agosto 12, 2022

Desempaca Gustavo Petro plan fiscal para gravar a magnates en Colombia

Por Erick Olivera Méndez/Ciudad de México.- Recién instalado en la presidencia de Colombia, Gustavo Petro desempacó su propuesta económica que incluye un aumento de impuestos en las clases altas del país para conseguir los recursos que necesita su plan de combate a la pobreza, un proyecto de reforma fiscal que tendrá todavía que transitar por el Congreso.

El ambicioso plan fiscal de Petro contempla reducir los beneficios tributarios para las clases altas, rediseñar impuestos para la minería y el petróleo y combatir la evasión. Pero su plan se concentra en un impuesto a los bienes para quienes posean sumas superiores al equivalente a 690 mil dólares, con una tasa de 0.5 por ciento y hasta el 1 por ciento en patrimonios que alcancen un valor de 1.1 millones de dólares.

El aumento de impuestos incluye a sociedades extranjeras con domicilios alternos en Colombia, a quienes se les planea incrementar el impuesto sobre la renta del 10 al 20 por ciento.

El proyecto de recaudación fiscal de Gustavo Petro busca obtener ingresos de poco más de 5 mil 700 millones de dólares para 2023, aunque su administración confía en que conforme se combata la evasión fiscal, al final de su gobierno, en 2026, cuente con ingresos por estos impuestos de alrededor de 11 mil 500 millones de dólares.

Para el nuevo presidente de Colombia su proyecto económico es un acto de solidaridad con las clases más desprotegidas, pues a ese sector social irían los impuestos que el gobierno cobrará a las clases altas.

“Nuestro objetivo es que paguen las personas de más de 10 millones de ingresos mensuales (algo así como 2.300 dólares) que son el 2 por ciento de la población de más altos ingresos”, comentó José Antonio Ocampo, el ministro de Hacienda del nuevo gobierno sobre el plan de recaudación.

El ministerio de Hacienda asegura que quienes tengan un ingreso menor a los 2 mil 300 dólares mensuales mantendrán el impuesto sobre la renta que se ha cobrado hasta ahora a quienes perciben alrededor de 1 mil dólares por mes.

La nueva carga tributaria se concentraría en el sector energético y minero, se eliminarían los beneficios fiscales a la gasolina que se vende en la zona fronteriza, se aumentarían los impuestos a las bebidas azucaradas y los alimentos procesados y se gravaría la importación y venta de plástico.

El plan fiscal de Petro contempla un nuevo impuesto a las exportaciones de petróleo y minería, que va del 4.6 por ciento para el primero, 7.6 por ciento para el carbón y 7.8 por ciento para el oro.

Los argumentos del gobierno se enfocan en destacar cómo estos sectores han incrementado sus ingresos gracias a los altos precios internacionales y cómo tendrían que colaborar con el gobierno para incrementar la recaudación fiscal y destinar estos recursos al gasto social, orientado a quienes más lo necesitan.

Gustavo Petro fue investido como presidente de Colombia el domingo 7 de agosto y empieza su administración con el control del Congreso mediante la bancada de izquierda y los partidos aliados a quienes encabezó en una coalición por la presidencia.

Su primer reto será entonces conducir esa mayoría legislativa para sacar adelante su reforma fiscal y sortear las resistencias que seguramente tendrá su nuevo plan tributario en los próximos meses.

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