Redacción InsurgentePress/Ciudad de México.- El Presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) aseguró que la economía interna mantiene una tendencia positiva contraria a las versiones que han propagado los adversarios políticos sobre riesgos de desaceleración en el País.
“No, vamos muy bien, eso es lo que quisieran nuestros adversarios, son los mismos que dieron por muerto a nuestro amigo Alejandro Gertz. Así quisieran que le fuera a la economía¡, dijo López Obrador en conferencia de prensa en Palacio Nacional.
El peso, enfatizó López Obrador, sigue siendo una de las monedas más fuertes a nivel internacional empatada con el franco suizo.
Hasta el 25 de enero de 2023, afirmó López Obrador, el gobierno federal ha recaudado 454 mil millones de pesos, un 5.5 por ciento más en términos reales a los 399 mil millones de pesos captados en el mismo periodo de 2022
Paralelamente, agregó, se han generado 50 mil empleos en este mes de enero.
López Obrador admitió que la generación de empleos cayó producto de que las empresas han rehusado pagar prestaciones a los trabajadores para evitar que hagan antigüedad en diciembre de 2022.
Registramos, dijo, una cifra de 300 mil desempleados en diciembre de 2022.
López Obrador añadió que en medio de esas complicaciones el rumbo económico es favorable con una mejor distribución de la riqueza en el País.
En ese contexto, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) pronosticó que el crecimiento económico mundial caerá significativamente a 1.9% en 2023 como resultado de la crisis alimenticia y energética provocada por la invasión en Ucrania, el impacto constante de la pandemia de covid, la inflación persistentemente alta y la emergencia climática.
Retratando un panorama económico sombrío e incierto, el Departamento de Asuntos Económicos y Sociales de la ONU afirmó que la actual desaceleración económica mundial “afecta a países desarrollados y en desarrollo, y muchos de ellos corren el riesgo de entrar en recesión en 2023”.
El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, afirmó en el prólogo del informe de 178 páginas que “se avecina una desaceleración generalizada y grave de la economía mundial en medio de una inflación elevada, un endurecimiento monetario agresivo y un aumento de la incertidumbre”.
Según el informe, la previsión de crecimiento económico del 1.9% para este año, frente al 3% estimado para 2022, es una de las tasas de crecimiento más bajas de las últimas décadas. Sin embargo, se prevé un repunte moderado de 2.7% hasta 2024 si la inflación disminuye gradualmente y los vientos en contra empiezan a remitir.
En su informe anual de principios de mes, el Banco Mundial, que presta dinero a los países más pobres para proyectos de desarrollo, redujo su previsión de crecimiento casi a la mitad, pasando de su anterior proyección del 3% a sólo el 1.7%.
El Fondo Monetario Internacional, que otorga préstamos a países necesitados, pronosticó en octubre que el crecimiento mundial se desaceleraría del 6% en 2021 al 3.2% en 2022 y al 2.7% en 2023.
La directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva, dijo la semana pasada en el Foro Económico Mundial de Davos que 2023 será un año difícil, pero mantuvo la proyección y afirmó que “no esperamos una recesión mundial”.
Según el informe de la ONU, este año “el impulso del crecimiento se ha debilitado en Estados Unidos, la Unión Europea y otras economías desarrolladas, afectando negativamente al resto de la economía mundial”.