Redacción InsurgentePress/Ciudad de México.- Los fiscales promovieron ante el Juez Brian Cogan recortar el número de testigos contra Genaro García Luna ex secretario de Seguridad Pública (SSP) para concluir la presentación de evidencias de las ligas del narcotráfico del ex funcionario mexicano ante la Corte de Nueva York, Estados Unidos el próximo lunes.
Cogan había había programado que el juicio duraría ocho semanas debido al número de testigos y evidencias que ofrecieron la Fiscalía y abogados de García Luna sujeto a proceso por narcotráfico en territorio estadounidense desde el 9 de diciembre de 2019.
Este miércoles, los fiscales estadounidenses anunciaron que terminarían de presentar evidencias y testigos el próximo 13 de enero.
La parte defensora a cargo de César de Castro continúa sin notificar sobre una posible declaración o comparecencia de García Luna ni número de testigos de descargo que presentará ante el jurado integrado por 12 ciudadanos estadounidenses.
Este miércoles, el Juez Cogan negó a los fiscales la exhibición de fotografías que obtuvieron de la computadora de García Luna que contenían imágenes de casas, vehículos y una pecera.
El abogado De Castro consiguió que el Juez Cogan rechazara la petición de los fiscales para mostrar imágenes de presuntos bienes de su cliente de García Luna.
Cogan permitió a los fiscales presentar imágenes de bienes solamente acreditados de García Luna, siendo las de una casa en Morelos, México.
Durante el décimo día del juicio contra García Luna los fiscales pretendían aportar evidencias sobre propiedades que adquirió durante el tiempo que recibió presuntos sobornos del Cártel de Sinaloa.
Los fiscales obtuvieron fotos del 2013 de un automóvil Mustang y otro Land Rover, así como otras de un minicooper verde, tomadas en 2011, además, de una tarjeta de una invitación del cumpleaños de García Luna en 2018.
También, imágenes del restaurante ‘Café Los Cedros’, propiedad de la esposa, Linda Cristina Pereyra, fotos de una casa en la Ciudad de México con un tanque de peces.
Además, contactos de Ramón Pequeño y Facundo Rosas, extraídos de la tarjeta SIM del Blackberry de García Luna, un documento de excel que mostraba la lista de armas que poseía el acusado (evidencia posterior al 2013).
Capturas de pantalla de tuits sobre el testimonio de Jesús El Rey Zambada -uno de los posibles testigos- en el juicio de Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán, fotografías de una motocicleta Harley Davidson (la que supuestamente le regaló Arturo Beltrán Leyva).
Los fiscales obtuvieron, imágenes de carros Mustang que se encontraban en una propiedad de Miami (evidencia posterior al 2013), de un yate, además, de García Luna conduciendo un Lamborghini en 2010.
Este miércoles, testificó Egbert Simon agente de la DEA que supervisó el operativo de captura de García Luna, registrado el 09 de diciembre de 2019.
Desde esa fecha, García Luna ha sido acusado ante la justicia estadounidense de tres delitos de conspiración para traficar cocaína por ayudar al cártel de Sinaloa a enviar toneladas de drogas a Estados Unidos a cambio de pagos millonarias entre 2001 y 2012, y de otro delito por hacer declaraciones falsas.
Cogan dio a conocer que el juicio continuará hasta el próximo lunes debido a que un miembro del jurado se excusó de asistir el día jueves, además, regularmente la actividad judicial se suspenden los viernes.
De 2001 a 2005, García Luna dirigió la extinta Agencia Federal de Investigación de México, encargada de luchar contra la corrupción y el crimen organizado, y de 2006 a 2012 fue secretario de Seguridad Pública del gobierno de Felipe Calderón, controlando la policía federal del país.
Durante el juicio del exjefe del cártel de Sinaloa Joaquín “Chapo” Guzmán en Nueva York, un exmiembro del grupo narcotraficante, Jesús “Rey” Zambada, contó que entregó a García Luna en un restaurante dos maletas con entre seis y ocho millones de dólares en sobornos en 2005 y 2006.
El exsecretario de Seguridad Pública negó entonces esas acusaciones, y dijo que constituían “mentira, difamación y perjurio”.
García Luna, de 51 años, fue arrestado en Dallas, Texas, para posteriormente ser trasladado a una cárcel del este de Nueva York.
