Agencias / Ciudad de México.- El banco británico HSBC permitió que se transfirieran millones de dólares por todo el mundo de manera fraudulenta incluso después de tener constancia del engaño, de acuerdo con documentos secretos filtrados, informó la agencia británica BBC.
La entidad bancaria, la mayor del Reino Unido, movió el dinero mediante su negocio en Estados Unidos a cuentas del HSBC en Hong Kong en 2013 y 2014, según se desprende del fichero confidencial.
Los documentos fueron filtrados al portal Buzzfeed y compartidos con el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ) mientras que el programa británico de investigación Panorama lideró la pesquisa para el canal púbico BBC.
Esa cadena indicó hoy que los ficheros destapados detallan cuál fue el papel de ese banco en un fraude de inversión valorado en 62 millones de libras (80 millones de dólares).
Wonder how #FinCENFiles journalists explored the documents?
Meet #ICIJDatashare, the free software developed by us to search, analyze, star, tag and recommend documents – collaboratively!Download the latest version (still in beta): https://t.co/K2orT9wv3f
— ICIJ (@ICIJorg) September 20, 2020
El HSBC siempre ha sostenido que cumplió con sus obligaciones legales a la hora de denunciar esa actividad.
Los documentos muestran también que la estafa de inversión -conocida como esquema Ponzi- comenzó al poco de que el banco británico fuera sancionado con una multa por valor de 1,400 millones de libras (1,900 millones de dólares) en Estados Unidos por operaciones de blanqueo de dinero y desde entonces se había comprometido a erradicar ese tipo de prácticas.
Según la BBC, abogados de algunos de los inversores que fueron embaucados en esas operaciones consideraron que la entidad debería haber adoptado medidas antes para cerrar las cuentas de los defraudadores.
Los ficheros FinCEN son 2,657 documentos, entre los que figuran 2,100 informes sobre actividades sospechosas (o SARs, en inglés), que incluyen información sobre transacciones que levantan sospechas a los propios bancos.
Estos envían esos informes a las autoridades pertinentes si sospechan que sus clientes están incurriendo en actividades ilícitas y en caso de que tengan evidencias de prácticas de actividad delictiva deben dejar de mover su dinero.
La filtración muestra cómo se blanqueó dinero mediante algunos de los mayores bancos del mundo y cómo los delincuentes emplearon compañías británicas anónimas para ocultar el dinero.
Fergus Shiel, parte de ese consorcio, indicó que los ficheros aportan conocimiento sobre “lo que saben los bancos de los vastos flujos de dinero sucio que circula por todo el globo”.
NEW: Together with @buzzfeednews and 108 other media organizations we reveal the #FinCENFiles – our latest cross-border investigation.
Using super secretive bank documents and months of reporting, we expose how banks fail to stop dirty money flows. https://t.co/hBG1poGsho
— ICIJ (@ICIJorg) September 20, 2020
Bancos desafían regulaciones de EEUU para servir a oligarcas, delincuentes y terroristas
Varios bancos globales movieron grandes sumas de fondos supuestamente ilícitos durante casi dos décadas, pese a las advertencias sobre las organizaciones con las que estaban tratando, reportaron el domingo BuzzFeed y otros medios, citando documentos presentados por bancos al gobierno.
Los reportes se basaron parcialmente en documentos presentados por bancos y otras firmas financieras a la Red contra los Delitos Financieros (FinCEN) del Departamento del Tesoro de Estados Unidos.
Estos fueron obtenidos por BuzzFeed News y compartidos con el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ por sus siglas en inglés) y otras organizaciones de medios.
El ICIJ reportó que los documentos, a los que llaman “los expedientes FinCEN”, identifican más de 2 billones de dólares en transacciones entre 1999 y 2017 que fueron marcadas por departamentos internos de cumplimiento de normas en instituciones financieras como posibles operaciones de lavado de dinero u otras actividades criminales.
