Agencias/Ciudad de México.- El Mallorca de Javier Aguirre sufrió un K.O. espectacular ante un rival que fue muy superior, aunque consiguió maquillar el resultado en los minutos finales. Seguro que el Vasco, además de por la derrota, salió tremendamente enfadado porque su equipo recibió cinco goles.
El Girona, por su parte, se encarama al liderato provisional de LaLiga tras una brillante victoria ante el Mallorca que se forjó en una primera parte sublime del equipo de Míchel. Un triunfo coral, una obra sinfónica que viene a corroborar el gran trabajo que viene desarrollando este equipo ya desde el curso pasado y que se rubricó con remontada terminada en manita y maquillada al final por el equipo de Aguirre.
El baño del Girona al Mallorca en la primera mitad fue de los que apasionan. Y eso que los bermellones comenzaron mejor y se encontraron con un penalti por mano de Tsygankov en el minuto 4 que les puso por delante gracias a Muriqi. Pero, a partir de ahí, el Girona hizo lo que tenía que hacer. Lo que mejor saber hacer: tener el control, mover el esférico con rapidez y rematar todo lo que se acercaba al área.
Le costó abrir el marcador, pero una vez que lo hizo, fue un vendaval imparable para un Mallorca que se fue haciendo añicos. Una buena prueba fue cuánto tuvo el balón en el tercio ofensivo en la primera mitad. Un 41%, porcentaje muy alto. Y apenas un 13% en el defensivo, lo que pone de manifiesto no solo su alto porcentaje de posesión, sino la zona donde lo tuvo, que al final es lo importante.
David López conseguía igualar en un balón suelto tras una jugada a balón parado. Hacía justicia a lo que estaba pasando haciendo su segundo tanto en dos partidos.
Poco después, Dovbyk daba la vuelta al marcador desde los 11 metros en un penalti que tuvo que revisar González fuertes en el VAR. El plantillazo de Samu Costa a Yangel Herrera era claro, pero quedaba la duda de si era dentro o fuera del área.
El equipo de Míchel quería más y lo encontró con el tercero de Iván Martín en una jugada de Savinho que recordaba a las galopadas de Vinicius.
Yangel Herrera ponía el cuarto antes del descanso con un zapatazo cruzado y rematar una primera parte perfecta.
No se puede decir que el Mallorca tuviera una mala actitud, pero claro, es que se vio sobrepasado por un equipo muy superior. A pesar de la goleada, salió en la segunda parte dispuesto a maquillar el resultado y tuvo algún acercamiento.
Sin embargo, pronto reaccionó el Girona, que hizo el quinto. La culminación a un partidazo con un gol de equipo que firmó su mejor jugador, un Savinho que está confirmando que es la revelación de LaLiga.
Pudo hacer más daño el equipo catalán, sobre todo por arriba. Pero se dejó ir para disfrutar del partido, lo que aprovechó Abdón Prats para recortar distancias con un doblete que no empaña el completísimo partido de un Girona que va a dar mucho que hablar esta temporada.
