Agencias/ Coahuila.- Productores de carbón y trabajadores de minas marcharon por calles de este municipio en protesta porque la Comisión Federal de Electricidad (CFE) dividió los contratos para la compra de carbón para abastecer a sus centrales termoeléctricas del municipio de Nava, y la mitad han sido para una sola empresa, vinculada a políticos.
En marzo, la CFE, a cargo de Manuel Barlett Díaz, reanudó los contratos para la compra de carbón, tras detenerlos desde diciembre. De acuerdo con el gobernador de Coahuila, Miguel Ángel Riquelme Solís, y del senador de Morena, Armando Guadiana Tijerina, quienes encabezaron las gestiones, los nuevos pedidos serían para pequeños y medianos productores, a fin de alivianar la economía de la región.
Se trata de 300 mil toneladas del mineral que la CFE dividió en partes iguales en dos contratos, uno para la Promotora para el Desarrollo Minero de Coahuila (Prodemi), fideicomiso en el que participan 90 productores asociados, y el otro, para Minera y Acarreos Flores SA de CV, propiedad de una familia.
En el organigrama de Prodemi, Antonio Flores Guerra aparece como presidente del consejo de administración; es hermano de Tania Vanessa, actual regidora, y en 2017 candidata del partido estatal Unidad Democrática de Coahuila (UDC), a la alcaldía de Múzquiz, otro municipio de la zona con yacimientos de carbón. En 2017, luego de un accidente en la excavación, Minera y Acarreos Flores, SA de CV formó parte de la lista de empresas restringidas para funcionar, por la Secretaría de Trabajo y Previsión Social.
Defendemos el futuro, defendemos el carbón, expresaron los mineros afectados, al marchar y bloquear la carretera federal 57 en el límite de Sabinas y San Juan de Sabinas. Los manifestantes, la mayoría incorporados a las uniones Nacional y Mexicana de Productores de Carbón, bloquearon la vía más de cuatro horas y pidieron sensibilidad del gobierno federal para resolver de fondo la problemática de la región.
Los quejosos pidieron al director de la CFE, Manuel Barlett, visitar la región y ponerse al tanto de la difícil situación económica de las empresas y de los trabajadores, expuestos a prácticas de coyotaje. El presidente de la Unión Mexicana de Productores de Carbón, Óscar Fuentes, consideró que esta decisión deja muy mal parado al presidente (Andrés Manuel) López Obrador.
En tanto, Riquelme Solís precisó: “dan una parte a Prodemi, con más de 90 productores, y la otra se la dan a un solo productor; sabe Dios quién esté detrás, más o menos nos imaginamos; pero son las cosas que no entiendo.
Se van a meter en un problema, porque la realidad es que la minera beneficiada no tiene capacidad de abasto y van a tener que buscar a otros proveedores, porque van hacer el desorden, cuando la organización social por parte del gobierno de la entidad había estado muy clara y lo habíamos hecho con consenso, entre todos”, añadió.
Además, el acuerdo fue que nadie viera la licitación por otra parte, sino que a través de Prodemi, que junto con los 90 productores estaban listos para enfrentar el reto de las más de 300 mil toneladas. Resulta que la licitación se divide en dos, una la gana Prodemi y otra un sólo productor, sostuvo el gobernador.
Expuso que López Obrador actúa de buena fe con los productores y mineros de carbón, pero causó desconcierto la decisión de la CFE.
“El Presidente quiere favorecer a los productores de carbón de la región; (pero) no se dio así la licitación. (Entonces) andan muy molestos los productores por la asignación de ese número de toneladas, casi la mitad, a un sólo productor.
Creo que es desconocimiento, y queremos explicarle al Presidente (porque) creo que los secretarios (de Estado) lo mal informan, y deseamos explicarle el potencial que tiene Coahuila y cada una de sus regiones”, explicó Riquelme.
En tanto, los productores esperan que con sus manifestaciones, la CFE anule la asignación del contrato a Minera y Acarreos Flores y distribuya entre más carboneros las 165 mil toneladas que le asignaron.