Insurgente Press, Ciudad de México.- El 30 por ciento de niños de 1 a 3 años que acude a las 9 mil 200 estancias infantiles a cargo de la Secretaría de Desarrollo Sedesol (Sedesol) y el DIF registra sobrepeso u obesidad.
Abelardo Ávila, investigador del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición, indicó que los resultados de la Primera Medición Nacional de Desarrollo, aplicada a 482 mil niños atendidos en esas estancias, plantean un escenario alarmante.
La medición, realizada como parte del Sistema Nacional del Registro de Peso y Talla, arrojo que 19 por ciento de los niños tiene sobrepeso y 11 por ciento obesidad.
“Sigue prendiendo la alerta. Es muy grave. Son cifras alarmantes. Nos dice que todavía no hemos podido controlar la epidemia de obesidad y está afectando de manera muy grave a la infancia y a la población de bajo nivel socioeconómico”, advirtió Ávila en entrevista.
Estos niños, alertó, están en riesgo de desarrollar diabetes y enfermedades cardiovasculares a muy temprana edad.
“Casi por definición, donde hay estancia hay un ambiente obesigénico. El ambiente obesigénico incluye de manera central la libertad que ha tenido (la industria) para promover, distribuir y vender y tener beneficios fiscales muy importantes para la expansión de la venta de sus productos (altamente calóricos)”, reprochó.
“Inclusive hasta en compras estatales en la Cruzada Nacional contra el Hambre vimos muchos productos que no tenían por qué estar ahí”.
Explicó que se trata de población en pobreza con bajo peso al nacer y durante el primer año de vida, y que a partir del segundo y tercer año sufren sobrepeso y obesidad.
Por otra parte, indicó, 15 por ciento de niños presenta talla baja, situación que se agudiza en Chiapas, Guerrero, Oaxaca y Yucatán, donde la proporción es de alrededor de 20 por ciento.
Ismael Ordóñez, oficial mayor del DIF, quien dio a conocer ayer resultados preliminares de la medición, dijo en conferencia de prensa que prevalece el consumo de bebidas y alimentos altos en calorías.
Expuso que el DIF firmó un convenio con el Instituto Nacional de Salud Pública para desarrollar menús para menores de 5 años y capacitar a los supervisores de las estancias para dar orientación alimenticia a los responsables de las estancias y a los padres.
Rafael Pérez Escamilla, director de Oficina de Prácticas de Salud Pública de la Universidad de Yale, señaló que en México hay un problema con la coexistencia de niños que tienen muy baja talla para su edad y aquellos con sobrepeso y obesidad.
“Eso aumenta el riesgo tanto de enfermedades infecciosas, como diarreas y gripas, pero también más adelante de enfermedades no transmisibles, como diabetes y enfermedades del corazón. En México estamos pasando por una crisis muy fuerte en el sistema de salud porque los dos problemas son sumamente costosos de resolver”, advirtió.
Más de 15 por ciento de los niños de 3 años que asiste a las estancias infantiles del sistema Sedesol-DIF no alcanza su máximo potencial en materia de conocimientos, reveló la Primera Medición Nacional de Desarrollo.
Antonio Rizzoli, jefe de la Unidad de Investigación en Neurodesarrollo del Hospital Infantil de México, detalló que esto puede implicar que a los 10 años acumulen un año menos de conocimiento respecto al nivel escolar que cursan.
“A los 15 años será de un 1.5 años escolares. Es decir, el equivalente de un niño que está entrando a la preparatoria y sabe lo de un niño de segundo de secundaria; eso es lo que puede explicar los resultados de la prueba PISA”, apuntó.
“Hay que empezar temprano (la estimulación) cuando esas diferencias parecen que no son tan importantes. No es lo mismo un niño que llega a la primaria listo a aprender a hablar a un niño que llega listo a aprender a leer y escribir”.
Con información de Reforma.
