Agencias, Ciudad de México.- La Organización Amnistía Internacional (AI) reveló que FIFA no ha cumplido con la indemnización a los trabajadores de los estadios del Mundial Qatar 2022 y no creen que la revisión del posible abuso de los organizadores sea un motivo para retrasar su compromiso con los trabajadores.
”Aunque la FIFA ha reconocido que debe abordar la cuestión de la reparación a los trabajadores que sufrieron para hacer posible el Mundial de 2022, está más que claro que muchos miles de trabajadores no han podido obtener una indemnización por los horribles abusos relacionados con el torneo”, dijo en un comunicado el director del Programa de Justicia Económica y Social de AI, Steve Cockburn.
La revisión antes mencionada se sucitó en el congreso de Kigali, mismo en el que anunciaron la permanencia de Gianni Infantino como presidente de la FIFA. Sin embargo, solo comentaron los abusos a los empleados en Qatar y no en posibles soluciones.
”La FIFA no debe retrasar sus reclamaciones de reparación con un largo examen. Los trabajadores ya han esperado demasiado tiempo a que se haga justicia”, afirmó el responsable de AI.
Cockburn también resaltó los gestos de apoyo que en su día realizaron federaciones como las de Noruega o Dinamarca.
“Satisfacción con los esfuerzos de las asociaciones nacionales de futbol que han defendido los derechos de los trabajadores y han recordado a la FIFA sus propios compromisos en materia de derechos humanos”, comentó.
En cuanto a las cifras de trabajadores fallecidos, las estimaciones no son claras, ya que el diario británico The Guardian reveló a inicios de 2021 que cerca de 6,500 personas perdieron la vida, mientras que el gobierno de Qatar sostiene que fueron 40 muertes en la preparación del Mundial.
If other African Presidents can do what Rwanda's President is doing, I am confident that our national teams will perform admirably in the World Cup. Morocco has done it in terms of football infrastructure &their performance at the FIFA World Cup in Qatar is proof of this. pic.twitter.com/7M06FtoT4u
— Sally Bolo (@SallyBolo) March 17, 2023
Durante el 73° Congreso General de FIFA. En su afán por abrir el mundo del fútbol a otros continentes, en esta ocasión Gianni Infantino ha llevado la organización de este encuentro a Kigali, Ruanda. Hace tres meses, el presidente de este país, Paul Kagame, además de otros, acompañaban a Infantino, presidente de FIFA, en el palco del estadio Al Al Bayt durante la ceremonia de inauguración, junto al Emir de Qatar, Tamim bin Hamad Al Thani, o el príncipe heredero de Arabia Saudí, Mohammad bin Salman, entre otros.
Entre los temas que se discutirán en Kigali destaca la posibilidad de que se amplíe el número de equipos participantes en el Mundial, de 32 a 48, o la elección de la persona que ocupará la presidencia de esta institución para el mandato 2023–2027. Quien seguramente no ocupe ese cargo será Lise Klaveness, presidenta de la Federación de Fútbol de Noruega, quien ha criticado duramente la situación de los derechos humanos en Qatar y la organización de la pasada Copa del Mundo en este país. En este Congreso, la Federación que preside Lise Klaveness ha propuesto incluir un punto en el orden del día para que FIFA informe sobre sus responsabilidades a la hora de proporcionar mecanismos de reparación ante los abusos contra los derechos humanos.
La propuesta de Klaveness es un mensaje directo para que no se olvide lo sucedido en Qatar, donde miles de trabajadores migrantes fallecieron para hacer posible la Copa del Mundo que encumbró a Argentina como campeona en una de las finales más emocionantes de la historia. Pocas horas antes de que Messi y Mbappé se enfrentaran en la final, Gianni Infantino anunció que la FIFA ingresaría 7,500 millones de dólares estadounidenses en ciclo de la Copa Mundial 2022, más de 1,000 millones más de lo previsto. También pronosticó que la FIFA ganará más de 11,000 millones de dólares en los próximos cuatro años. Lo que no anunció Gianni Infantino fue ninguna respuesta al gran número de trabajadores y trabajadoras y sus familias, a las que se sigue negando una indemnización por los salarios robados y las vidas perdidas. Ni una palabra dedicada a las miles de personas que construyeron las carreteras, los hoteles o los estadios que asombraron al mundo el pasado mes de diciembre.
