Agencias/Ciudad de México.- FIFPRO, el representante mundial de los futbolistas profesionales, publica un informe que subraya la preocupación de los jugadores por la excesiva carga de trabajo, la creciente intromisión en su vida privada y la falta de atención que reciben por parte de los órganos rectores del futbol.
FIFPRO ha publicado su Informe sobre el monitoreo de la carga de trabajo de los futbolistas (PWM) 2024 – Excesiva carga de trabajo: rendimiento, recuperación y salud del jugador, un informe basado en datos que analiza la carga de trabajo excesiva de los jugadores a nivel mundial durante la temporada 2023/24.
El Informe 2023-2024 de monitoreo de la carga de trabajo de los futbolistas (PWM, por sus siglas en inglés) pone de relieve la carga que soportan los futbolistas que participan en múltiples torneos internacionales y que pone en peligro su bienestar, su rendimiento y sus perspectivas profesionales.
Algunos jugadores están viendo cómo su tiempo libre se reduce a tan sólo el 12% del año natural, el equivalente a menos de un día completo de descanso a la semana, contraviniendo las normas internacionales de Seguridad y Salud en el Trabajo, en medio de una falta de aprecio por su bienestar por parte de los organizadores de las competiciones y una ausencia de planificación coordinada del calendario.
El informe, elaborado con Football Benchmark revela que el 54% de los 1,500 jugadores analizados se enfrentaban a una carga de trabajo excesiva o elevada, y que un número significativo de ellos superaba los límites recomendados por los expertos médicos. En concreto casi un tercio (31%) de los futbolistas fueron incluidos en convocatorias de 55 o más partidos, mientras que uno de cada seis (17%) disputó más de 55 encuentros. Casi un tercio (30%) soportaron secuencias de al menos seis semanas consecutivas de partidos seguidos (dos partidos o más por semana).
Las 10 primeras posiciones del informe de PWM muestran la importante presión de la carga de trabajo a la que se enfrentan los futbolistas en todo el mundo.
- Los 75 partidos disputados por Julián Álvarez y sus 83 convocatorias con el Manchester City y Argentina durante la temporada son un ejemplo de la enorme carga que soportan los jugadores.
- En un ejemplo crudo pero no raro, Takumi Minamino sólo tuvo un día de recuperación después de regresar de la selección nacional con Japón en la Copa Asiática antes de reanudar sus responsabilidades en el club con el AS Mónaco en la Ligue 1. Esto demuestra lo inadecuado del tiempo de recuperación y la falta de protocolos a los que están expuestos los futbolistas entre diferentes competiciones. Esto demuestra el inadecuado tiempo de recuperación y la falta de protocolos a los que se exponen los jugadores entre distintas competiciones.
- Algunos jugadores, como Cristian Romero, recorrieron más de 162,000 kilómetros sólo en desplazamientos profesionales durante la temporada 2023-24, incluidos muchos viajes a través de múltiples husos horarios, lo que pone de relieve las exigencias de las competiciones internacionales que a menudo los organizadores pasan por alto.
El secretario general en funciones de FIFPRO, Stéphane Burchkalter, ha declarado: “Hacemos un llamamiento a los órganos rectores del fútbol para que intervengan urgentemente y establezcan reglamentos y procedimientos colectivos que protejan el bienestar de los jugadores. El bienestar físico y mental de los futbolistas debe ser una prioridad si queremos mantener la integridad del juego. La canibalización del calendario de competiciones está llevando a los jugadores más allá de sus límites y está invadiendo sus vidas privadas. Necesitamos salvaguardias para que los futbolistas limiten sus desplazamientos, garanticen periodos de descanso y les proporcionen una recuperación adecuada para que puedan alcanzar su máximo rendimiento”.
El informe muestra cómo las competiciones internacionales contribuyen significativamente a la presión del tiempo sobre los jugadores. En el caso de los futbolistas con una carga de trabajo excesiva (definida como 55 partidos o más), el 30% de los partidos eran encuentros internacionales -con su club o con su selección nacional- y el 15% eran con su selección nacional. Debido a los grandes torneos de selecciones nacionales, hasta el 18% del tiempo total de trabajo anual de un jugador en la temporada 2023-24 se dedicó a concentraciones de la selección nacional, o a obligaciones de la selección nacional, como actividades con los medios de comunicación y de asociación.
Además, las perspectivas para las temporadas 2024-25 y 2025-26 apuntan a una mayor congestión de partidos debido a la expansión de las competiciones internacionales. Se prevé que la carga real de partidos de los jugadores para esas temporadas alcance nuevas cotas, con cerca o incluso más de 80 partidos por temporada para algunos jugadores, como Federico Valverde (Real Madrid/Uruguay), Nicoló Barella (FC Internazionale Milano/Italia) y Phil Foden (Manchester City/Inglaterra).
El informe subraya la necesidad de una comprensión holística de lo que constituye el trabajo de un futbolista profesional, que abarque tanto los deberes del club como los internacionales, las exigencias de los viajes, el tiempo de trabajo y la necesidad crítica de recuperación y descanso.
