Por Jorge Torres/Ciudad de México.- Un audio, un video y la declaración ministerial del exdirector de Pemex Emilio Lozoya, tienden el cerco que acorrala a Francisco Domínguez y lo coloca en medio de una trama de sobornos millonarios entregados desde el gobierno del expresidente Enrique Peña Nieto.
El mandatario panista habría recibido por lo menos 30 millones de pesos por haber apoyado la reforma energética cuando fue senador de la República.
El audio de una conversación que mantuvo con el senador Carlos Mendoza en mayo de 2013, dada a conocer dos años después, el 4 de mayo de 2015 en plena campaña por la gubernatura de Querétaro, lo pone contra las cuerdas pues acepta haber tenido una negociación con un personaje apodado Kors, quien le ofreció seis millones de pesos mensuales durante los siguientes cinco meses, un periodo que culminaría el “día de la elección”. La reforma energética se aprobó en el Senado de la República el 11 de octubre de 2013.
Algunos extractos de la conversación:
Carlos Mendoza: ¿Y fuiste a ver a este güey, al Kors?
Francisco Domínguez: Sí ya güey, tú ya vas para allá ¿no?
CM: Ahí voy para allá güey, ahorita. ¿Qué tal?
FD: Lo que le pedí… le bajó, se compromete con seis mensuales.
CM: ¿De aquí a cuándo?
FD: Al día de la elección, o sea, seis en cinco meses. Seis por mes.
CM: Tres kilos.
FD: No, no, no, seis kilos por mes.
CM: ¿Seis kilos por mes?
FD: Sí.
CM: No mames cabrón, seis, ¿qué te compromete después?
FD: Pues, a pagar chingón ¿no?, ahí te digo; pero él mismo te va a decir qué, cuándo y dónde.
CM: Órale cabrón, ahí voy para allá entonces. Oye, está a toda madre, eh.
FD: Sí güey, con madre.
Siete años después de aquella conversación telefónica, se sabe por las declaraciones de Emilio Lozoya que Kors era el alias de Miguel Ángel Osorio Chong, un apodo utilizado entre los panistas para identificar en clave al exsecretario de Gobernación.
Francisco Domínguez ganó la elección el 7 de junio de 2015 y el tema de la llamada quedó enterrado. Sólo se tiene el registro de algunas declaraciones del candidato alegando guerra sucia en su contra pero nunca negó su participación ni aclaró de qué hablaba con Carlos Mendoza.
Fue hasta el pasado 17 de agosto que aquella conversación sin contexto adquiría sentido. Ese día apareció un video grabado en 2013 en donde se ve a Guillermo Gutiérrez, secretario privado de Francisco Domínguez, recibiendo fajos de billetes y colocándolos en una maleta junto a Rafael Caraveo, exsecretario técnico de la comisión de administración del senado.
Dos días después, el miércoles 19, se filtró íntegra la declaración ministerial de Emilio Lozoya en donde entre otras cosas acusa al ahora gobernador de Querétaro de haber recibido un millonario pago por su voto en el Senado.
Lozoya sostiene que el gobierno de Peña Nieto entregó 120 millones de pesos a cinco senadores panistas y un diputado federal para comprar la elección de las reformas estructurales aprobadas entre 2013 y 2014.
Ante las evidencias de corrupción que lo incriminan y lo tienen prácticamente en el umbral del ministerio público, Francisco Domínguez ha optado por la negación y el silencio.
La única declaración luego de conocerse el video en el que aparece su secretario privado fue en la conferencia mañanera del 19 de agosto en Querétaro frente al presidente Andrés Manuel López Obrador. “El único posicionamiento público que daré a este respecto”, advirtió visiblemente nervioso luego de un intento fallido de auto exoneración.
Allí recriminó a Lozoya por aportar “solo sus dichos” en la acusación en su contra y calificó de “perversa” la filtración del video “donde aparece una persona en la que deposité mi confianza y que me acompañó por años”. Luego dice que removió de su cargo a Guillermo Gutiérrez pero en ningún momento lo condena por haber recibido los sobornos del exdirector de Pemex.
Nada dijo de una trama de corrupción en la que él mismo se exhibió en una llamada telefónica presumiendo un acuerdo del cual obtendría 30 millones de pesos en su calidad de senador de la República y que se confirmaría con el video del pasado 17 de agosto.
Se le acaba el tiempo a Francisco Domínguez y el gobierno federal ya lo puso en jaque.
El siguiente movimiento le corresponde a la Fiscalía General de la República que tendrá que citarlo a declarar.
En otra columna me ocuparé de la riqueza patrimonial del indiciado gobernador de Querétaro.
Próxima entrega: Cabeza de Vaca y la sombra del narcotráfico.