Redacción InsurgentePress/Ciudad de México.- Petróleos Mexicanos (Pemex) declaró desierta la subasta de capacidad en terminales y un ducto en Sinaloa y Nayarit, además, el Sistema Norte Zona Frontera, producto del desinterés de inversionistas extranjeros y nacionales para entrar a la puja en ese rubro energético en México.
“El periodo de recepción de propuestas concluyó el 16 de abril de 2018; sin embargo, no se recibieron propuestas, por lo que no se asignó capacidad en este sistema”, informó Pemex a través de su sitio Web.
En el proceso de apertura de Pemex, señaló, al menos tres empresas habían mostrado interés de participar en la subasta lanzada el pasado 13 de febrero.
Esta temporada de subasta abierta permitía a la iniciativa privada reservar capacidad en terminales del Sistema Pacífico Zona Topolobampo, propiedad de Pemex.
La subasta incluyó seis terminales de almacenamiento, con restricciones en Tepic, Culiacán y Guamúchil que Pemex abrió hasta un 25 por ciento de la capacidad.
A diferencia de las terminales de Mazatlán, Topolobampo y La Paz, que Pemex decidió mantener cerradas a la inversión privada.
Además, Pemex subastó la operación en dos poliductos: Topolobampo-Guamúchil y Guamúchil-Culiacán, que han sido declaradas desiertas.
En 2018, dos subastas de Pemex han quedado desiertas producto del desinterés de los grupos de inversión nacionales y extranjeros.
El primer fracaso ha sido en el intento de atraer inversión en el Sistema Norte Zona Frontera, con infraestructura en Coahuila y Tamaulipas.
“No obstante este resultado, Pemex Logística mantiene el compromiso de continuar ofertando sus capacidades disponibles en distintas regiones del País para los servicios de almacenamiento y transporte por ducto de petrolíferos”, indicó la paraestatal en su sitio Web.
De acuerdo con el programa de Pemex prevé lanzar 11 subastas de capacidad en ductos y terminales durante 2018.
El año pasado sólo concretó una temporada abierta en Sonora y Baja California, asignada a la empresa estadounidense Andeavor -antes Tesoro Corporation, la única empresa que actualmente utiliza infraestructura de Pemex bajo este esquema.
