Agencias/Ciudad de México.- La empresa deportiva PUMA redujo sus emisiones de gases de efecto invernadero un 24 % en 2023 respecto a 2022, a pesar del fuerte crecimiento de sus ventas.

Esto fue posible gracias a que sus principales proveedores duplicaron su uso de energía renovable en 2023 en comparación con el año anterior, al aumento del uso de materiales menos intensivos en carbono en sus productos, a la introducción de tarifas de envío bajas en carbono por parte de Maersk, socio logístico de PUMA, al uso de electricidad renovable o a la compra de certificados de energía renovable en sus propias operaciones y a la inversión en vehículos eléctricos en su flota de automóviles. En comparación con la referencia de 2017, esto supone una reducción absoluta de las emisiones de gases de efecto invernadero del 29 %.

“Estamos muy orgullosos del progreso que hemos logrado en nuestro viaje de sostenibilidad en 2023, especialmente en lo que respecta a la reducción de gases de efecto invernadero”, dijo Anne-Laure Descours, director de compras de PUMA. “Sin embargo, no nos detendremos ahí y continuaremos ejecutando nuestra estrategia de sostenibilidad FOREVER.BETTER. y nuestros objetivos 10FOR25“.

Con una reducción del 85 % de las emisiones propias y una reducción del 65 % de las emisiones de la cadena de suministro en relación con las ventas, PUMA alcanzó su primer objetivo de reducción de gases de efecto invernadero basado en la ciencia en 2023, siete años antes del año objetivo de 2030. Los nuevos objetivos climáticos de PUMA, que fueron aprobados por la Iniciativa de Objetivos Basados en la Ciencia (SBTi), pretenden reducir las emisiones de PUMA en lo que los científicos dicen que es necesario para mantener el calentamiento global por debajo de 1.5 grados. Para 2030, PUMA pretende reducir sus emisiones absolutas de GEI de Alcance 1 y 2 en un 90 % con respecto al año de referencia 2017. El SBTi clasificó los objetivos de Alcance 1 y 2 de PUMA como acordes con una trayectoria de 1.5 grados. Para 2030, PUMA también se compromete a reducir las emisiones absolutas de GEI de Alcance 3 de su cadena de suministro y logística en un 33 % en comparación con 2017.

Además de aumentar sus ambiciones climáticas, PUMA también avanzó en sus otros objetivos de sostenibilidad 10FOR25, alcanzando dos de los diez objetivos antes de lo previsto.

PUMA cumplió su objetivo relativo a los plásticos y los océanos eliminando las bolsas de plástico de sus tiendas y buscando opciones de plástico biodegradable. Una parte importante de este objetivo fue el exitoso experimento RE:SUEDE, en el que convirtió una versión experimental de su zapatilla clásica Suede en compost en condiciones industriales controladas. En abril de 2024 se lanzará una versión comercial.

También alcanzó su objetivo en materia de derechos humanos formando a más de 220,000 trabajadores de fábricas sobre la capacitación de las mujeres y realizando un mapeo completo de los subcontratistas y proveedores de nivel 2 para detectar riesgos en materia de derechos humanos. Además, los empleados de PUMA donaron más de 57 000 horas de compromiso con la comunidad.

Otros avances incluyen la ampliación del uso de materiales reciclados en 2023, produciendo 8 de cada 10 productos con una parte significativa de materiales reciclados o certificados. A partir de 2024, todas* las réplicas de camisetas de fútbol de PUMA se fabricarán con la tecnología de reciclaje RE:FIBRE de PUMA, que se centra en los residuos textiles de poliéster como principal fuente de material.

El informe de sostenibilidad de PUMA está disponible en la Web Oficial.

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