Los nombres de cinco bancos globales se repiten con mayor frecuencia en los documentos: HSBC, JPMorgan, Deutsche Bank, Standard Chartered y Bank of New York Mellon, informó el ICIJ.
Un banco tiene un máximo de 60 días para presentar un informe de actividad después de la fecha de detección inicial de una transacción denunciable, según la Oficina del Contralor de la Moneda del Departamento del Tesoro.
El informe del ICIJ dijo que en algunos casos los bancos no informaban de las transacciones sospechosas hasta años después de haberlas procesado.
Los informes también mostraron que los bancos a menudo movían fondos para empresas que estaban registradas en paraísos fiscales, como las Islas Vírgenes Británicas, y que no conocían al propietario final de la cuenta, según el informe.
Entre los tipos de transacciones que se destacó el informe había fondos procesados por JPMorgan para personas y empresas potencialmente corruptas de Venezuela, Ucrania y Malasia; dinero de un esquema Ponzi que se movía a través de HSBC; y dinero vinculado a un multimillonario ucraniano procesado por el Deutsche Bank.
FinCEN dijo en un comunicado en su sitio web el 1 de septiembre que tenía conocimiento de que varios medios tenían intenciones de publicar una serie de artículos basados en Reportes de Actividades Sospechosas revelados ilegalmente, además de otros documentos, y dijo que “la revelación no autorizada de RAS es un delito que puede impactar la seguridad nacional de Estados Unidos”.
Representantes del Tesoro de Estados Unidos no respondieron inmediatamente a un mensaje de correo electrónico pidiendo comentarios el domingo.
En una declaración a Reuters, HSBC dijo que “toda la información proporcionada por el ICIJ es histórica”. El banco dijo que a partir de 2012 “se embarcó en un camino de varios años para revisar su capacidad de combatir los delitos financieros en más de 60 jurisdicciones”.
Standard Chartered dijo en una declaración a Reuters: “nos tomamos nuestra responsabilidad de luchar contra los delitos financieros muy en serio y hemos invertido sustancialmente en nuestros programas de control”.
BNY Mellon dijo a Reuters que no podía comentar sobre los SAR específicos. “Cumplimos plenamente con todas las leyes y regulaciones aplicables y ayudamos a las autoridades en la importante labor que realizan”, añadió.
JPM no respondió inmediatamente a una solicitud de comentarios, pero dijo en una declaración a BuzzFeed que “miles de empleados y cientos de millones de dólares se dedican a ayudar a apoyar los esfuerzos de cumplimiento de la ley y de seguridad nacional”.
El Deutsche Bank dijo en un comunicado el domingo que en la “medida en que la información a la que hace referencia el ICIJ se deriva de los SAR, cabe señalar que se trata de información que los bancos identifican y presentan proactivamente a los gobiernos de conformidad con la ley”.
#FinCENFiles, based on a secret cache of documents shared with us by @BuzzFeedNews, shows how big banks have profited even after regulators have fined the institutions and attempted crackdowns. https://t.co/hBG1poGsho pic.twitter.com/oUI1UFAnmW
— ICIJ (@ICIJorg) September 21, 2020
Alertas de los bancos tardaron en llegar
Los SAR se confeccionan cuando los bancosglobales – aquellos que tienen acceso a la Reserva Federal de Estados Unidos para compensar el flujos de dólares entre ellos-, o los que actúan como susbancos “corresponsales” – observan una transacción de dinero potencialmente sospechosa que pasa por ese país. Bajo la ley de Secreto Bancario, las instituciones financieras están obligadas a ayudar a los organismos oficiales norteamericanos a detectar y prevenir maniobras de lavado de dinero, así como también informar a la FinCEN sobre movimientos que puedan indicar una actividad irregular o presuntamente delictiva.
