Agencias/Ciudad de México.- El ‘software’ que Volkswagen AG utilizó para alterar las emisiones de los automóviles a determinadas temperaturas constituye un dispositivo de desactivación ilegal si se utilizó durante la mayor parte del año, dictaminó el máximo tribunal de la UE en una sentencia que, según la empresa, confirma que su software estaba permitido.
La sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) es el último paso en una serie de casos tras la admisión por parte del fabricante de automóviles alemán en 2015 de haber cometido infracciones en el escándalo conocido como “Dieselgate”.
“Un dispositivo que garantiza el cumplimiento de los valores límite de emisiones de óxidos de nitrógeno únicamente en la ventana de temperaturas constituye, en principio, un dispositivo de desactivación”, dijo el TJUE en un comunicado.
La sentencia se refiere al software que Volkswagen instaló para controlar la recirculación de los gases de escape, con el fin de reducir las emisiones de óxidos de nitrógeno (NOx) que pueden causar problemas respiratorios en los seres humanos.
El tribunal dijo que este software redujo la recirculación, eventualmente a cero, a temperaturas fuera de 15-33 Celsius, aumentando las emisiones de NOx por encima de los límites legales de la UE.
El tribunal dijo que las temperaturas por debajo de 15ºC son normales en la UE y que el dispositivo de desactivación, por tanto, había degradado los controles de emisiones en condiciones de uso normal.
Si un dispositivo estaba estrictamente diseñado para evitar daños graves en el motor que pudieran causar un accidente, entonces podría no ser ilegal, dijo el tribunal, pero que incluso en este caso, el dispositivo de desactivación sería ilegal si funcionaba la mayor parte del año en condiciones normales de conducción.
“Volkswagen AG ve confirmada su posición jurídica por la sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea. De acuerdo con los criterios que el tribunal de la UE ha establecido en su sentencia, las ventanas de temperatura utilizadas en los vehículos del Grupo VW están permitidas”, dijo Volkswagen en un comunicado.
“Protegen del riesgo inmediato para el motor en forma de daños o accidentes. Los riesgos son tan graves que representan un peligro concreto al operar el vehículo”, dijo.
Los consumidores austriacos que compraron los vehículos afectados entre 2011 y 2013 están intentando anular esos contratos de venta.
Los tribunales austriacos que se ocupan de los casos relacionados con el ‘software’ deben decidir si los dispositivos estaban permitidos en los casos específicos a los que se refiere el caso, dijo el tribunal de la UE.
El tribunal dijo que un vendedor puede ser obligado a reparar o reemplazar los bienes que no se ajustan a su contrato de venta y que el no hacerlo podría dar derecho al consumidor a una reducción del precio o la cancelación de su pedido.