Hoy la ceremonia concita una serie de sentimientos nuevos, siete de cada diez mexicanos aprueban el trabajo del Presidente Andrés Manuel López Obrador conforme a encuestas y sondeos neutrales y de adversarios, en un año el trabajo persistente todos los días AMLO es su mejor barómetro.
Por Raúl Caraveo Toledo/Ciudad de México.- Pocos años la celebración del 15 de septiembre, conocida como el Grito de Independencia, había creado una expectativa popular tan positiva, celebración del orgullo de ser mexicano emanado de los mexicanos más comunes y ordinarios, la base social de la pirámide; en años pasados esta ceremonia servía para manifestar el rechazo a la figura del presidente en turno, cómo olvidar la feria de pointers –rayos laser- verdes a la cara de Felipe Calderón en plena arenga; el primer grito de Peña Nieto estuvo manchado por el desalojo, dos días antes, donde la Policía Federal expulsó a los de la Coordinadora Nacional de la Educación (CNTE) que tenían tomado el Zócalo desde 20 días antes; en 2014 la molestia fue el vestido de la esposa de EPN, La Gaviota portó un Oscar de la Renta de 30 mil pesos; en 2015 a pesar de decenas de camiones de acarreados traídos del Estado de México el Zócalo lucía vacío, el grito estuvo coreado de abucheos, la tradicional cena de gala se suspendió bajo el argumento de la necesaria austeridad derivada de la caída de los precios del petróleo.
En 2016 Angélica Rivera La Gaviota repite lujoso outfit del diseñador Benito Santos y también discute con su marido, éste grito duro 30 segundos y también se canceló brindis y cena de gala. Hubo pleito frente a las cámaras y luego desaires del marido presidencial contra su esposa. Y, el último grito de Peña se lo llevó su fallido intento de formar un corazón con las manos, debut y despedida.
En 2011 el Grito de Independencia de Felipe Calderón es recordado porque la voz popular dice que dio el grito en estado de ebriedad, entre rayos laser usted puede valorarlo; https://www.youtube.com/watch?v=SRna9f_yMqU.
En 2012 el último grito de Calderón se dio entre protestas contra el presidente electo, con lluvia y una plaza medio vacía. El grupo #YoSoy132 dio otro grito y en la avenida 20 de Noviembre detuvieron 4 de sus integrantes. Es muy lamentable que presidentes en funciones no puedan llenar la plancha del Zócalo capitalino ni para un acto cívico tan importante, no obstante contando con aparatos de publicidad a su servicio públicos y privados.
Hoy la ceremonia concita una serie de sentimientos nuevos, siete de cada diez mexicanos aprueban el trabajo del Presidente Andrés Manuel López Obrador conforme a encuestas y sondeos neutrales y de adversarios, en un año el trabajo persistente todos los días AMLO es su mejor barómetro. Si la prensa es un barómetro del grado de cultura de un pueblo, en este curioso caso las reacciones de un sector de la prensa de opinión y análisis que mantienen presencia en medios privados (que fueron muy consentidores-cómplices de regímenes pasados) sirven de medición.
Sirve de medición también –sin lugar a dudas- la presencia permanente en las localidades al interior del país del Presidente a ras de tierra, en traslados por carretera; sirve de medición –sin duda- la respuesta inmediata a los temas que plantean las conferencias diarias. La capacidad de respuesta de éste presidente y su inmediatez para cualquier situación de su equipo o problema que surge en el plano nacional deja sin argumentos, desarticula a un muy mal armada oposición que viene degenerando sus valores y principios, partidos como el PAN y PRI andan como gallinas sin cabeza (quienes han tenido granjas me entenderán). Cuando los opositores abordan un problema para criticar la envoltura de AMLO, éste ya lo resolvió y está imponiendo en la agenda el siguiente tema.
El 15 de septiembre de 2019 sin duda marcará el estilo de gobernar, la forma de Estado y el régimen que quiere un presidente con muy alto respaldo ciudadano. Quienes pensaron y escribieron que el ejercicio diario de López Obrador lo desgastaría se volvieron a equivocar. Quienes pensaron que un Presidente fuerte ya no era viable ni aceptable por la sociedad mexicana también se equivocaron.
Patético que hoy opositores irracionales a México en el Congreso se opongan a que sea considerado delito grave la expedición de facturas falsas y las empresas que se dedican a ello, a la evasión fiscal. Representantes populares cómplices de corrupción, esa es nuestra oposición, esos son los adversarios del Presidente.
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*Raúl Caraveo Toledo es licenciado en ciencia política por la UAM, ex catedrático de las Facultades de Psicología y de la Facultad Ciencias y Técnicas de la Comunicación de la Universidad Veracruzana, ha sido analista de estudios económicos de PEMEX y Consejero electoral del IFE-INE de Quintana Roo de 2005 a 2015, ex asesor de la XIII legislatura de Quintana Roo, Conalep Quintana Roo, escribe para www.sdpnoticias.com; www.tmj.mx; www.gobernantes.com; www.revistadigitalqr.com.mx; www.todoincluidolarevista.com; www.noticaribe.com; www.insurgentepress.com.mx y en Chicago ce www.laprensaus.com y www.vocesmigrantes.us.