Los SARs reflejan las preocupaciones de los organismos de control dentro de los bancos y las instituciones financieras y no son necesariamente indicativos de una conducta delictiva o una evidencia de irregularidad. Pero sí pueden potencialmente implicar delitos financieros, que involucran a clientes con perfiles considerados de “alto riesgo” o que estuvieron bajo investigación judicial, o con comentarios “negativos” en los medios por las sospechas alrededor de sus actividades. En ese sentido, funcionan como una forma de alertar a los reguladores gubernamentales y a las fuerzas de seguridad sobre actividades presuntamente irregulares y posibles delitos.
Pero la investigación muestracómo las instituciones bancarias importantes, incluidos HSBC, Deutsche Bank, JP Morgan Chase y Barclays, fracasaron en numerosas oportunidades en frenar flujos de dinero ilícito alrededor del mundo.
Y si bien los bancos de Estados Unidos están autorizados a tomar medidas para detener operaciones sospechosas detectadas por sus sistemas, suelen optar por enviar un reporte sospechoso o SAR a la FinCEN en el Departamento del Tesoro, una vez realizada la operación.Así, buscan cumplir con la normativa y evitar sanciones, a la vez que no interfieren en el movimiento global de dinero sucio.
Un análisis de ICIJ encontró que los bancos que aparecen en FinCEN Files procesaban regularmente transacciones con compañías registradas en paraísos fiscales, sin conocer al dueño final de la cuenta. Al menos el 20% de los informes contenían un cliente con una dirección en uno de los principales paraísos financieros del mundo, las Islas Vírgenes Británicas,mientras que muchos otros proporcionaron direcciones en el Reino Unido, los Estados Unidos, Chipre, Hong Kong, los Emiratos Árabes Unidos, Rusia y Suiza.
En la mitad de los reportes, los bancos no habían completado el proceso de identificar a las partes intervinientes en una operación, y no tenían información sobre una o más entidades detrás de las transacciones.
Por ejemplo, la investigación detectó que se reportaron más de USD 4.800 millones entre 2009 y 2017 en transacciones sospechosas con vínculos con Venezuela. Casi el 70% de ese monto tenía como partido a una entidad del gobierno de ese país, como el Ministerio de Hacienda o la petrolera estatal.
Los bancos podrían servir como un cuello de botella, cortando el flujo de dinero ilícito en todo el mundo, o al menos, los giros a empresas pantalla anónimas. Pero los archivos de FinCEN sirven para mostrar cómo los bancos encargados de detener la actividad sospechosa realmente se benefician enormemente de ella. Los incentivos financieros de las entidades apuntan a mantener en movimiento ese dinero sucio.
Incluso cuando presentan un SAR que por sí solo no detiene las transacciones de dinero-, a menudo no lo hacen hasta mucho después de que el dinero se haya agotado. Al analizar los documentos, ICIJ encontró que los bancos esperaron una media de 166 días, más de cinco meses, después de detectar una transacción sospechosa para alertar a FinCEN.
The #FinCENFiles reveals more than $2 trillion worth of transactions. Read the full story: https://t.co/uYgb6WCjC8 pic.twitter.com/PzrKm2iuiB
— ICIJ (@ICIJorg) September 20, 2020
El descargo de los bancos
Grandes bancos consultados por ICIJ negaron las irregularidades sistemáticas y sostuvieron que están trabajando para mejorar sus programas para prevenir el lavado de dinero y detectar a los clientes involucrados en actividades delictivas.
“A partir de 2012, HSBC se embarcó en un viaje de varios años para revisar su capacidad para combatir el crimen financiero”, dijo Heidi Ashley, vocero del banco. “HSBC es una institución mucho más segura de lo que era en 2012.”
El vocero del Standard Chartered dijo que las autoridades de Estados Unidos y el Reino Unido habían reconocido públicamente que el Grupo había experimentado “una transformación integral y positiva en los últimos años”. Y agregaron: “En 2019 monitoreamos más de 1.200 millones de transacciones para detectar posibles actividades sospechosas y examinamos más de 157 millones de transacciones para verificar el cumplimiento de los requisitos de sanciones aplicables. La realidad del sistema financiero global es que siempre habrá intentos de lavar dinero y evadir sanciones; la responsabilidad de los bancos es construir sistemas de control y monitoreo efectivos y trabajamos en estrecha colaboración con los reguladores y las fuerzas del orden para llevar a los perpetradores ante la Justicia”.
