Agencias
Polonia se despide de la Copa del Mundo. Se despide con un triunfo 1-0 (gol de Bednarek al 59) sobre Japón que puso momentáneamente en peligro la clasificación de los nipones a octavos. El triunfo de Colombia por idéntico marcador ante Senegal propició la igualdad en la segunda posición de la llave.
Japón llegó a octavos gracias al fair play: terminó empatado en puntos y con la misma diferencia de goles que los africanos, pero acumuló menos tarjetas amarillas y el juego limpio les dio el pase a la próxima ronda.
La crónica del partido
A Japón le valía empatar contra Polonia para estar en sus terceros octavos de final de la historia y parece que hicieron todo lo posible por no clasificar. Para empezar, Akira Nishino sacó un once revolucionario sin Inui, sin Osako, sin Hasebe, sin Kagawa, sin Honda… y claro, lo notaron. Es cierto que en la primera parte fueron mejores que Polonia, pero en la segunda fueron barridos por los de Nawalka, que pudieron acabar ganando por una ventaja mayor.
El partido lo resolvió un gol de Bednarek que remató una falta botada por Kurzawa. Kawashima fue el mejor de Japón y el partido se acabó con una imagen sonrojante de los japoneses jugando andando y pasando el balón en defensa para acabar el tiempo. Estarán en octavos pero han jugado con fuego.
Tanto ha sido así que los nipones se han metido en octavos gracias a tener dos tarjetas amarillas menos que Senegal, pues en el resto de condicionantes estaban igualados.
De esta manera, África se queda sin representantes en octavos de un Mundial por primera vez desde España 1982.