Agencias/Ciudad de México.- Tsingshan Holding Group, la empresa china que sacudió el mercado del níquel al elevar rápidamente la producción en Indonesia, es uno de los más recientes actores en el candente sector del litio, y podría llegar a ofrecer una ventana única para obtener los ingredientes de las baterías para vehículos eléctricos.

Tsingshan, predominantemente un fabricante de acero inoxidable, salió de la nada para convertirse en el principal productor de níquel del mundo en 2018 gracias a su uso pionero de arrabio de níquel de baja calidad.

Junto con su compañera china Chengxin Lithium Group Co producirá 60,000 toneladas al año de productos químicos de litio en una instalación de procesamiento en Indonesia, ha dicho Chengxin en una presentación, el primer anuncio de una planta de este tipo en el país.

Sumado a la producción de níquel y cobalto para baterías que ya se está desarrollando en las instalaciones de Indonesia, los suministros de litio convertirían a Tsingshan en un importante productor a escala de tres ingredientes clave para las baterías de vehículos eléctricos y otras recargables.

Tsingshan no respondió a una solicitud de comentarios sobre sus planes para el litio, pero un ejecutivo de la compañía dijo a Reuters que el “negocio de las baterías se convertirá en un nuevo negocio principal”.

Tsingshan posee el 35% del proyecto y Chengxin el 65%. Los socios usarán sus propios fondos para el 30% del financiamiento de la planta de 350 millones de dólares y el 70% provendrá de préstamos, según la presentación.

No se ha informado de una fecha de inicio de la planta de litio, que todavía enfrenta retos. Un funcionario de Chengxin dijo a Reuters que necesitará 450,000 toneladas de concentrado de litio al año para el proyecto, procedente de mineral de litio de roca dura.

A diferencia del níquel y el cobalto, que se encuentran en los alrededores de las operaciones de Tsingshan en Indonesia, no se conocen yacimientos de litio en el país. Eso significa que los socios tendrán que buscar en el extranjero minerales ricos en litio, como el espodumeno, para alimentar la planta.

“Es posible que Chengxin se asegure la compra de otros minerales (…) pero es probable que la competencia por el concentrado de espodumeno sea feroz”, dijo el analista de Wood Mackenzie Allan Pedersen.

Chengxin, que tiene su sede en Shenzhen, señaló que había ampliado recientemente su base de recursos de exploración y producción mediante adquisiciones en Argentina y Zimbabue. La empresa también tiene una participación en Huirong Mining, que está explorando una mina de litio en la provincia china de Sichuan.

La propia Tsingshan tiene como objetivo la producción anual de 24,000 toneladas de carbonato de litio equivalente en Argentina tras asociarse con la francesa Eramet y está preparada para fabricar materiales para baterías de fosfato de hierro y litio (LFP) en Indonesia con Jiangsu Lopal Tech Co Ltd, han dicho socios de Tsingshan.

La proximidad de Indonesia a Australia también ayudará, según los expertos. Australia es, con mucho, el mayor proveedor de espodumeno del mundo y se espera que sea un impulso al 51% del aumento mundial de la oferta de materias primas de litio en 2020-25, dijo la analista Alice Yu de S&P Global Market Intelligence.

TRÍO DE TRANSICIÓN ENERGÉTICA

Tsingshan ya planea una producción anual de al menos 230,000 toneladas de níquel para baterías y unas 27,000 toneladas de cobalto con otros socios en Indonesia. Cuando la planta de litio entre en funcionamiento, proporcionará a Tsingshan volúmenes considerables de un trío de metales vinculados a la transición energética.

El litio de Tsingshan también impulsaría las ambiciones del gobierno de Indonesia de convertirse en un actor relevante en el abastecimiento para los vehículos eléctricos (VE), tras las grandes inversiones en el país de los fabricantes de baterías LG Chem Ltd y Contemporary Amperex Technology Co Ltd (CATL).

Indonesia aspira a producir 140 gigavatios hora de baterías al 2030, y necesitaría una inversión de unos 35,000 millones de dólares para desarrollar un ecosistema de VE, que incluya vehículos eléctricos, instalaciones de baterías, estaciones de carga, instalaciones de reciclaje e intercambio de baterías, en un plazo de entre cinco y 10 años, dicen las autoridades.

A principios de este año, el Gobierno puso en marcha Indonesia Battery Corporation, una empresa estatal destinada a desarrollar el sector de las baterías del país.

“La planta de litio de Chengxin/Tsingshan en Indonesia se beneficiará de la demanda nacional y está estratégicamente situada para ser el proveedor de litio preferido por los fabricantes de baterías del país, que no tendrán que pagar los gastos de envío ara importar litio”, dijo Sabrin Chowdhury, analista de Fitch Solutions.

También se espera que Tsingshan se beneficie de un proyecto de planta de energía limpia de 2 gigavatios previsto en Indonesia, que ayudará a reducir los costos de energía de la empresa y aumentará su atractivo como proveedor de materiales clave para los vehículos eléctricos con bajas emisiones.

Pero Tsingshan también tiene que superar el reto fundamental de producir de forma rentable productos de litio refinados desde cero.

Al convertir a gran escala el níquel en lingote, un producto intermedio que puede utilizarse para fabricar acero inoxidable y baterías, la empresa demostró una agudeza tecnológica que la puso en el punto de mira de todos los que siguen la cadena de suministro de los vehículos eléctricos.

Sigue habiendo dudas sobre si podrá realizar una hazaña similar con el litio, mucho más escaso, que tiene sus propias características geológicas.

“Es dudoso que puedan desafiar a los cinco grandes del litio”, dijo Gavin Montgomery, director de Wood Mackenzie, refiriéndose a los gigantes del litio Albemarle Corp, Ganfeng Lithium Co Ltd, SQM, Tianqi Lithium Corp y Livent Corp.

“Pero la gente nunca debería subestimar a Tsingshan”.

Comentarios desactivados en Explota Tsingshan beta de litio en Indonesia