Agencias / Ciudad de México.- El Barcelona anunció prórrogas contractuales para cuatro jugadores del primer equipo, incluido el experimentado central Gerard Piqué y el portero alemán Marc André ter Stegen.
Piqué, un exinternacional español de 33 años que llegó al Barcelona en 2008 procedente del Manchester United, fue expulsado en la victoria del martes por 5-1 en la Liga de Campeones sobre el Ferencvaros húngaro.
El zaguero extenderá su estancia en el Barcelona hasta 2024.
Ter Stegen también firmó un nuevo contrato hasta junio de 2025, mientras que al central Clement Lenglet y el mediocampista Frenkie de Jong firmaron contratos hasta junio de 2026.
“Estos acuerdos se han cerrado tras semanas de negociaciones e incluyen una adecuación salarial temporal, dadas las actuales circunstancias derivadas por la crisis provocadas por la COVID-19”, dijo el Barça en un comunicado.
El plan de la directiva para reducir 165 millones de euros (antes del 5 de noviembre) pasa por el aplazamiento en los pagos de un porcentaje del salario, más que por una rebaja estructural, para que, cuando los ingresos vuelvan a la normalidad, los jugadores recuperen el dinero pendiente.
“Los jugadores, pese a no alcanzar ni el 10% del total de empleados, suponen un 70% de los gastos”
El motivo principal de disputa es la forma en la que el club quiere abrir estas negociaciones, con un marco común para todos los empleados del club, algo que “sería válido en cualquier otra empresa, pero que no tiene en cuenta la condición especial de los futbolistas”, señalan los abogados.
Tanto el vestuario como el resto de trabajadores coinciden en que se debería tratar por un lado el caso de los futbolistas y por el otro el del resto de los empleados. Esta mesa de negociación, convocada para este miércoles, debería trazar los pasos a seguir en tema de plazos y de formas para llevar a cabo la rebaja necesaria.
Eso sí, de los trece miembros presentes en la reunión, solo uno sería en representación de los jugadores, algo que estos consideran inadecuado e irreal, y que han calificado de sinsentido, ya que, pese a no alcanzar ni el 10% del total de empleados, sí suponen un 70% de los gastos.
Por si era poco, otro problema que preocupa a la plantilla pasa por el tiempo que se necesite para adecuar los salarios. Hay varios jugadores cuyos contratos terminan en una o dos temporadas, “obligándoles” a estirar su presencia en el Barça más allá de sus contratos. De este problema se ha podido librar Piqué con su reciente renovación, ya que su contrato terminaba en 2022, pero Messi, que se marcharía en 2021, todavía tiene que solucionar esta polémica.
‼️ The players sent a burofax yesterday afternoon maintaining their position for a joint bargaining agreement with the club, but today, without the players, these negotiations have already started. [@QueThiJugues via @santiovalle] pic.twitter.com/gXsH9DsUQ0
— barcacentre (@barcacentre) October 21, 2020
