros intercambiaron fuego en el poblado de Chaparrosa, municipio de Villa de Cos. De los dos últimos choques el gobierno no reportó muertos.
En este contexto, sicarios asesinaron a dos paramédicos de la Secretaría de Salud Jalisco (SSJ) adscritos al hospital de Huejuquilla el Alto, al momento que regresaban de dejar un paciente en Fresnillo, Zacatecas.
Los cuerpos de los trabajadores de la SSJ fueron encontrados a un lado de la ambulancia que tripulaban, en la comunidad La Florida, municipio de Valparaíso, en territorio de Zacatecas.
Huejuquilla el Alto es un municipio jalisciense que se ubica entre las localidades zacatecanas de Valparaíso y San Juan Capistrano.
Esta región, en disputa entre los cárteles más poderosos de México, es de gran importancia para ellos, pues es una parte de la Sierra Madre Occidental de difícil acceso, donde colindan los estados de Jalisco, Nayarit, Zacatecas y Durango, propicia para el trasiego de drogas.
