InsurgentePress, Estado de México.- Hace ya casi 500 años fue creada la figura municipal en nuestro país, la aspiración de esta forma de organización territorial nace con el objetivo de fortalecer dos ejes de la vida en sociedad: los lazos de vecindad y la capacidad de autogestión.
Las capacidades que se le otorgaban entonces al Municipio eran tan amplias que abarcaban aspectos esenciales como la hacienda, seguridad pública, sistema de aguas, drenajes y salud o más específicos como la impartición de educación a nivel primaria.
Dichas capacidades perduraron durante una gran parte de la historia nacional. Sin embargo, con la tendencia a centralizar la administración pública se terminó por convertir al Municipio en un intermediario en lugar de un agente autónomo.
En la Constitución de 1917 en el artículo 115 se atienden y establecen la composición, figura y facultades del municipio. Dicho artículo lo dota de autonomía, le da libertad jurídica y un cúmulo de actividades y servicios, sin embargo, en estas facultades queda fuera la agenda social y limita las potestades de los municipios para generar recursos, lo que en nuestro quehacer cotidiano se traduce en debilidad institucional y precariedad económica.
Con base en lo anterior es que los alcaldes humanistas, agrupados en la Asociación Nacional de Alcaldes (ANAC), estamos convencidos de volver a ese origen y reivindicar la vocación municipalista del Partido con la finalidad de subsanar los retos a los que diariamente nos enfrentamos en temas de seguridad, servicios públicos, desarrollo humano y transparencia, entre otros. El municipio es el inicio del camino a seguir, ganando municipios se consigue el triunfo en estados y con ello el Gobierno federal.
Desde la ANAC hemos pugnado e implementado estrategias que fortalecen el federalismo y con ello la posición del municipio ante el resto de los órdenes de gobierno, teniendo siempre presente que gran parte de este trabajo se hace en el interior de las administraciones municipales. Por ello, fomentamos la profesionalización, la vinculación estratégica nacional e internacional y el continuo trabajo en temas que en el corto, mediano y largo plazo redunden en el desarrollo de los municipios.
En la ANAC nos hemos preocupado y ocupado por dar apoyo y acompañamiento a nuestros asociados, desarrollando estrategias que fortalezcan sus gestiones.
El proyecto con el que hoy trabajamos recoge la experiencia e ímpetu de nuestros alcaldes, por ello nuestras propuestas han trascendido el ámbito interno y se han posicionado como propuestas relevantes de envergadura nacional.
Ejemplo de lo anterior es haber logrado que la reelección de servidores públicos locales hoy sea una realidad, así como nuestra continua participación y dirección en la Conferencia Nacional de Municipios de México (CONAMM).
El reconocimiento y liderazgo que hemos construido es muestra de nuestro amplio compromiso por posicionarnos como agentes de cambio.
Reconozco ampliamente el trabajo que mis antecesores hicieron por el municipalismo, pues el buen resultado hoy nos da oportunidad de andar un camino, no menos sinuoso, pero si menos solitario.
Con la intención de generar cambios que impacten de manera efectiva y eficiente al Municipio, en el 2007 las asociaciones municipalistas lideradas por la ANAC, sin hacer una distinción partidista, firmamos un acuerdo, como primer paso del rumbo que devuelva al municipio su fortaleza.
Para generar un verdadero impacto en beneficio del Municipio elaboramos distintas propuestas que, al ser implementadas, generarían un aumento en la calidad de vida de los ciudadanos de forma directa. Ejemplo de ello son las siguientes:
Eliminación de exenciones del Pago del Impuesto Predial que representa un ingreso de aproximadamente 9 millones de pesos al año.
Ramo Municipalista para la asignación directa de recursos.
Ampliación de potestades tributarias.
Redefinición del Ramo 33, que cumpla con la naturaleza para la que fue creado.
Asegurar el pago de Derechos por uso de vía pública, frenando la evasión del pago por parte de empresas.
Profesionalización de los Servidores Públicos Municipales mediante el impulso de una ley que establezca el servicio civil de carrera municipal.
Espacio de participación para los Municipios en los Órganos Nacionales de Decisión.
Establecer un modelo equiparable al de administrador de carrera de la ciudad.
Las enunciadas son sólo algunas de las propuestas que se están gestando al interior de la Asociación. Sin embargo, estoy plenamente convencido de que el trabajo que se tiene que hacer no puede ser unilateral.
Por lo anterior, hago un llamado a todos los agentes interesados en desarrollar a los municipios como la esfera más importante en el quehacer cotidiano de la Administración Pública, a los legisladores y autoridades que comparten con nosotros la doctrina humanista, para trabajar de manera conjunta y con ello aminorar la brecha que hay por recorrer. Confío plenamente en que México puede ser fuerte con municipios fuertes.
Con información de revistalanacion.com
