Reconocimiento a Rocío Nahle gobernadora de Veracruz por su entereza y determinación
Por Raúl Caraveo/Ciudad de México.- La publicitada campaña de afiliación y re-afiliación al partido Morena debe analizarse en virtud de la falta de estrategia, estilo, principios y ética política (si es que este último ingrediente existiese)
Primero, ¿era necesaria una masiva y desordenada afiliación y re-afiliación? Ya que si tienen gran mayoría en todos los ámbitos y presencia mayoritaria en los estados, si han ganado y se perfilan como favoritos para las siguientes elecciones qué sentido tiene arriesgar lo que con bastante tiempo, esfuerzo y entereza de la verdadera izquierda se logró construir en la historia moderna de México, desde 1969.
Segundo; existen a lo largo y ancho del país importantes personas que son de izquierda, que han luchado desde sus trincheras y que carecen de cualquier atención por parte de los líderes de Morena, del oficialismo. Existen fundadores incluso, referentes y operadores que siguen en la espera de –algún día- ser tomados en cuenta, las argumentaciones para no tomarlos en cuenta son muy simples y siempre las mismas pero hoy al ver la realidad son decepcionantes.
Tercero; la campaña de afiliación que pretende hacer un partido monstruo, absoluto, totalitario está cayendo en sus primeras contradicciones al hacerse de personajes que –dado el momento- no son necesarios y si perversos, pervertidos y con un alto riesgo de contaminar. Lo que hemos dicho siempre, personajes que unos días antes eran furibundos opositores al obradorismo o a Morena hoy son perdonados y envueltos en una manta protectora no de alianza sino de adopción. Sin duda el proceso que apenas comienza va a batir récords y superara sus propias expectativas, alcanzara más millones que los planteados originalmente, Morena crecerá pero con un crecimiento que es precisamente lo que se buscó evitar en muchos años, sí, todo los escombros y sobras, saldos y desperdicio de policastros regionales, locales, esporádicos, oportunistas, descobijados de los partidos desaparecidos serán acogidos y perdonados, aceptados y encumbrados; obtendrán privilegios, los mismos privilegios que se negaron a fundadores, referentes y gente de izquierda leal por muchos años. No sabemos que resulte de este embrollo en el que no hay un líder real del partido, no hay una dirección y varios personajes desde sus liderazgos formales e informales tienden a jalar la cuerda, Monreal, Adán Augusto, Andrés Manuel, gobernadores y gobernadoras, en fin el ejemplo que se ha dado en muy pocos días no parece ni ser el correcto ni ser ideal, si de lo que se trata es de hacer un partido único, hegemónico, omnipresente y omnipotente bajo el ejemplo que nos dejó el PRI van por muy buen camino. Lamentable que este caso se dé como un efecto de la falta de una oposición seria e inteligente. Escenarios inimaginables se están dando.
Reconocimiento a Rocío Nahle gobernadora de Veracruz por su entereza y determinación.
*Raúl Caraveo Toledo es licenciado en ciencia política por la UAM, ex catedrático de las Facultades de Psicología y de la Facultad Ciencias y Técnicas de la Comunicación de la Universidad Veracruzana, Corresponsal en México de La Prensa de Chicago, EEUU, escribe para Chicago, Illinois en y www.vocesmigrantes.us y en México para www.insurgentepress.com.