Agencias/Ciudad de México.- La gobernadora de Nueva York Kathy Hochul expresó su confianza en que llegará a un acuerdo de cientos de millones de dólares de presupuesto público para construir el nuevo estadio de los Bills de Búfalo a tiempo para incluirlo en el presupuesto estatal de abril.
Hochul indicó que le dio al equipo dos fechas para negociar un acuerdo: a finales del año o extender las conversaciones hasta marzo. La gobernadora agregó que el equipo tendrá la última palabra sobre dónde estarán las nuevas instalaciones, ya sea cerca de su actual casa en Orchard Park o en el centro de la ciudad.
“Estamos enfocados en mantener a los Bills aquí. Si Orchard Park es su primera opción, si su única opción es Orchard Park, entonces haremos que suceda”, dijo Hochul durante una presentación en Warsaw, Nueva York.
“Mi deseo —como seguidora de los Bills de Búfalo— es asegurarlo, hay que lograrlo”, dijo Hochul, quien es originaria de Búfalo. “Estamos muy entusiasmados de anunciar un acuerdo en el futuro cercano”.
Los comentarios de Hochul han sido los más extensos sobre el tema de las negociaciones con la empresa que controla a los Bills, Pegula Sports and Entertainment, desde que asumió como gobernadora tras la renuncia en agosto de Andrew Cuomo.
PSE respondió con un comunicado del vicepresidente ejecutivo Ron Raccuia, quien dijo: “Apreciamos los comentarios de esta mañana de la gobernadora. Hay mucho trabajo por hacer y seguimos con los esfuerzos”.
No está claro qué PSE favorece extender las pláticas.
El mes pasado fue dado a conocer un estudio sobre los proyectos para el estadio con capacidad para 60,000 personas. Construir frente a las actuales instalaciones de los Bills tendría un costo de 1,354 millones de dólares, mientras que mudarse centro de la ciudad posiblemente agregaría 750 millones al total, debido a que requerirían adquirir tierra y mejorar la infraestructura.
Cancelado el Hawaii Bowl, ante problemas con COVID-19
El Hawaii Bowl fue cancelado luego que el equipo local se retiró del encuentro por una serie de problemas con el COVID-19, lesiones y transferencias, que dejaron fuera a varios jugadores.
“Estamos decepcionados por el hecho de que nuestra temporada concluya de esta manera”, dijo el entrenador de Hawái, Todd Graham, en un comunicado. “Pese a que somos competitivos y deseábamos mucho jugar este partido, no podemos poner en riesgo la salud de nuestros estudiantes-deportistas”.
El duelo estaba previsto para este viernes en el Clarence T.C. Ching Athletics Complex.
Derek Inouchi, vocero del departamento deportivo de Hawái, dijo que unos 30 jugadores y empleados dieron recientemente positivo de COVID-19. Los casos han aumentado en Honolulu durante las últimas dos semanas.
En la isla de Oahu, el promedio de nuevos casos en los últimos siete días fue 11 veces mayor el jueves, en comparación con el 8 de diciembre.
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“La salubridad de nuestros estudiantes-deportistas es la parte más importante de esta decisión”, afirmó David Martin, director atlético de Hawái, en un comunicado.
Hawái terminó la temporada con una foja de 6-8. Se clasificó a este tazón colegial en casa porque no había equipos disponibles con un registro de 6-6.
Sus rivales serían los Tigers de Memphis, que finalizaron precisamente con un récord de 6-6.
