Agencias/Orlando.- El Presidente Barack Obama dijo a los familiares de las víctimas del tiroteo perpetrado el pasado domingo en Orlando que sus historias han “inspirado a la nación”, y llamó a “acabar la discriminación y la violencia contra la comunidad LGTB“, afectada por la masacre.
“Estas familias podrían ser nuestras familias. De hecho, son nuestra familia, parte de la familia estadounidense. Hoy les dije que nuestro corazón también está roto”, dijo Obama en declaraciones a los periodistas después de reunirse con familiares y supervivientes del tiroteo.
Asimismo, indicó que para mostrar lo mejor de nuestra humanidad se debe trabajar en unión, “para detener a los asesinos que nos quieren atemorizar”.
“Esto fue un acto de terrorismo pero también de odio. Fue un ataque a la comunidad LGBT”, reiteró.
Previamente, el mandatario estadunidense se reunió con supervivientes y familiares de las víctimas de la matanza perpetrada este domingo en la ciudad, además de con miembros de las fuerzas de seguridad que respondieron al peor tiroteo en la historia del país.
Acompañado del vicepresidente, Joseph Biden, Obama se reunió en el estadio con un grupo de supervivientes de la tragedia y de familiares de los fallecidos, que no fueron identificados por la Casa Blanca.
Antes de ese encuentro, Obama y Biden “tuvieron la oportunidad de reunirse con agentes de las fuerzas de seguridad locales para agradecerles sus acciones en respuesta al ataque en la discoteca Pulse”, según indicó la Casa Blanca.
Asimismo, instalaron depositaron una ofrenda floral en el memorial a las víctimas de la masacre en un club nocturno de Orlando, Florida.
Obama llegó a Orlando unos minutos después que Biden, quien le recibió en la pista de aterrizaje junto al gobernador de Florida, el republicano Rick Scott; el senador demócrata Bill Nelson; el alcalde de Orlando, Buddy Dyer; y la alcaldesa de Orange County, Teresa Jacobs.
El mandatario saludó a cada uno de ellos y abrazó a Dyer, quien le enseñó una camiseta negra con una bandera de arcoiris en forma de corazón y el lema “Orlando United” (“Orlando Unido”).
El senador republicano Marco Rubio y la congresista demócrata Corrine Brown, ambos representantes de Florida, viajaron con Obama y bajaron junto a él las escaleras del Air Force One.
El mandatario ha calificado de “acto de terrorismo y acto de odio” el tiroteo perpetrado por el estadunidense de origen afgano Omar Mir Seddique Mateen, que había declarado su lealtad al grupo yihadista Estado Islámico (EI).
El Presidente Obama, arribó en avión a Orlando, Florida, para reunirse con sobrevivientes y familiares de los 50 muertos de la masacre en el club nocturno gay Pulse, en momentos en que las autoridades consideran presentar cargos contra la esposa del atacante.
La Oficina Federal de Investigación (FBI) interrogó a la segunda esposa de Mateen, Noor Salman, quien conocía los planes, según una fuente de las agencias de la ley, y los fiscales se preparaban para presentar evidencia en su contra ante un gran jurado federal.
Salman no se ha expresado públicamente desde el ataque, que ocurrió en la madrugada del domingo.
“Les puedo asegurar que estamos trabajando (…) para hallar todo lo que podamos sobre lo que sucedió en la discoteca Pulse“, dijo Lee Bentley, el fiscal para el distrito medio de Florida el miércoles. “Estamos usando todas las herramientas legales para reconstruir no solo los eventos de esa noche sino también de los últimos meses”, agregó.
Durante el ataque, Mateen expresó lealtad a una variedad de grupos islámicos, incluyendo varios enfrentados entre sí, en una serie de llamadas al servicio de emergencia 911 y a un canal de cable local.