El Efecto AMLO, Orientará la Balanza Comicial
Mara, Menchaca, Salomón, Américo…
Política Al Margen/Por Jaime Arizmendi/Ciudad de México.- Comicios, a la vuelta de la esquina… A menos de tres semanas de que la ciudadanía de seis de las 32 entidades del país salga a votar para renovar el mando estatal (Aguascalientes, Durango, Hidalgo, Oaxaca, Quintana Roo y Tamaulipas), encuestas dan con pocos o marcados porcentajes como triunfadoras o ganadores a los candidatos de Morena.
Sin embargo, más allá de lo que pronostican esas empresas en materia de preferencias electorales, cuyos resultados y previsiones a veces se constriñen a dar datos sesgados para quien las contrata, es innegable que, pese a las malas decisiones de Mario Delgado, el “efecto” López Obrador puede alzar el voto popular hacia el morenismo, y dar la victoria a sus abanderados.
Por orden alfabético: el caso de Aguascalientes resulta claro, ya que cuando se le ha consignado a la abanderada panista, Teresa Jiménez Esquivel, un triunfo rotundo en los sondeos previos, el papel que han jugado sus representantes parlamentarios a nivel federal la ponen en entredicho, cuya belicosidad los ubica fuera de la voluntad popular seguidora de Morena.
Y si a ello le añadimos que el actual gobernador panista de esa entidad, Aguascalientes, Martín Orozco, no estuvo de acuerdo en que la exdiputada federal y exalcaldesa fuese designada por su partido como la candidata a sucederlo, las cosas se tornan complicadas para “Tere” y la coalición que la abandera formada por PAN, PRI y PRD.
Además, en el marco del debate organizado por la Coparmex hidrocálida, al cual no asistió Teresa Jiménez, la morenista Nora Ruvalcaba aprovechó para invitar a unirse a su movimiento a sus contrincantes: Martha Márquez, de la coalición PT-PVEM; Anayeli Muñoz, de Movimiento Ciudadano; y Natzielly Rodríguez, del local Fuerza por México.
Y es que, durante el encuentro de Debates Ciudadanos, ante la ausencia de “Tere”, las candidatas a gobernar Aguascalientes se lanzaron contra la abanderada de la alianza de PRI, PAN y PRD, Teresa Jiménez, donde le dijeron de todo y la acusaron de ser una mujer con demasiada soberbia.
“Martha Márquez está invitada a ser parte del gobierno, todas las candidatas, menos a la que no vino, porque no le interesa”, dijo la morenista en respuesta a una pregunta de la expanista sobre si incorporaría su propuesta relacionada con empresas familiares, en caso de ganar la elección.
Vale recordar que la senadora con licencia, Martha Márquez, renunció a su militancia en el PAN al no ser elegida como candidata en la entidad, por lo que se postuló por la alianza PT y PVEM, que incluso lleva el nombre de la unión de Morena con otros partidos en otros estados: “Juntos Hacemos Historia”.
En Durango, donde gobierna el también panista José Rosas Aispuro Torres, es común escuchar que sus paisanos le reclaman ¿por qué se quedó con el cambio?, ya que no cumplió nada de lo que prometió en su campaña cuando hace seis años le gañó la gubernatura al priísta Esteban Villegas, peor aún, ahora candidato de PRI-PAN-PRD.
Y, no obstante que militantes de Morena a huevazos han hecho huir a su dirigente nacional, Mario Delgado Carrillo de los eventos en que aparece en la entidad, la candidata de la coalición “Haremos Historia por Durango”, Alma Marina Vitela Rodríguez, adelanta en las encuestas con 51 por ciento de la intención del voto, 11 puntos arriba de su contendiente de “Va por Durango”.
Para suceder al priísta Omar Fayad Meneses en el gobierno de Hidalgo, nadie duda, ni siquiera los verdaderos dirigentes del PRI, que Julio Menchaca Salazar, candidato de Morena, PT y Nueva Alianza estatal, va dos a uno frente a la aspirante del tricolor, Carolina Viggiano Austria, en las predicciones comiciales.
Comunicadores hidalguenses comentan que mientras Menchaca Salazar congrega a miles de simpatizantes en cada uno de los tres o cuatro encuentros que encabeza por día, hasta en los lugares de poca población; los eventos de Carolina Viggiano se ven “muy desangelados, señal de que la ciudadanía hidalguense ya no quiere saber más nada del Revolucionario Institucional”.
La disputa por Oaxaca actualmente gobernada por Alejandro Murat Hinojosa, del PRI, la protagonizan cinco hombres y dos mujeres, pero al senador petista con licencia y ahora candidato de Morena, Salomón Jara, se le conceden más del doble de los votos que lograría el 5 de junio próximo su más cercano contrincante, el priísta Alejandro Avilés.
Para suceder en Quintana Roo a otro mandatario estatal grisáceo, Carlos Manuel Joaquín González de PRD-PAN, las preferencias preelectorales las encabeza María Elena Hermelinda Lezama Espinosa, “Mara”, quien va arropada por los partidos de la alianza “Juntos haremos historia por Quintana Roo”: Morena, PVEM, PT y Fuerza por México local.
De acuerdo a comunicadoras y comunicadores quintanarroenses, Mara Lezama ha logrado mantener el liderazgo en las predicciones comiciales “hasta en las empresas encuestadoras menos afines o contrarias a la Cuarta Transformación.
En los niveles de la desesperación, la candidata de la alianza PAN-PRD, Laura Fernández y sus promotores entre quienes se incluye al gobernador Joaquín González, hacen de todo para tratar de convencer al PRI y a su abanderada a la gubernatura, Leslie Hendricks, decline en favor de la panista.
Todo bajo el argumento de que las mediciones preelectorales colocan a Laura Fernández en un segundo lugar “cercano a Mara”, pero los resultados de los últimos sondeos practicados en la entidad arrojan que mientras la de Morena obtendría más del 45 por ciento de los sufragios, la azul no alcanzaría ni un 25 por ciento.
En el ardiente Tamaulipas, donde los “momios” consignan que el morenista Américo Villarreal Anaya también marcha en caballo de hacienda, rumbo a suceder en el Palacio de Gobierno al panista Francisco Javier García Cabeza de Vaca, las encuestadoras al servicio de quien paga, o paga más, sostienen que César Verástegui, conocido como “El Truko”, tiene puntos arriba.
Del senador con licencia Américo Villarreal se reconoce “trae buen arrastre por ser el hijo del finado exgobernador que llevaba el mismo nombre” (1987-1993) quien dejó en Tamaulipas marcadas obras de infraestructura y grandes praderas repletas de granos. A casi tres décadas en la entidad todavía se habla, y bien, de Américo Villarreal Guerra.