diciembre 19, 2018

Línea deportiva: La crisis del balompié mexicano

Carlos Hernández

Dicen que como están las Chivas, está el futbol mexicano. Si en realidad el Guadalajara es un termómetro, entonces nuestro balompié está en crisis.

Después de varios torneos sin calificar a la liguilla, el Guadalajara tocó fondo al convertirse en el peor equipo mexicano en un Mundial de Clubes, al perder los dos partidos que le tocó participar.

Primero cayó con el equipo japonés Kashima Antlers, con lo que perdió la posibilidad de enfrentar al Real Madrid, lo que finalmente no fue tan malo, ya que las Chivas se salvaron de una derrota de escándalo ante el campeón europeo.

Después de caer ente el monarca de Asia, el equipo rojiblanco sucumbió frente al campeón de África, un conjunto llamado Esperance de Túnez, que lo único que mostró fue un futbol rudo y terminó con 9 jugadores, pero pudo acabar con menos elementos si el árbitro no hubiera sido tan complaciente.

Chivas terminó en sexto lugar de siete participantes. Nunca un equipo nacional había quedado tan bajo en el llamado Mundialito.

Pero más allá de estos resultados, las Chivas sí reflejan la realidad de nuestro futbol… además de malas decisiones de Jorge Vergara.

El balompié de México está inundado por extranjeros. La columna vertebral de la mayoría de los equipos está basada en elementos de Sudamérica: portero, defensa central, medio creativo y delanteros son traídos del cono sur.

Se dice que Chivas es más mexicano que la propia selección nacional, a la que a veces se ha convocado a jugadores naturalizados.

Guadalajara está obligado a trabajar sus fuerzas básicas, ya que cuando busca contratar a algún jugador, los otros clubes saben de su necesidad y se los venden más caro de lo que en realidad cuestan.

En estos días ha surgido la polémica de que si las Chivas están en desventaja por el hecho de que sólo puede jugar con mexicanos. Y hasta se ha llegado al colmo de realizar encuestas para saber si al público le gustaría que pudiera contratar extranjeros.

Pero si de algo no hay duda en nuestro extranjerizado balompiés es que se trata de, como les dicen, “las mexicanísimas Chivas”. El contratar extranjeros iría contra su esencia, ya no sería el Guadalajara, sería como cualquier otro equipo y por supuesto que dejaría de ser el club más popular de México

En este punto no hay vuelta de hoja. Son pocos los conjuntos del mundo con esta esencia y podríamos mencionar al Athletic de Bilbao, que sólo juega con elementos vascos. La diferencia es que al Bilbao no se le exigen títulos y a las Chivas sí.

Cuando compró al Guadalajara, el empresario Jorge Vergara llegó con una abultada billetera. Y por un tiempo contrató futbolistas de calidad, pero después vinieron las vacas flacas: su casamiento y posterior divorcio con Angélica Fuentes lo dejó con graves problemas financieros.

Aún se recuerda su boda “de ensueño”, que incluyó una semana en India, con todo pagado para sus numerosos invitados y en un dispendio que dio de que hablar por mucho tiempo.

Pero la bancarrota llegó con el divorcio. La señora Fuentes era dueña de gran parte de las empresas de Vergara… y el dueño de Omnilife recurrió a los jugadores de Chivas para ir pagando deudas de su compañía. Por eso las salidas de jugadores como Rodolfo Pizarro el torneo pasado al Monterrey.

Dicen que los bienes son para aliviar los males. Y en este caso las cartas de los jugadores están siendo utilizadas para rescatar a la empresa que quedó casi en quiebra. Aquí el problema es que las Chivas están cerca de quebrar también.

Adiós a Orbelín

Poco a poco el equipo dirigido por José Cardozo se está quedando sin figuras.

Casi inmediatamente después de la derrota ante el equipo Esperance se anunció la salida de Orbelín Pineda. Se calcula que su pase al Cruz Azul fue por un monto de 12 millones de dólares… que caerán de perlas a la caja de Omnilife.

También salieron otros elementos importantes como Edwin Hernández, Ángel Zaldívar, Ángel Sepúlveda y el veterano Carlos Salcido, quien se niega al retiro.

Hasta ahora sólo se han reforzado con Alexis Vega, ex goleador del Toluca, Hiram Mier, Dieter Villalpando y Alejandro Mayorga. Poco, muy poco para aliviar tanta sangría que han sufrido las Chivas.

Otro problema que tienen los tapatíos es que no cualquier jugador puede portar una playera con tanta historia.

Está el caso de Isaac Brizuela, quien era un elemento desequilibrante cuando militaba en el Toluca. Ya suma varias campañas en la Perla tapatía y el apodado Conejito sigue sin mostrar el gran nivel que tuvo con los escarlatas.

En el partido ante el Esperance, Brizuela tuvo una buena actuación, fue tal vez el mejor de su escuadra, pero falló el tiro penal que firmó la derrota de Chivas y selló así la peor actuación de un equipo mexicano en un Mundial de Clubes.

A pesar de quedar en el sexto lugar en Emiratos Árabes Unidos, los tapatíos se embolsaron un millón y medio de dólares. Le servirán a Vergara para seguir pagando deudas en su empresa, al fin que las Chivas pueden esperar.

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