Agencias / InsurgentePress, Ciudad de México.- La tensión entre Rusia y Estados Unidos sigue escalando. Piratas informáticos rusos robaron información clasificada del Gobierno estadounidense sobre cómo accede a la red de ordenadores extranjeros, el código que usa para tal espionaje y cómo defienden las redes de su país contra ciberataques, informó The Wall Street Journal (WSJ).
El siniestro ocurrió luego de que un contratista de la Agencia Nacional de Seguridad de EE.UU. (NSA, por sus siglas en inglés) trasladó documentos clasificados al ordenador de su casa, indicaron varias personas con conocimiento del asunto a WSJ. Los delincuentes cibernéticos dieron con el contratista gracias al antivirus de la empresa rusa Kaspersky Lab, software que el Gobierno estadounidense incluso ha prohibido usar a sus dependencias gubernamentales.
El incidente ocurrió en 2015 y fue descubierto hasta la primavera pasada. Aunque el robo no ha sido revelado por parte de las autoridades, los expertos lo han considerado como una de las brechas de seguridad informática más significativas de los últimos años. Tal información permitiría al Gobierno ruso mejorar la protección de sus redes, dificultar tareas de la NSA y desarrollar métodos para acceder a las redes de EE.UU. y otras naciones.
Por su parte, Kaspersky Lab ha negado tener vínculos con Kremlin en un comunicado y actualmente colabora con las investigaciones del Congreso estadounidense sobre la injerencia rusa en las elecciones presidenciales pasadas. Dos horas antes de que WSJ publicara la noticia, Eugene Kaspersky publicó el siguiente tuit:
“Nueva teoría de la conspiración, anon fuentes de los medios de comunicación traen la historia. Tomar en cuenta que no nos disculpamos por ser agresivos en la batalla contra las amenazas cibernéticas.”
New conspiracy theory, anon sources media story coming. Note we make no apologies for being aggressive in the battle against cyberthreats
— Eugene Kaspersky (@e_kaspersky) October 5, 2017
Esto explicaría porqué recientemente el antivirus ruso fue prohibido en todas las agencias gubernamentales estadounidense, suscitando las críticas del Kremlin y del mismo inventor del software, Ievgheni Kaspersky, quien, a pesar de haberse graduado en una Academia de la KGB (servicio secreto), siempre ha negado cualquier relación con el espionaje de cualquier país.
En cualquier caso, esta es la mejor figura para la NSA, después de las revelaciones del contratista Edward Snowden, quien precisamente huyó a Rusia.
Los hackers rusos también apuntarían a los teléfonos inteligentes de los soldados de la OTAN, según el diario WSJ, que cita a funcionarios de ese organismo internacional.
El objetivo era aquel de obtener informaciones operativas y datos sobre la consistencia numérica de las tropas, así como intimidar a los soldados.
La campaña habría apuntado sobre el contingente de 4.000 soldados de la OTAN estacionados en Polonia y en los países bálticos para proteger las fronteras con Rusia, mientras crecen las tensiones con Moscú.
Entre las víctimas estaba el teniente coronel Christopher L’Heureux, que asumió el mando de la base de la OTAN en Polonia en julio pasado.
El funcionario afirmó haber sufrido un intento de hackeo a través de una dirección de IP ruso y que era localizado en cualquier lugar. L’Heureux informó de que al menos seis de sus soldados fueron víctimas de ataque cibernético a sus teléfonos celulares o a sus cuentas de Facebook.
Sin embargo, algunos oficiales de la defensa occidental minimizaron el significado militar de la campaña, informando que causó “poco o ningún daño” y que las informaciones utilizadas eran públicas.
Fuente: WSJ.