Agencias/Ciudad de México.- Enfrentando una tercera ola del coronavirus, la mayor parte de Italia entrará en un confinamiento a partir del próximo 15 de marzo y hasta el 6 de abril.
Bajo un decreto aprobado por el Gobierno del Primer Ministro Mario Draghi todas las regiones que tengan una incidencia semanal de 250 contagios por cada 100 mil habitantes pasarán automáticamente a “zona roja”, un régimen de confinamiento blando con todas las tiendas no esenciales cerradas.
En los días festivos, es decir, del 3 al 5 de abril, todo el país pasará a considerarse “zona roja”, aunque se podrá visitar a parientes dentro de la región y acudir a otras residencias, una vez al día y solo dos personas, sin contar a los menores de 14 años.
“Un año después del inicio de la emergencia sanitaria estamos lamentablemente ante una nueva oleada”, afirmó Draghi tras visitar el centro de vacunación del aeropuerto romano de Fiumicino.
Estas medidas se toman luego de que en la última semana se acumularon 150 mil 175 nuevas infecciones, frente a las 130 mil 816 de la pasada, un 15 por ciento más. En estas dos semanas las hospitalizaciones crecieron en casi 5 mil pacientes y los enfermos en Cuidados Intensivos en 650.
El Ministerio de Sanidad ha confirmado que 11 de las 20 regiones estarán a partir del lunes en “zona roja”: son Lombardía, Piamonte, Emilia-Romaña, Friuli-Venecia Julia, Véneto, Trento (norte), Las Marcas (centro), Campania, Apulia y Molise (sur) y Lacio, con capital en Roma, y se está valorando incluir Basilicata (sur).
El resto quedarán en el nivel medio de alerta, menos la isla de Cerdeña, que se mantiene prácticamente sin restricciones.
Draghi además informó que su Gobierno estaba destinando nuevos apoyos para familias, como el reconocimiento del “derecho al teletrabajo” de quienes tengan hijos en cuarentena o que estudien a distancia.
“Hace unos días agradecí a los italianos su infinita paciencia, se que estas medidas tendrán consecuencias en la educación de los hijos, en la economía y en el estado psicológico de todos nosotros, pero son necesarias para evitar un empeoramiento”, animó Draghi.
Para las familias que deban desempeñar su trabajo de forma presencial se les reconocerá el acceso a los permisos parentales extraordinarios y a las ayudas para tener un cuidador o niñera.
Por otro lado se comprometió a dar “un nuevo vigor a la campaña de vacunación”, acelerarla. Draghi ilustró que en los primeros once días de marzo se inoculó el 30 por ciento de las vacunas repartidas desde diciembre con un ritmo diario actual de 170 mil dosis, aunque la intención es triplicarlo.
Italia ha recibido ya 7.9 millones de dosis de la vacuna pero espera una “fuerte aceleración” con el compuesto monodosis de Johnson & Johnson, aprobada ayer por la Agencia Europea del Medicamento.