Agencias/Ciudad de México.- Red Bull vuelve a triunfar sobre Mercedes. El Gran Premio de Francia es para el conjunto austriaco tras el gran triunfo de Max Verstappen y el tercer lugar de Checo Pérez. Un 1-3 que sabe a gloria y le da a los de la bebida energética una mayor ventaja en el campeonato de pilotos y constructores. Hamilton se quedó con el segundo sitio.

Si bien, todo fue felicidad para Red Bull la final de la competencia, el inicio fue complicado luego de que Verstappen perdió el liderato apenas en la largada. El holandés salió de la pista y Hamilton tomó la cima segundos después de que las luces se apagaran. Además, Checo mostraba un ritmo más lento que Bottas, por lo que el tapatío se rezagó un poco. Mercedes había pegado primero.

En la vuelta 18, Verstappen ingresó a boxes. Lo hizo antes que Lewis, pues no lograba recortar distancias con el británico. En el siguiente giro, el Mercedes del heptacampeón hizo lo mismo, pero salió apenas por detrás del RB16B holandés. Así es como Red Bull recuperaba el liderato tras perderlo en la salida.

Por su parte, Checo Pérez aguantó hasta la 25. El mexicano había sido líder por seis vueltas hasta que le tocó cambiar a gomas medias, las cuales soportó hasta el final de la carrera. Sin embargo, su parada fue larga (33 segundos en total) y tuvo que iniciar una remontada sobre Bottas con 18 segundos de desventaja.

En la vuelta 33, Verstappen paró sorpresivamente en pits. Max avisó a su equipo que estaba perdiendo ventaja sobre Hamilton, quien le pisaba los talones, y cambiaron a neumáticos amarillos. Fue la mejor decisión que pudieron tomar los actuales líderes, pues el tulipán ganó ritmo, marcó la vuelta más rápida y puso a temblar a los dos Mercedes.

Con un ritmo endemoniado, el dúo dinámico sentenció a Bottas. En la 44, Verstappen pasó al segundo Mercedes y Checo hizo lo mismo a falta de tres para el final. Valtteri estaba furioso.

En ese lapso de calentura reclamó fuertemente a su equipo: “¿Por qué no me hacen caso si les dije que Red Bull iba a dos paradas?”. Toto Wolff se llevaba la mano al rostro.

Finalmente, en el penúltimo giro, Verstappen superó a Hamilton para adueñarse del liderato y la carrera. Mercedes no pudo hacer algo para evitarlo. Otro domingo exitoso para Red Bull con una dupla de conductores que tocó el cielo en París.

Una vez más, el extraordinario manejo de neumáticos del mexicano Sergio ‘Checo’ Pérez, más una puntual estrategia de Red Bull Racing, hizo posible que la escudería austriaca se llevara el 1-3 en el Gran Premio de Francia, y sobre el desempeño del piloto tapatío en pista, el equipo Mercedes reconoció que fue determinante para mermar su propia actuación.

Luego de la carrera en el circuito Paul Ricard, el jefe de la escudería Mercedes, Toto Wolff, fue contundente al reconocer que la carrera de Checo Pérez fue determinante para que decidieran no llamar a sus pilotos a un segundo ingreso a pits.

“Absolutamente (fue determinante). Si Pérez no hubiera estado en la ventana (de la parada en pits), por lo menos con un coche habríamos optado por una segunda parada, y temprano, entonces básicamente se ponía al otro coche de Red Bull en una situación difícil. Así que en esa etapa había cuatro coches compitiendo entre sí”, dijo Wolff en entrevista con Motorsport.

Checo Pérez largó desde la cuarta posición y fue hasta la vuelta 25 cuando entró por primera y única vez a los pits, lo cual forzó a Mercedes a no volver a llamar a sus pilotos tras su primer ingreso, lo que se tradujo en pérdida de rendimiento y lugares en el último tramo de carrera, pues Hamilton sucumbió ante Verstappen y Bottas ante el mexicano.

“La pérdida de rendimiento de Lewis era esperable, pero poco podíamos hacer. De detenerlo quizás lo hubiera superado Pérez, y no podemos permitirnos perder más puntos”, concluyó el austriaco.

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