Agencias/Ciudad de México.- El gobierno de México busca que los gobiernos de Brasil, Colombia, Cuba, Nicaragua y Venezuela acepten los vuelos de retorno de sus migrantes desde territorio mexicano, dijo el Instituto Nacional de Migración (INM).
Las gestiones, que el INM solicitó iniciar a la cancillería, se producen en medio de un incremento de los migrantes que atraviesan México en su intento por llegar a Estados Unidos desde el Caribe, Sudamérica y Centroamérica.
El INM detalló que del 1 de enero al 3 de octubre identificó a casi 1.6 millones de “personas extranjeras irregulares” en el país, de los que 138,251 eran menores de edad.
El Instituto Nacional de Migración anunció que está buscando terreno para instalar un albergue que asista a familias y menores de edad en Ciudad Juárez, en la franja limítrofe con Estados Unidos.
Además, aseguró que contrató vuelos chárter y vehículos para el traslado de migrantes a otras entidades del país o para llevarlos a sus naciones de origen.
En ese contexto, el gobierno del Presidente Joe Biden dio a conocer que ha deportado a más de 17 mil migrantes de Venezuela, Nicaragua, Haití y Cuba a través de la frontera de México desde mayo a la fecha.
“Desde el 12 de mayo hemos repatriado ya a más de 17 mil individuos de Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela en la frontera”, dijo Blas Núñez-Neto, el subsecretario de política fronteriza e inmigración del Departamento de Seguridad Interna de Estados Unidos durante una conversación con periodistas.
El aval del gobierno de México ha permitido esas deportaciones en un intento por inhibir los altos cruces irregulares de migrantes hacia Estados Unidos en 2023.
El acuerdo surgió tras un encuentro con el Presidente Andrés Manuel López Obrador y la Consejera de Seguridad Interna del Presidente Joe Biden, Liz Sherwood-Randall, siendo un logro de la administración del demócrata una vez concluido el programa Título 42.
La semana pasada, la Canciller mexicana, Alicia Bárcena, había confirmado que la administración del Presidente López Obrador explora reactivar próximamente las deportaciones por aire a tres países de Sudamérica: Ecuador, Venezuela y Colombia, justo al tiempo que el País registra números récord de arrestos de migrantes.
