Agencias, Ciudad de México.- Escondido debajo de la superficie repleta de cráteres de Mimas, una de las lunas más pequeñas de Saturno, se encuentra un océano global de agua líquida.

Se cree que el océano llena la mitad del volumen de Mimas, según Lainey. Sin embargo, apenas representa del 1,2% al 1,4% de los océanos de la Tierra dado el pequeño tamaño de la luna. Pese a ser tan pequeña, Mimas cuenta con el segundo cráter de impacto más grande de cualquier luna en el sistema solar, razón por la cual se compara con la estación espacial ficticia de la Estrella de la Muerte de la saga “Star Wars”.

“La idea de que unas lunas relativamente pequeñas y heladas puedan albergas océanos jóvenes es inspiradora”, escribieron Matija Cuk del Instituto SETI y Alyssa Rose Rhoden, del Instituto de Investigación del Suroeste en un editorial que acompañaba el artículo. No formaron parte del estudio.

Este océano interior, que se cree tiene entre 5 y 15 millones de años, es demasiado joven para marcar la superficie de la luna y podría tener una temperatura general de alrededor del punto de congelación, según Lainey. Pero en el fondo marino, comentó, la temperatura podría ser mucho más cálida.

Este sorprendente descubrimiento, dirigido por el Dr. Valéry Lainey del Observatorio de París-PSL y publicado en la revista Nature, revela un océano “joven” formado hace apenas entre 5 y 15 millones de años, lo que convierte a Mimas –la luna que recuerda a la ‘Estrella de la muerte’ de la saga ‘Star-Wars’– en un objetivo primordial para estudiar los orígenes de la vida en nuestro Sistema Solar.

“Mimas es una luna pequeña, de sólo unos 400 kilómetros de diámetro, y su superficie llena de cráteres no dejaba entrever el océano oculto debajo”, dice el Dr. Nick Cooper, coautor del estudio e investigador honorario de la Unidad de Astronomía de la Facultad de Ciencias Físicas y Químicas de la Universidad Queen Mary de Londres.

“Este descubrimiento añade a Mimas a un exclusivo club de lunas con océanos internos, incluidas Encélado y Europa, pero con una diferencia única: su océano es notablemente joven, se estima que sólo tiene entre 5 y 15 millones de años.”

El coautor Nick Cooper de la Universidad Queen Mary de Londres dijo que la existencia de un océano de agua líquida “extremadamente joven” convierte a Mimas en el primer candidato para estudiar el origen de la vida.

Esta temprana edad, determinada mediante un análisis detallado de las interacciones de marea de Mimas con Saturno, sugiere que el océano se formó recientemente, basándose en el descubrimiento de una irregularidad inesperada en su órbita. Como resultado, Mimas proporciona una ventana única a las primeras etapas de la formación de los océanos y al potencial para que surja vida.

“La existencia de un océano de agua líquida recientemente formado convierte a Mimas en un candidato ideal para el estudio de los investigadores que investigan el origen de la vida”, explica el Dr. Cooper. El descubrimiento fue posible gracias al análisis de datos de la nave espacial Cassini de la NASA, que estudió meticulosamente Saturno y sus lunas durante más de una década. Al examinar de cerca los cambios sutiles en la órbita de Mimas, los investigadores pudieron inferir la presencia de un océano oculto y estimar su tamaño y profundidad.

El Dr. Cooper continúa: “Este ha sido un gran esfuerzo de equipo, con colegas de cinco instituciones diferentes y tres países diferentes que se unieron bajo el liderazgo del Dr. Valéry Lainey para descubrir otra característica fascinante e inesperada del sistema de Saturno, utilizando datos de la misión Cassini”.

El descubrimiento del joven océano de Mimas tiene importantes implicaciones para nuestra comprensión del potencial de vida más allá de la Tierra. Sugiere que incluso las lunas pequeñas y aparentemente inactivas pueden albergar océanos ocultos capaces de sustentar condiciones esenciales para la vida, según los autores.

Descubierto en 1789 por el astrónomo inglés William Herschel, Mimas recibe su nombre de un gigante de la mitología griega.

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