Alexander Bielefeld, director de Política Global y Relaciones Estratégicas de FIFPRO para el Fútbol Masculino, ha declarado: “La brecha entre quienes planifican y programan las complejas competiciones internacionales y quienes las juegan y las viven nunca ha sido mayor, como han vuelto a poner de manifiesto las últimas declaraciones de jugadores y entrenadores a principios de esta temporada. Es crucial que salvemos esa brecha y empecemos a dar prioridad a la salud, el bienestar y el rendimiento centrados en el jugador”.
Los procedimientos unilaterales de los organizadores de competiciones para ampliar y crear formatos de competición internacionales han ignorado los convenios colectivos nacionales sobre el tiempo de trabajo, así como los requisitos de la legislación sobre seguridad y salud en el trabajo (SST), como la necesidad de identificar y evaluar los riesgos relacionados con la vida laboral de los futbolistas profesionales.
En consecuencia, FIFPRO ha encargado ahora un estudio independiente a investigadores de la Universidad belga KU Leuven para que examinen críticamente si se aplican las reglas y normas de SST en la industria del fútbol, y de qué manera. Los resultados de la investigación se publicarán en las próximas semanas.
El informe reafirma las preocupaciones expresadas por los futbolistas -entre ellos Kylian Mbappé, Jude Bellingham y Rodri- sobre el congestionado calendario de partidos y la falta de atención a los jugadores por parte de los órganos rectores del fútbol.
El informe, elaborado por FIFPRO Player IQ en colaboración con Football Benchmark, pone de relieve la carga insostenible que soportan los futbolistas, que corre el riesgo de perjudicar tanto su bienestar como su rendimiento y sus perspectivas profesionales. FIFPRO desglosa siete conclusiones clave del informe.
“Ignorar la consecuencia del número de partidos y la cantidad de viajes terminará en lesiones para cualquier jugador”, es el veredicto del seleccionador uruguayo Marcelo Bielsa.
El argentino no es el único técnico que piensa así: el 78% de los entrenadores encuestados, junto al 72% de los jugadores, apoya la implementación de un periodo de descanso garantizado. Las voces de los futbolistas se han hecho oír aún más en la última temporada, con un grupo destacado de ellos pidiendo con insistencia el cambio.
Ahora está claro que la carga de trabajo excesiva y la congestión del calendario se han convertido en problemas que afectan a un grupo demográfico más amplio de jugadores profesionales en todo el mundo. La Herramienta de monitoreo de la carga de trabajo de los futbolistas de FIFPRO, que supervisa a 1500 jugadores repartidos por todo el mundo, reveló que el 54 por ciento experimentó demandas de carga de trabajo excesivas o elevadas durante la temporada 2023/24.
El 31% de los futbolistas tenían más de 55 convocatorias. Entre ellos estaba el defensa del Real Madrid y de la selección española Dani Carvajal, quien dijo: “Es imposible estar a tope con más de 72 partidos. Creo que los organismos competentes deberían analizarlo porque es prácticamente imposible. La calidad del juego baja y nosotros sufrimos junto con nuestras familias”.
El delantero argentino Julián Álvarez apenas tuvo respiro en una campaña en la que acumuló la asombrosa cifra de 83 convocatorias debido a la canibalización del calendario de partidos; tras su campaña de clubes con su antiguo equipo, el Manchester City, Álvarez tuvo doble compromiso internacional en forma de Copa América y Torneo Olímpico de Fútbol.
El ex entrenador de Álvarez , Pep Guardiola, dijo: “Durante 11 meses son partidos, partidos, partidos. Antes la pretemporada duraba cuatro o cinco semanas. Ahora tenemos 10 días. Queremos jugar al fútbol y disfrutarlo pero tenemos que reducirlo. Es demasiado”.
Del mismo modo, el descanso, la recuperación y los viajes de los jugadores volvieron a mostrar tendencias preocupantes.
Los desplazamientos para participar en competiciones continentales e internacionales hicieron que los principales jugadores pasaran el 88% de su tiempo en el entorno laboral durante la temporada 2023/24. De hecho, el 30 por ciento de los partidos de los jugadores con excesiva carga de trabajo fueron competiciones continentales de clubes o partidos internacionales.
“El calendario es muy duro, sobre todo para los que somos de Sudamérica porque tenemos vuelos de 12 horas de ida y 12 horas de vuelta. Hay veces que es demasiado para nuestros cuerpos”, afirma el internacional uruguayo Federico Valverde.
Los jóvenes futbolistas más destacados de la actualidad acumulan minutos a un ritmo alarmante en comparación con los jugadores de hace sólo dos décadas. Para ponerlo en contexto, Jude Bellingham jugó 251 partidos oficiales antes de cumplir los 21 años; David Beckham, en comparación, jugó 54. Por su parte, el alemán Florian Wirtz ha acumulado más del doble de minutos de juego (11,501) que su compatriota Michael Ballack (4,175) antes de los 21 años, mientras que los 369 partidos del brasileño Vinícius Jr a los 24 empequeñecen los de Ronaldinho (163) a la misma edad.
