Redacción

Culiacán, Sinaloa, 7 febrero 2017.-Cuba quedó eliminada de la Serie del Caribe tras perder 0-1 ante México en las semifinales, pero nadie duda que los Alazanes de Granma se fueron del torneo con la cabeza en alto.

Cierto, perdimos, pero nos vamos satisfechos de haber realizado un gran trabajo. La deuda es grande porque vinimos a ganar el campeonato. No pudo ser, exaltó hoy en declaraciones a Prensa Latina Frank Camilo Morejón, receptor de los monarcas de Cuba.

Los de la mayor isla de las Antillas dijeron adiós al clásico caribeño con las botas puestas. En total, en cuatro de los cinco partidos disputados permitieron una o menos carreras, incluido el duelo semifinal ante los Águilas de Mexicali.

Antes de caer en los cruces, Cuba había vencido en las preliminares al Licey (4-0), al Caguas (6-1) y a Mexicali (4-0), y había perdido ante el Zulia (3-8). El cuerpo de pitcheo se comportó a un nivel superlativo y la defensa cumplió con notable rendimiento. Solo el bateo quedó un poco por debajo, en especial durante el cotejo de ayer, cuando fueron blanqueados sin piedad por tres serpentineros del conjunto local.

La escuadra de Cuba venía de tapada a este torneo y muchos la consideraban la cenicienta luego de la pobre demostración exhibida por los Tigres de Ciego de Ávila en 2016.

Sin embargo, la dirección de Carlos Martí logró aglutinar a los jugadores de una manera tal que, sin levantar sospechas, todos estaban enfocados en levantar el trofeo.

Yo llevo varios años en la selección nacional y puedo garantizar que ningún equipo jugó más suelto que este. Aquí no existió la presión más allá de la que siente cada cual en las acciones propias del juego, explicó el jardinero Alfredo Despaigne, el mejor jugador del equipo.

No estamos satisfechos porque el objetivo era ganar, pero sacamos experiencias positivas. No puedo reprocharle nada a ningún jugador, explicó Martí, quien dirigirá a Cuba en el IV clásico Mundial, en marzo venidero.

Notables resultaron las faenas del segunda base Carlos Benítez, cuarto de los bateadores en el torneo (.438, cinco sencillos, un doble y un cuadrangular en 16 veces al bate, con cinco empujadas y dos anotadas) y de los pitchers abridores Lázaro Blanco, Vladimir García y Bladimir Baños, además de relevista zurdo Liván Moinelo.

Blanco se reafirmó como el mejor tirador de Cuba en la actualidad (lanzó dos juegos y solo admitió una carrera); García recuperó sus mejores sensaciones (su recta llegó a 96 millas luego de años vagando por las bajas 90); Baños tiró un juegazo en la victoria 4-0 sobre México en la fase preliminar; y Moinelo lanzó cinco entradas y dos tercios sin permitir carreras, con cinco ponches.

Párrafo aparte para Frank Camilo Morejón, quien dirigió el pitcheo desde atrás del plato de una manera exquisita, tan notable que muchos especialistas y los propios lanzadores del equipo lo consideran insustituible de cara al Clásico Mundial (Osvaldo Vázquez jugó contra Venezuela y fue un desastre aquello).

Mis respetos para Cuba. No sé de dónde sacan tantos peloteros de calidad. Año tras año presentan equipos con un talento impresionante, enfatizó Roberto Vizcarra, manager de Mexicali, quien se quitó el sombrero ante su rival de las semifinales.

Ahora resta ver si Cuba podrá seguir en el torneo el año próximo, algo que según el presidente de la Confederación de Béisbol Profesional del Caribe, Juan Francisco Puello, escapa al deporte y entra en el campo de la polítca: Está en manos del gobierno de Estados Unidos, remarcó.

Comentarios desactivados en Cuba pierde frente a México en la Serie del Caribe