Agencias/Ciudad de México.-Francisco Oropeza sospechoso de matar a cinco de sus vecinos en Texas se ocultó a pocos kilómetros de la escena del crimen mientras él y su pareja planeaban escapar a México,
Oropeza se duchó y durmió en la vivienda ubicada en las afueras de la ciudad de Conroe, mientras que Divimara Lamar Nava le llevó donas de una tienda cercana, señaló un fiscal.
Lamar Nava también reconoció haberle entregado un mensaje de Oropeza a sus primos que se ubicaban en la zona, pidiéndoles ayuda para salir del país, declaró el fiscal durante la audiencia de causa probable de Lamar Nava. Los primos se negaron a ayudar.
Las autoridades creen que Lamar Nava hablaba con los investigadores al mismo tiempo que intentaba ayudar a Oropeza, dijo el fiscal de distrito del condado de San Jacinto, Todd Dillon, en una conferencia de prensa.
Lamar Nava inicialmente dijo a las autoridades que no sabía dónde estaba Oropeza, pero posteriormente le indicó a un agente federal que el sospechoso se presentó en la casa alrededor de la 01:30 horas del martes.
Oropeza, un ciudadano mexicano de 38 años, fue detenido la noche del martes dentro de la vivienda, ubicada a 32 kilómetros de la ciudad de Cleveland, donde se registró la masacre.
Basándose en una pista anónima, las autoridades lo descubrieron oculto bajo una pila de ropa sucia dentro de un armario luego de cuatro días de búsqueda.
Lamar Nava, de 53 años, fue arrestada ayer en la residencia.
Las autoridades identificaron a Lamar Nava como la esposa de Oropeza, aunque los registros penitenciarios señalan que no están casados, pero comparten la misma dirección.