De Primera Mano/Por Rodulfo Reyes/Villahermosa.- Como era de esperarse, la comuna de Centro tuvo que recular luego de que el Presidente Andrés Manuel López Obrador diera su opinión –con la fuerza que lleva implícita la declaración del funcionario más influyente del país– en torno al traslado de la sede del Ayuntamiento a Altozano y a la concesión del servicio de agua potable para mejorar la calidad.
Ayer, en su portal de internet, el diario ‘El Financiero’ empezó su despacho informativo sobre la reversa que metió el alcalde Evaristo Hernández Cruz: “Que dice el presidente que siempre no”.
Uno de los medios de la capital del país que le ha dado seguimiento al caso, empezó la nota editorializando: “El alcalde de Centro, Evaristo Hernández Cruz, anunció que ya no venderá en 500 millones de pesos el terreno del palacio municipal ubicado en Villahermosa y tampoco cambiará la sede hacia ‘Ciudad Esmeralda’, donde se encuentra la zona residencial de Altozano (…)”.
Otros periódicos incluso le dieron cobertura en primera plana, pero ironizando que el edil quería “vender el Palacio Municipal”, cuando lo que se ofertaría era el terreno donde está ubicado la sede del Ayuntamiento.
Hernández Cruz dijo que decidió retirar su propuesta por las declaraciones de AMLO de que no se pueden “privatizar edificios públicos”.
La semana pasada, en su conferencia de prensa matutina, el nativo de Tepetitán expuso: “Mi opinión es que ya no deben haber privatizaciones. Si hablamos de política neoliberal y queremos sintetizarlo en una palabra, eso es privatizar. Neoliberalismo es sinónimo de privatización, y en el diccionario privatizar es trasladar lo público a lo privado”.
El edil dijo que aun cuando hay estudios que demuestran que el actual Palacio ya cumplió su vida útil, de todos modos se hará un nuevo estudio para determinar si debe derribarse y volverse a construir en el mismo predio o si es necesario en otro punto.
“Vamos a consultar con muchos especialistas. Pero si al final se determina, que es lo que creo que va a pasar, que hay que cambiarnos a otro lugar, entonces vamos a ir a consulta pública para que sea la ciudadanía la que decida”, subrayó.
Pero sin la venta del terreno no se tendría recursos para la nueva obra, lo que representa un problema que se debe resolver, dijo.
El presidente municipal expuso que tampoco seguirá con el proyecto de concesionar el servicio de agua potable.
“(La privatización) ya no es una opción, está decidido”, apuntó.
La determinación del edil surgió tras una guerra mediática en redes sociales, en donde se discutió el asunto como una decisión para vender un bien público teniendo como fondo hacer negocio.
También en el caso del agua se le dio el enfoque de corrupción.
Los habitantes de la capital tabasqueña perdieron dos oportunidades: 1) Sacar de su congestionada zona comercial un viejo edificio que vive horas extras y en cualquier momento puede venirse abajo, y 2) Renovar los 502 kilómetros de tubería de la red de agua potable que ya se encuentra colapsada.
PARA SU INFORMACIÓN…
EN EL TEMA de la refinería de Dos Bocas, los medios están dirigiendo sus baterías al Grupo Huerta Madre, el cual se acaba de adjudicar un contrato de cuatro mil 900 millones de pesos, pese a que es de reciente constitución y solo cuenta con un capital de ¡60 mil pesos! La citada firma, de la que el tabasqueño Manuel Santrandeu Hernández es el presidente de su consejo de administración, fue creada el pasado 17 de mayo, dos meses después de que Pemex entregara las invitaciones para participar en el concurso. Ayer, columnistas de negocios abordaron el tema, que seguramente dará de qué hablar en los siguientes días.