Del otro lado del mostrador, periodistas del Consorcio descubrieron que el Departamento de Justicia de Estados Unidos aprueba acuerdos laxos que difieren el enjuiciamiento de los bancos y no avanzan en la acusación de los ejecutivos responsables. Así, junto a otra autoridades gubernamentales, perpetúan el status quoal imponer multas por no prevenir acabadamente lavado de dinero, que terminan siendo una fracción de las ganancias obtenidas.
Wondering how big well-known banks are caught up in international money laundering?
Meet Ivan. He'll help you understand. #FinCENFiles https://t.co/GVglOLHtMf
— ICIJ (@ICIJorg) September 20, 2020
El impacto social
“No solamente los delincuentes son los que blanquean el dinero. Los bancos tienen un papel muy importante que desempeñar, porque son el sistema mediante el cual ese dinero se mueve desde un país a otro más agradable y seguro”, sostuvo Graham Barrow, experto en blanqueo de dinero, consultado por ICIJ.
En su opinión, este es un problema enorme y todos, en última instancia, pagamos el precio por esto. “Porque este dinero proviene de nuestros impuestos y nuestras contribuciones a la sociedad cuando debería gastarse en proporcionarnos buenas carreteras, buenos transportes, buenas escuelas y un buen servicio de salud. Necesitamos, como sociedad, hacer algo al respecto”, enfatizó.
En este sentido, este trabajo de periodismo colaborativo transnacional pudo rastrear el rol jugado por los bancos en ocultar el dinero desviado de fondos públicos, de estafas a jubilados, o generado a través de la venta de drogas, la extracción ilegal de oro y otras actividades ilegales.
FinCEN Filestambiénmuestra cómo esa operatoria bancaria impacta en la vida de muchos ciudadanos, víctimas de la evasión de impuestosque priva a los estados de atender necesidades de los que más necesitan, y expone cómo estafadores Ponzi trasladan las gananciasmás allá del alcance de las autoridades,y funcionarios y empresarios corruptos engrosan fortunas mal habidas y consolidan su poder.
Will Fitzgibbon, miembro de ICIJ, detalló las consecuencias del consumo del fentanilo (un narcótico sintético opioide utilizado en medicina por sus acciones de analgesia y anestesia), y descubrió que se necesitaba una red de traficantes que se remontara a China, confiando en el fácil movimiento de dinero sucio a través de instituciones financieras, para entregar opioides a las zonas rurales de Carolina del Norte y Estados Unidos. En la familia de Joe Williams, de 31 años, nadie sabía qué lo había matado. No tenían ni idea de que era uno de los primeros de decenas de miles de estadounidenses que caerían víctimas del narcótico más letal del mundo.
Para que los opioides diseñados en laboratorio llegaran hasta esa zona rural de Carolina del Norte y el resto de los Estados Unidos, fue necesaria una red de traficantes que puede ser rastreada hasta China y que puede operar gracias a la fácil circulación de dinero sucio a través de bancos conocidas en todo el mundo.
En el corazón de estas historias hay personas reales heridas de manera real: familias que han perdido ahorros debido a esquemas financieros depredadores, atletas olímpicos defraudados de sus victorias por funcionarios corruptos y padres que lloran a hijos e hijas caídos en la batalla.
“Es posible que la gente no esté al tanto de problemas como el lavado de dinero y las empresas offshore, pero sienten los efectos todos los días porque estos son los que hacen que los delitos a gran escala paguen, desde los opioides hasta el tráfico de armas y el robo de beneficios de desempleo relacionados con el Covid-19”, advirtió Jodi Vittori, experta en corrupción del Carnegie Endowment for International Peace.