Hasta ahora, la FIFA ha intentado eludir sus responsabilidades en materia de derechos humanos, confiando en los mecanismos de reparación del propio Qatar. Unos mecanismos que actualmente no ofrecen la reparación necesaria, especialmente a los trabajadores que ya se han ido del país o a las familias que han perdido a sus seres queridos y cuyas muertes se han atribuido indebidamente a “causas naturales” porque no se llevaron a cabo investigaciones.
The ITUC is deeply concerned at the situation facing migrant workers in #Qatar now that the men’s football FIFA #WorldCup 2022 is over.
We are calling for a set of clear steps from the government of Qatar to consolidate reforms and go further.https://t.co/ehjTYX86w6
— ITUC (@ituc) March 17, 2023
En diciembre, una coalición de organizaciones internacionales de derechos humanos criticó a la FIFA por “engañar al mundo” sobre la indemnización de los trabajadores. A pesar de que los dirigentes de la FIFA habían declarado anteriormente que trabajaban en un plan para garantizar que se indemnizaba a los trabajadores, la víspera del torneo Gianni Infantino pasó la pelota y dijo que quien hubiera sufrido abusos debía simplemente “ponerse en contacto con las autoridades pertinentes para solicitar la compensación debida” del fondo de compensación existente de Qatar. La única respuesta de FIFA a todos los abusos a los derechos humanos cometidos en torno a la organización y celebración de la Copa del Mundo de Qatar ha sido el anuncio de un Fondo de Legado para indemnizar a los trabajadores. Sin embargo, a día de hoy el tamaño de este fondo aún no se conoce y, en la actualidad, su intención es tan solo respaldar proyectos educativos y un “núcleo de excelencia laboral” previsto. Algo que está muy lejos de representar una reparación.
No sabemos qué será de la propuesta de la Federación Noruega, pero lo que sí sabemos es que no han sido pocas las voces que se han alzado contra los abusos cometidos en relación al torneo. Hace unos días, FIFA recibía más de un millón de firmas recogidas por Avaaz y Amnistía Internacional en 190 países. Por otra parte, ederaciones como las de Alemania, Francia o Países Bajos, entre otras; selecciones como la alemana o la inglesa, que tuvieron gestos antes de sus partidos; o seleccionadores, como el neerlandés Louis van Gaal o el brasileño Tite, que apoyaron la creación de un fondo para reparar los abusos cometidos, no parecen haber sido escuchadas por Gianni Infantino, que sigue empeñado en escurrir el bulto y permanecer ajeno a la realidad. Especialmente llamativo sigue siendo el silencio de la Federación Española y su presidente, Luis Rubiales, de quien ni antes, ni durante, ni después del Mundial hemos conocido su opinión acerca de este tema. ¿Quizá tenga que guardar silencio para no recibir críticas por colaborar con otro país campeón del blanqueo deportivo como Arabia Saudí?
Hasta ahora, la FIFA sigue tocando, tocando y tocando, pero no ha disparado a puerta ni una sola vez. Esperamos que en el Congreso que se celebra en Ruanda no deje algo más que balones fuera y que las palabras de Lise Klaveness y su propuesta no sean una oportunidad perdida más y se materialicen en el mejor gol del pasado Mundial.
De acuerdo con distintos reportes, Qatar erogó 200,000 millones de dólares en los preparativos para el Mundial. Recurrió a cientos de miles de trabajadores de la construcción, en su mayoría del sur de Asia, para construir estadios, hoteles, carreteras y líneas del tren subterráneo, entre otros proyectos clave.
Cockburn dijo que muchos trabajadores inmigrantes en Qatar “sufrieron robo de su salario, tarifas ilegales de reclutamiento e incluso la muerte”.
Los trabajadores tenían pocos o nulos derechos laborales vinculados con sus contratos e un sistema que se reformó eventualmente, a medida que se acercaba el Mundial. Hay controversia sobre el número exacto de trabajadores muertos y lesionados. Resulta difícil de probar, en parte porque Qatar no requirió investigaciones.
FIFA should commit to using its US$100 million “Legacy Fund” to pay the families of migrant workers who died building the infrastructure for the 2022 World Cup in Qatar. #PayUpFIFA pic.twitter.com/Skhx2SFgVP
— Jim Murphy (@jimmurphySF) March 17, 2023