Agencias/Ciudad de México.- Antonio Gates, Jared Allen, Eric Allen y Sterling Sharpe fueron elegidos para ingresar al Salón de la Fama del Futbol Americano Profesional, la generación más pequeña que se haya exaltado en 20 años, tras cambios en las reglas antes de esta campaña para hacer más difícil la inducción.
Sharpe ingresó como candidato de los veteranos en la votación anunciada durante la ceremonia de Honores de la NFL y se unirá a Shannon como los primeros hermanos en ser entronizados en el Salón. Eli Manning, dos veces Jugador Más Valioso del Super Bowl, no logró unirse a su hermano mayor Peyton en Canton, Ohio, este año.
La ceremonia de ingreso se llevará a cabo el 2 de agosto del 2025.
“No creo haber asimilado todavía esto”, dijo Sharpe. “Es una de esas situaciones en las que, mientras más cerca estaba de tener una chaqueta del mismo color de la que tiene él… pensé que lo asimilaría de inmediato. Pero no ha ocurrido todavía”.
Aunque la generación pequeña es un cambio respecto a años anteriores, cuando al menos siete personas eran exaltadas en cada una de las 12 clases anteriores, no es algo sin precedentes.
Sólo hubo cuatro nuevos miembros en la generación de 2005 y hubo 18 otros años con tres o cuatro inducidos desde que la primera generación de 17 fue entronizada en 1963.
“Uno casi apreció más esto”, dijo Jared Alllen. “Nada llega fácil. Cuando yo me enteré que había sólo cuatro fue algo más especial. Hay un verdadero énfasis en lo que significa ser miembro del Salón de la Fama. Claramente entendimos eso. Para mí hubo un respiro de alivio”.
Este año se instituyeron nuevas reglas después de una iniciativa de los miembros del Salón de la Fama para hacer el recinto más exclusivo y esto llevó directamente a la generación más pequeña. Los candidatos de la era moderna fueron reducidos de 15 a siete en la etapa final, en lugar de cinco en años anteriores.
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Los 49 votantes tuvieron entonces la oportunidad de votar por cinco de los siete. Cualquiera que alcanzara el 80% o terminara en los tres primeros ingresaba al Salón. En años anteriores, a los cinco finalistas se les daba un voto afirmativo o negativo, y todos ingresaron durante los últimos 17 años.
Los candidatos de las categorías de veteranos, entrenador y contribuyente fueron luego colocados en un grupo. Los votantes eligieron a tres.
Asimismo, los candidatos necesitaban un apoyo del 80%. El mejor clasificado ingresaba automáticamente incluso si no alcanzaba el porcentaje.
Gates fue votado en su segundo año de elegibilidad. Jugó sólo baloncesto en la universidad antes de convertirse en uno de los mejores alas cerradas de la NFL después de ser reclutado por los Chargers.
Se convirtió en All-Pro apenas en su segunda temporada en 2004. Fue All-Pro nuevamente las siguientes dos campañas y continuó teniendo una carrera de 16 años con los Chargers. Gates terminó con 955 recepciones para 11.841 yardas y un récord de la NFL para alas cerradas con 116 recepciones de touchdown. Ocupa el séptimo lugar de todos los tiempos en recepciones de touchdown.
Jared Allen fue All-Pro cuatro veces y terminó su carrera con 136 capturas. Lideró la liga con 22 en 2011 por Minnesota.
También lideró la liga en capturas con 15 y media para Kansas City en 2007 y alcanzó cifras de dos dígitos en siete temporadas consecutivas. Su último encuentro fue una derrota en el Super Bowl con Carolina contra Denver en la temporada 2015.
Eric Allen destacó durante 14 temporadas como un destacado esquinero en la NFL y nunca tuvo que cambiar a la posición de seguridad a medida que envejecía. La carrera de Allen abarcó desde el partido conocido como ”Fog Bowl” en 1988 cuando brilló para Filadelfia como novato hasta el duelo de la “Regla Tuck” en la temporada 2001 para Oakland.
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Aquel fue su último juego.
Allen terminó con 54 intercepciones, incluyendo ocho retornadas para touchdowns. Fue All-Pro de primer equipo en 1989 y tuvo otras dos temporadas como selección de segundo equipo.
Sharpe tuvo una carrera corta pero productiva para Green Bay de 1988 a 1994. Su mejor temporada fue en 1992, cuando se convirtió en el sexto jugador en ganar la triple corona de recepciones, estableciendo un récord de la NFL con 108 recepciones para 1.461 yardas y 13 touchdowns.
Rompió su propio récord con 112 recepciones en 1993 y lideró la NFL con 18 recepciones de touchdown en su última temporada, 1994, antes de que una lesión en el cuello cortara su carrera.
