Agencias / Ciudad de México.- En sus comienzos el sistema solar era un lugar caótico, una especie de mesa de billar gigantesca atiborrada de bolas disparadas alocadamente en cualquier dirección. Cuerpos planetesimales, agregados de materia de menos de 2,000 km de diámetro de los que surgen los planetas, chocaban con los mundos en formación. Marte no se libró de los golpes. Y algunos de ellos pudieron ser muy grandes.
Científicos del Instituto de Investigación del Sudoeste (SwRI) en Texas (EEUU) han modelado, a partir de meteoritos marcianos hallados en la Tierra, la mezcla de materiales asociados con estos impactos, revelando que el planeta rojo pudo haberse formado en una escala de tiempo más larga de lo que se pensaba anteriormente, incluso durante 20 millones de años en vez de dos o cuatro millones de años.
Conocer cómo se formó Marte no resulta fácil para los científicos planetarios. Miles de millones de años de historia han borrado la evidencia de los primeros eventos de impacto. Afortunadamente, parte de esta evolución se registra en los meteoritos marcianos. De aproximadamente 61,000 rocas espaciales encontradas en la Tierra, se cree que solo 200 más o menos son de origen marciano, expulsados del planeta rojo por colisiones más recientes.
SwRI models hint at longer timescale for Mars formation https://t.co/eVDriIJNXI
— Southwest Research Institute (@SwRI) February 12, 2020
Bombardeo
Estos meteoritos exhiben grandes variaciones en los elementos amantes del hierro, como el tungsteno y el platino, que tienen una afinidad de moderada a alta por el hierro. Estos elementos tienden a migrar desde el manto de un planeta hacia su núcleo central de hierro durante la formación. La evidencia de estos elementos en el manto marciano es importante porque indican que Marte fue bombardeado por planetesimales en algún momento después de que terminó la formación de su núcleo primario. El estudio de los isótopos de elementos particulares producidos en el manto mediante procesos de desintegración radiactiva ayuda a los científicos a comprender cuándo se completó la formación del planeta.
«Sabíamos que Marte recibió elementos como el platino y el oro de las primeras colisiones grandes», dice Simone Marchi de SwRI, autor principal de un artículo en «Science Advances» que describe estos resultados. «Según nuestro modelo, las primeras colisiones producen un manto marciano heterogéneo, similar a una torta de mármol. Estos resultados sugieren que la visión predominante de la formación de Marte puede estar sesgada por el número limitado de meteoritos disponibles para el estudio».
Debido a la proporción de isótopos de tungsteno en meteoritos marcianos, se ha argumentado que Marte creció rápidamente dentro de unos 2-4 millones de años después de que el Sistema Solar comenzara a formarse. Sin embargo, grandes colisiones tempranas podrían haber alterado el equilibrio isotópico del tungsteno, lo que podría soportar una escala de tiempo de formación de Marte de hasta 20 millones de años, como lo muestra el nuevo modelo.
Grandes impactos
«Las colisiones por proyectiles lo suficientemente grandes como para tener sus propios núcleos y mantos podrían dar como resultado una mezcla heterogénea de esos materiales en el manto marciano temprano», dice el coautor Robin Canup, vicepresidente asistente de la División de Ciencia e Ingeniería Espacial de SwRI. «Esto puede conducir a interpretaciones diferentes sobre el momento de la formación de Marte que aquellas que suponen que todos los proyectiles son pequeños y homogéneos».
Los meteoritos marcianos que aterrizaron en la Tierra probablemente se originaron en unas pocas localizaciones alrededor del planeta. La nueva investigación muestra que el manto marciano podría haber recibido adiciones variables de materiales provenientes de proyectiles, lo que condujo a concentraciones variables de elementos amantes del hierro. La próxima generación de misiones a Marte, incluidos los planes para devolver muestras a la Tierra, proporcionará nueva información para comprender mejor la variabilidad de los elementos en las rocas marcianas y la evolución temprana del Planeta Rojo.
«Para comprender completamente a Marte, necesitamos comprender el papel que jugaron las primeras colisiones energéticas en su evolución y composición», concluye Marchi.
A compositionally heterogeneous martian mantle due to late accretion: https://t.co/1lbbFJqJkv -> https://t.co/husoaT1kBF
— Daniel Fischer (@cosmos4u) February 13, 2020