Agencias / Ciudad de México.- La empresa minera brasileña Vale informó que se ordenó la evacuación de las comunidades en el estado de Mina Gerais, en el sureste de Brasil, después de que auditores independientes hallaran que una de sus presas podría colapsar en cualquier momento.
Vale subió el viernes el nivel de peligro en la presa de desechos mineros a tres, el más alto. De acuerdo con la secretaría de energía y minas, este nivel quiere decir que “una ruptura es inminente o ya ocurrió” en la presa en la ciudad de Barao de Cocais.
Las autoridades estatales ya habían notificado en febrero a algunas comunidades en un perímetro de 10 kilómetros (6,2 millas) de la presa que se fueran del lugar, luego de que Vale elevó el nivel de riesgo a dos, dijo el sábado el portavoz de la empresa.
El portavoz de Vale quien pidió no ser identificado apegado a la política de la empresa dijo que 442 personas han sido reubicadas en albergues temporales o con familiares desde febrero.
El teniente coronel Flavio Godinho, del departamento estatal de defensa civil, dijo a reporteros que las autoridades están evaluando la estructura de Barao de Cocais para revisar el actual plan de contingencia.
“Cualquier actividad en el dique podría provocar una ruptura”, dijo Godinho a la televisora Globo.
El anuncio ocurre casi dos meses después de que otro dique operado por la misma empresa se rompió en la ciudad de Brumadinho, derramando un lodo tóxico que mató a unas 300 personas.
La contaminación de ríos con desechos mineros, o relaves, que contienen altos niveles de mineral de hierro y otros metales, es muy preocupante y puede durar años o incluso décadas, dicen los expertos. Los pequeños residuos de óxido férrico se asientan en el lecho del río y surgen a la superficie cada vez que hay lluvias fuertes.
La organización medioambiental SOS Mata Atlántica dijo el viernes que tenía pruebas de contaminación en el gran río Sao Francisco como resultado del colapso de la presa en Brumadinho. Cientos de municipios y ciudades más grandes como Petrolina, a 1.400 kilómetros (870 millas) de Brumadinho, reciben agua potable de Sao Francisco.
La Agencia Nacional de Agua de Brasil, que hace sus propios análisis, negó que el río Sao Francisco estuviera más contaminado, según el portal G1 de Globo.
SOS Mata Atlántica está entre los organismos ambientales que estudiaron el impacto del desplome de otra presa también en Minas Gerais en 2015. El accidente mató a 19 personas y miles de peces, y dejó a 250.000 personas sin acceso a agua potable. Tres años después, los expertos dicen que el agua en el cercano río Doce sigue sin ser apta para su consumo.
El tipo de estructura usada para contener desechos mineros en Brumadinho es igual al usado ahora en Barao de Cocais, que queda a unos 150 kilómetros (93 millas) de distancia.
Las autoridades estatales prohibieron la construcción el mes pasado, pero las empresas recibieron un plazo de 90 días para presentar planes para reemplazar las presas dentro de tres años.
Vale dijo en un comunicado que ya había comenzado el proceso para reemplazar 10 de estos diques.
Barão de Cocais – Minas Gerais: Anoche Vale aumentó a nivel 3 el riesgo de una represa de desechos en la mina Gongo Soco, cercana a la represa que recientemente quebró en Brumadinho. Eso significa que se espera una ruptura inminente o que ya está en curso. pic.twitter.com/tbUesKOQUV
— Nacho Lemus (@LemusteleSUR) March 23, 2019