Agencias/Ciudad de México.- El Gobierno de México expresó su oposición al envío de migrantes indocumentados a Guantánamo por parte de Estados Unidos, acción que fue instruida por el presidente estadounidense, Donald Trump, a través de una orden ejecutiva.
“No estamos de acuerdo con el trato a personas migrantes como criminales y siempre vamos a buscar que prevalezca el derecho internacional y la protección a los derechos humanos”, declaró la mandataria mexicana, Claudia Sheinbaum, en conferencia de prensa.
De igual forma, la jefa del Estado mexicano explicó que, en las mesas de diálogo bilateral con EEUU, su Administración busca el respeto a los connacionales.
“Lo que ponemos al frente es el respeto de nuestros connacionales y sus derechos humanos, al igual que la soberanía nacional. En ese marco colaboramos, cooperamos, nos relacionamos y estamos en diálogo permanente. Hay muy buena coordinación”, agregó.
El 29 de enero, el mandatario estadounidense firmó una orden ejecutiva donde instruyó a los Departamentos de Defensa y de Seguridad Nacional para habilitar en la Base Naval de Guantánamo un centro de detención para migrantes irregulares. Se prevé el envío de 30.000 personas a esta zona.
Frente a ello, el presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, calificó la medida como un “acto de brutalidad”, esto en un mensaje en la red social X.
Por su parte, el canciller Bruno Rodríguez escribió en la misma plataforma que la decisión de Trump “muestra el desprecio hacia la condición humana y el derecho internacional”.
El centro de detención de Guantánamo se inauguró en 2002 para albergar a los reclusos acusados de terrorismo tras los atentados del 11 de septiembre de 2001.
En 2009, el entonces presidente Barack Obama (2009-2017) firmó una orden ejecutiva para cerrar la prisión, emplazada en un territorio reclamado por Cuba, pero el Congreso se negó a financiar su clausura.
Trump, durante su primer mandato (2017-2021), suspendió esa orden ejecutiva, aunque no se trasladaron nuevos presos a Guantánamo.