“Es muy duro con los horarios locos”, dice Jude Bellingham. “Es difícil para el cuerpo: mental y físicamente estás agotado”.
La expansión de las competiciones de clubes de la UEFA y la introducción de un Mundial de Clubes de 32 equipos significa que los jugadores de élite estarán sometidos a un número aún mayor de partidos competitivos en la temporada 2024/25. El centrocampista del Manchester City Phil Foden, por ejemplo, tiene previsto disputar casi 80 partidos esta campaña.
“Es difícil estar a punto si juegas más de 70 partidos al año”, admite Erling Haaland, compañero de club de Foden.
En junio de 2024, los sindicatos miembro de FIFPRO Europa presentaron una demanda legal contra la FIFA, impugnando la legalidad de las decisiones de la FIFA de establecer unilateralmente el Calendario Internacional de Partidos y, en particular, la decisión de crear y programar la Copa Mundial de Clubes de la FIFA 2025.
Para los jugadores más solicitados tanto en los partidos de clubes como en las competiciones de selecciones nacionales, el derecho a un descanso anual garantizado se ha vuelto prácticamente inexistente, ya que la Copa Mundial de Clubes de la FIFA 2025 se celebra durante el único periodo del año teóricamente disponible para que los jugadores se tomen tales descansos. El volumen de partidos de competición, unido a la falta de tiempo de descanso en un calendario sobrecargado, es perjudicial para la salud de los jugadores.
“Tenemos que pensar juntos en cómo ofrecer la mejor solución posible para que tanto los jugadores como los espectadores y los órganos rectores del fútbol puedan adoptarla”, señaló Kylian Mbappe.
Las exigencias psicológicas y físicas que tuvieron los futbolistas de primer nivel la pasada temporada fueron detalladas por su sindicato y que ha presentado un par de demandas contra la FIFA.
La Federación Internacional de Asociaciones de Futbolistas Profesionales (FIFPRO) publicó su reporte sobre la carga de partidos que analizó a 1.500 jugadores. El propósito es avalar su argumento legal de que se pide más de sus miembros sin la adecuada consulta sobre la expansión de las competiciones internacionales.
“Esta temporada será la temporada definitiva”, dijo Maheta Molango, integrante de la junta directiva de FIFPRO, sobre un intenso calendario 2024-25 que culminará con el primer Mundial de Clubes con 32 participantes, organizado por la FIFA y Estados Unidos.
Una presentación online de FIFPRO sobre el reporte incluyó a representantes de los sindicatos de futbolistas de Inglaterra y Francia que presentaron una querella contra la FIFA en junio en la Corte de Comercio de Bruselas. También se presentó un recurso ante el Tribunal de Justicia de la Unión Europea, que el año pasado se pronunció sobre el caso de la Superliga.
En un caso aparte, la división europea de FIFPRO se unió a las ligas domésticas para radicar una querella ante la Comisión Europea en Bruselas contra el método unilateral que utiliza la FIFA para expandir sus torneos, incluyendo la primera Copa Mundial de hombres con 48 equipos en 2026.
“La brecha entre quienes organizan y programan completas competiciones internacionales y los que juegan en ellas nunca había sido tan grande”, señaló el director de estrategia de FIFPRO Alexander Bielefeld.
FIFPRO ha cargado contra la FIFA y no la UEFA, el ente rector del fútbol europeo que añadió más partidos esta temporada tanto a la Liga de Campeones como a la Liga Europa.
“Mucha gente nos dices: ‘¿Por qué no atacan a la UEFA?’”, reconoció David Terrier, dirigente francés de FIFPRO. ”La diferencia está en que hemos hablado con la UEFA. Hay voluntad de llegar a soluciones en conjunto. Así no ha sido con la FIFA”.
El nuevo Mundial de Clubes, que se disputará cada cuatro años, fue la gota que derramó el vaso sobre la expansión de los torneos internacionales, según FIFPRO.
El reiterado argumento de la FIFA de que los partidos de las selecciones representan un pequeña fracción con respecto al total que se acumula con los clubes es una “perspectiva engañosa”, dijo FIFPRO.
El más reciente informe sobre la carga de partidos modificó el enfoque sobre las cifras de partidos y minutos disputados y apuntó al tiempo completo que se pasa en una convocatoria. Ello incluye los entrenamientos de las selecciones, algo que añade más esfuerzo.
Por ejemplo, los jugadores que fueron a la Eurocopa de 2024 dedicaron el 17% de su tiempo de trabajo con las selecciones, según el informe. Agregó que esos jugadores tuvieron si acaso 42 días de descanso y recuperación durante el año.
Haaland no fue a la Euro 2024 debido a que Noruega no se clasifico. Molango resaltó que pudo iniciar la temporada con plenitud de descanso y ha marcado siete goles en tres partidos con el Manchester City.