Agencias/Ciudad de México.- ‘No Negociable’ es una película llena de acción, cuya trama no iría a ningún lado sin sus antagonistas interpretados por Leonardo Ortizgris y Gonzalo Vega Jr., quienes nos platicaron sobre su proceso actoral en esta producción.
El pasado 26 de julio, la plataforma de Netflix agregó a su catálogo a ‘No Negociable’, una cinta de acción, protagonizada por Mauricio Ochmann, con tintes de comedia que cuenta la historia de un negociador de rehenes que debe salvar a su esposa de un secuestro que pone en riesgo la seguridad del país.
En esta película, Leonardo Ortizgris interpreta a Vicente Zambrano, el antagonista, y Gonzalo Vega Jr. a Nicolás, la mano derecha del villano. En conversación con Tomatazos, ambas celebridades platicaron sobre sus personajes.
“Me inspiré en Robin Hood, Chucho ‘el Roto’, estos justicieros que, aunque hacen actos ilegales, lo hacen con una justificación social… creo que (Vicente) no busca la venganza, está en busca de la justicia”, compartió Ortizgris.
El intérprete mencionó que, debido a las motivaciones del villano de la cinta, es posible que algunos espectadores se sientan reflejados.
Aunque las acciones de Vicente en la película son cuestionables, ambos actores señalan que los antagonistas buscaban un bien común.
“Al igual que el personaje de Vicente, aunque es más joven, creo que Nicolás es una persona decidida que se convence de qué forma parte de una solución y que está dispuesto hacer todo con tal de lograr su cometido”, señaló Gonzalo sobre las motivaciones de su personaje en la cinta.
Aparte de explicar las motivaciones de sus personajes, Leonardo Ortizgris y Gonzalo Vega Jr. revelaron cómo fue la sensación de actuar en el papel de los villanos.
“Es un regalo, es parte del juego. Siempre actuar y participar en una película es un goce, vas a jugar”, explicó Leonardo Ortizgris.
El intérprete de Vicente Zambrano hizo una comparación entre la actuación y el futbol, en la que señaló que prefiere darle importancia a su participación que al rol en específico que tiene: “A mí lo que me gusta es jugar, más allá de estar metiendo goles o parándolos”.
Gonzalo Vega Jr. estuvo de acuerdo con su compañero de escena y agregó lo siguiente:
“Como actor, más que buscar ser el bueno o malo, creo que buscamos hacer personajes complejos, interesantes y que aporten algo a la historia… lo padre es que estos personajes no son malos de malolandia, tienen un objetivo para ayudar a la gente”.
Lo que en principio parece ser una comedia sobre problemas matrimoniales, se transforma en una película de acción con una ácida crítica social sobre políticos corruptos que deben pagar por sus excesos y falsas promesas. El secuestrador tiene un motivo claro: responsabiliza al presidente por sus promesas de campaña incumplidas y no solo tiene la intención de torturarlo, sino también de enviar dinero a escuelas y hospitales.
Una de las razones por las cuales la película ha mantenido su popularidad en países como México, Argentina y Venezuela, como la número uno es porque la audiencia se siente identificada con los temas presentados. El sentido de justicia y la crítica hacia los políticos corruptos son elementos que han reverberado en regiones con problemas similares. “A veces hay que transgredir la legalidad, romper las reglas para lograr una verdadera transformación”, concluyó Ortizgris.