Notimex/Ciudad de México.- El Presidente Andrés Manuel López Obrador llamó a las comunidades indígenas a no avergonzarse de su origen, ya que en ello están costumbres que en México deben perdurar.
El mandatario federal dijo que ante aquellos racistas que cuestionan su legado y tradiciones se debe poner como ejemplo que el mejor presidente de México, Benito Juárez, fue un indígena zapoteco.
“No hay que avergonzarse de nuestro origen. El que no sabe de dónde viene nunca va a saber a dónde va. Es un orgullo pertenecer a una cultura prehispánica, con costumbres, lengua y organización social”, aseveró el primer mandatario en un diálogo con comunidades otomíes en Querétaro.
Incluso, el Jefe del Ejecutivo exaltó que gracias a sus tradiciones y forma de gobierno en las comunidades originarias no se registran altos índices de criminalidad.
“Hay menos delitos porque hay vida comunitaria, ayuda mutua, porque hay tequio, porque hay verdadera solidaridad”, comentó el Presidente.
Enfatizó que la cultura de la solidaridad es algo tangible entre los indígenas y que esa cualidad se encuentra muy poco en otros seres humanos, con una cultura distinta.
López Obrador llamó a los otomíes a no abandonar su lengua y arraigar sus tradiciones.
Indígenas otomíes pidieron al presidente Andrés Manuel López Obrador no desatender nunca a los pueblos originarios y no perder el respeto del pueblo pensando que puede tomar decisiones sin consultar a los demás.
El mandatario fue recibido por mujeres otomíes que realizaron un rito de bienvenida y purificación. Mientras era “purificado” con incienso y se le otorgaba un bastón de mando, una de las mujeres tomó el micrófono y se dirigió al presidente, a quien saludó y bendijo.
La mujer le pidió no perder el respeto del pueblo pensando que puede tomar decisiones sin consultar a los demás.
“No cambies tú, no cambies tu forma de sentir, de pensar y de actuar, no empieces a creer en tu persona, que tú decides todo, no pierdas el respeto del pueblo”, expresó la mujer con López Obrador de frente ataviado con un arreglo floral y un bastón de mando.
Durante su discurso, el Presidente de la República dijo que su gobierno está empeñado en resarcir la deuda que se tiene con los pueblos originarios que han estado en el abandono.
Expuso que durante los casi cinco años que le quedan como jefe de la Nación se seguirá privilegiando a los pobres y las comunidades originarias del país. “Son los pobres y los indígenas de México los protagonistas en esta transformación”, afirmó en mandatario.
“Queremos atender y escuchar a todos, pero darle la preferencia de la gente humilde, así se está llevando a la práctica, no es discurso, no es demagogia, son hechos”.
López Obrador explicó que en 14 meses ha logrado que en el 95 por ciento de los hogares de indígenas al menos un apoyo de Bienestar se entregue.
No obstante, afirmó que su meta es que este año el cien por ciento de los hogares originarios tengan un programa y funcionando a cabalidad.
Reiteró que se buscará que haya más beneficiarios de los programas de Bienestar y que pronto quede establecido en la Constitución el derecho de adultos mayores, jóvenes con discapacidad y estudiantes a los apoyos.
Al final de la ceremonia, la traductora de la lengua otomí se salió de protocolo y solicitó la palabra a la asamblea para dirigirse al Presidente.
En el mensaje pidió más apoyos a las actividades productivas de los indígenas, respetar su autonomía y forma de gobierno. Además, que no desatienda nunca a los pueblos originarios.
También lo llamó a regirse bajo los principios de su gobierno, no traicionar, no mentir y no robar.
“Hoy estamos de fiesta, hoy nos pronunciamos los pueblos indígenas de Amealco como autónomos y le pedimos un gran favor ciudadano Presidente: que cumpla los principios de su mandato, no nos traicione, no nos mienta y no nos va a ir a robar”, dijo la mujer sin mencionar su nombre.