Sharpe fue All-Pro tres veces y tuvo 595 recepciones para 8.134 yardas y 65 TDs. Solo Jerry Rice lo superó en recepciones y recepciones de anotación durante su carrera de siete años.
Los hermanos Sharpe se unirán a tres duplas padre-hijo en el Salón: Tim y Wellington Mara; Art Rooney Sr. y Dan Rooney; y Ed y Steve Sabol.
Los otros cuatro candidatos de la era moderna que alcanzaron la etapa final pero no lograron ingresar fueron Willie Anderson, Torry Holt, Luke Kuechly y Adam Vinatieri. Estos cuatro avanzan automáticamente a los últimos 15 para la votación del próximo año.
Los otros ocho finalistas que fueron eliminados antes fueron Manning, Jahri Evans, Steve Smith Sr., Terrell Suggs, Fred Taylor, Reggie Wayne, Darren Woodson y Marshal Yanda.
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Los candidatos veteranos que no lograron ingresar fueron Maxie Baughan y Jim Tyrer. Mike Holmgren se quedó corto como entrenador y Ralph Hay como contribuyente.
Josh Allen superó a Lamar Jackson en la carrera más reñida por el premio de la AP al Jugador Más Valioso de la NFL desde 2016, cuando Matt Ryan venció a Tom Brady.
Allen, quien llevó a Buffalo a un quinto título consecutivo de la División Este de la Conferencia Americana, obtuvo 27 votos de primer lugar frente a los 23 de Jackson, quien ha obtenido el premio en dos ocasiones.
El quarterback de los Bills se impuso con 383 puntos. Recibió 22 votos de segundo lugar y uno de tercero.
Jackson, quien llevó a los Ravens a un segundo campeonato consecutivo de la División Norte de la Americana, obtuvo 26 votos de segundo lugar y uno de cuarto para un total de 362 puntos.
Saquon Barkley, corredor de los Eagles, terminó tercero (120 puntos) seguido por el mariscal de campo de los Bengals, Joe Burrow (82), y el quarterback de los Lions, Jared Goff (47).
Allen lanzó para 3.731 yardas y 28 anotaciones y seis intercepciones. Su índice de pasador fue de 101.4. Corrió para 531 yardas y 12 anotaciones, convirtiéndose en el primer jugador en la historia de la NFL en hilar cinco temporadas consecutivas con al menos 40 touchdowns totales.
Jackson estableció los máximos números de su carrera con 4,172 yardas por pase, 41 anotaciones y apenas cuatro intercepciones. Su rating fue de 119.6, el más alto de la NFL.
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Recibió 30 votos de primer lugar frente a los 18 de Allen para ganar los honores de primer equipo All-Pro de la AP.
La última vez que un jugador de primer equipo All-Pro no ganó el premio al Jugador Más Valioso de la NFL fue en 1987. John Elway fue el galardonado esa temporada y Joe Montana formó parte del primer equipo All-Pro.
A diferencia del premio al Jugador Más Valioso, el All-Pro es un reconocimiento estadístico.
Kevin O’Connell, superó a Dan Campbell para el premio de la AP al Entrenador del Año de la NFL después de llevar a los Vikings de Minnesota a 14 victorias con el mariscal de campo Sam Darnold.
Los Vikings, que según casi todos los pronósticos terminarían últimos en la División Norte de la Conferencia Nacional, terminaron jugando por un título divisional y el puesto de primeros preclasificados en el último partido de la temporada regular. Perdieron contra los Lions y luego fueron eliminados de los playoffs por los Rams.
O’Connell obtuvo 25 votos de primer lugar, 18 para segundo y siete para tercero, apareciendo en las 50 papeletas.
Campbell, quien guio a Detroit a 15 victorias, un récord de la franquicia, obtuvo 19 votos de primer lugar para terminar segundo. Andy Reid de Kansas City (4), Sean Payton de Denver (1) y Dan Quinn de Washington (1) también recibieron votos de primer lugar.
Jared Verse, ala defensiva de los Rams de Los Ángeles, fue la elección abrumadora de la AP para el Novato Defensivo del Año.
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Verse tuvo cuatro capturas y media, y lideró a todos los novatos en golpes al mariscal de campo (18), presiones (77) y apuros (56). También realizó 11 tacleadas para pérdida de yardas.
Recibió 37 votos de primer lugar, muy por delante del esquinero novato de los Eagles, Quinyon Mitchell, quien obtuvo nueve.
El tackle defensivo de los Rams, Braden Fiske; el esquinero de los Chargers, Tarheeb Still; el safety de los Texans, Calen Bullock, y el esquinero de los Commanders, Mike Sainristil, recibieron un voto cada uno.
