Insurgente Press, Ciudad de México.- El secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Alfonso Durazo, indicó que si no se tiene la capacidad para generar oportunidades para jóvenes, no se podrán garantizar mejores niveles de seguridad, “así tengamos un policía en cada esquina”.
Durante la firma de convenio “Jóvenes construyendo el futuro”, entre las secretarías de Seguridad y del Trabajo, Durazo Montaño dijo que las causas fundamentales de la inseguridad están en el abandono, la marginación, desigualdad, pobreza y en la falta de oportunidades.
“Si no atendemos los problemas de violencia desde sus causas, nunca podremos resolverlos, si no dotamos a los jóvenes de las herramientas que les permita decir no al delito, a la violencia, seguiremos siendo testigos de episodios trágicos”, sostuvo.
En ese sentido adelantó que en la sesión del Consejo Nacional de Seguridad Pública pedirá a los gobiernos de los estados que se incorporen al programa para capacitar a los jóvenes y que se puedan incorporar al mercado laboral.
“Si no formamos los cuadros que construirán el futuro, no podremos poner fin al flagelo de la violencia. La Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana será tutora de jóvenes que quieran incorporarse a algunos de los programas de capacitación”, indicó luego de informar que en los próximos meses ofrecerán alrededor de mil 200 espacios de aprendizaje.
En su oportunidad, la secretaria del Trabajo, Luisa María Alcalde Luján, mencionó que el programa pretende ser una parte fundamental de la estrategia de seguridad y pacificación del país.
“Estamos convencidos de que si atendemos las causas, la raíz de la problemática que desató esos niveles de violencia, vamos a poder ayudar; y atender las causas es dar opciones y alternativas a los jóvenes”, sostuvo.
Acompañada por el Subsecretario de Planeación, Prevención, Protección y Coordinación de la SSPC, Leonel Cota Montaño, Alcalde Luján mencionó que ya tienen más de un millón de jóvenes que han dicho “yo quiero esas posibilidades”.
Mencionó que alrededor del país se calculan 2 millones 300 mil jóvenes de 18 a 29 años que no estudian ni trabajan, “pero es porque no tienen la posibilidad de hacerlo porque no había una política pública que diera atención”.