Joe Burrow, se llevó el premio de la AP al Regreso del Año. Se recuperó de una cirugía de muñeca en 2023 para liderar la NFL con 4.918 yardas por pase y 43 pases de touchdown.
Burrow jugó los 17 partidos de los Bengals (9-8) después de perderse siete por lesiones la temporada anterior. Recibió 31 votos de primer lugar y terminó muy por delante del corredor de los Chargers, J.K. Dobbins (3).
El mariscal de campo de los Vikings, Sam Darnold (8); el safety de los Bills, Damar Hamlin (3), y el esquinero de los Patriots, Christian Gonzalez (2), también recibieron votos de primer lugar.
Saquon Barkley, se llevó con facilidad el premio de la AP al Jugador Ofensivo del Año después de correr para 2,005 yardas, la octava mejor marca en la historia de la NFL, en su primera temporada con los Eagles.
Barkley se sentó en el último encuentro de Filadelfia en la temporada regular cuando estaba a 101 yardas de romper el récord de yardas en una temporada, establecido por Eric Dickerson. Sin embargo, ha corrido para 442 yardas y cinco touchdowns en los playoffs.
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Necesita 30 yardas por tierra en el Super Bowl para establecer el récord de una sola temporada, incluyendo los playoffs. Terrell Davis, miembro del Salón de la Fama, corrió para 2,476 yardas en 19 compromisos de temporada regular y playoffs en 1998 por los Broncos de Denver, eventuales campeones del Super Bowl.
Barkley recibió 35 de 50 votos de primer lugar.
El mariscal de campo de los Ravens, Lamar Jackson, obtuvo 12 votos de primer lugar y su compañero Derrick Henry consiguió uno. El mariscal de campo de los Bengals, Joe Burrow, y el quarterback de los Bills, Josh Allen, también recibieron un voto de primer lugar cada uno.
Ja’Marr Chase, receptor de los Bengals, terminó tercero en la elección a pesar de no recibir votos de primer lugar. Chase, una selección unánime para All-Pro, ganó la triple corona de recepción, liderando la liga con 127 recepciones, 1,708 yardas y 17 touchdown.
Patrick Surtain II, se convirtió en el séptimo esquinero en ganar el galardón de la AP al Jugador Defensivo del Año de la NFL.
El All-Pro de los Broncos permitió solo 37 recepciones y consiguió cuatro intercepciones. Los mariscales de campo contrarios tuvieron un índice de pasador de 61,1 contra él.
Surtain recibió 26 votos de primer lugar, superando al ala defensiva de los Bengals, Trey Hendrickson (11), y al ala de los Browns, Myles Garrett (5).
El ala de los Steelers, T.J. Watt (3); el apoyador de los Eagles, Zack Baun (2); el safety de los Lions, Kerby Joseph (1), y los alas de los Vikings, Andrew Van Ginkel (1) y Jonathan Greenard (1), también recibieron votos de primer lugar.
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Stephon Gilmore fue el último esquinero en ganar el premio al Jugador Defensivo del Año en 2019. Charles Woodson, Deion Sanders, Rod Woodson, Lester Hayes y Mel Blount lo consiguieron anteriormente.
Jayden Daniels, fue una elección casi unánime para el Novato Ofensivo del Año después de ayudar a que los Commanders de Washington ganaran 12 partidos.
El mariscal de campo elegido al Pro Bowl recibió 49 de 50 votos de primer lugar. El otro fue para el ala cerrada de los Raiders, Brock Bowers.
Daniels, la segunda selección global, lanzó para 3.568 yardas y 25 touchdowns. Registró un rating de 100.1. También corrió para 891 yardas y seis anotaciones.
Llevó a los Commanders a un par de victorias en playoffs como visitante antes de caer contra los Eagles en la final de la Nacional.
El mariscal de campo de los Broncos, Bo Nix, terminó tercero en la votación; el receptor abierto de los Jaguars, Brian Thomas Jr., fue cuarto, y el receptor abierto de los Giants, Malik Nabers, quedó quinto.
Ben Johnson, fue una elección clara para el Entrenador Asistente del Año de la NFL, al obtener 29 votos de primer lugar.
Johnson, coordinador ofensivo de los Lions, lideró un equipo que fue primero en anotaciones (33.22 puntos por encuentro) y segundo en yardas (409.5). Fue contratado como entrenador de los Bears de Chicago después de que Detroit quedó eliminado en los playoffs.
El coordinador defensivo de los Vikings, Brian Flores, recibió tres votos de primer lugar y terminó segundo en la votación. El ex coordinador defensivo de los Lions, Aaron Glenn, quien fue contratado para dirigir a los Jets de Nueva York, recibió seis votos de primer lugar y quedó tercero.
Un panel nacional de 50 miembros de los medios que cubren regularmente la liga completó la votación antes de que comenzaran los playoffs.
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