Agencias/Redacción InsurgentePress/Ciudad de México.- El Gobierno del Presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) proyectó una cifra ‘negra’ de 40 mil 863 homicidios dolosos en medio de la reducción movilidad ocasionada por la pandemia del COVID-19 en el País este 2020.
Esa es la cifra que aparece en el Segundo Informe de Gobierno López Obrador, que superaría a los 37 mil 315 homicidios dolosos registrados durante 2019, según el documento.
Estos datos corresponden al “número de agresiones registradas por su presunción (homicidio) en el certificado de defunción”, y difieren de los datos elaborados por el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad (SENSP) que recogían 34 mil 608 homicidios y mil 12 feminicidios durante 2019.
El propio SENSP reconoce también una tendencia al alza en los asesinatos durante 2020.
De enero a julio, registraron 20 mil 494 homicidios frente a los 20 mil 176 de 2019.
Este miércoles conferencia de prensa en Palacio Nacional López Obrador, tras la polémica generada por una proyección de récord en su segundo año de mandato, reconoció que el talón de Aquiles de su administración en materia de seguridad están siendo los homicidios y la extorsión.
“Hemos avanzado en detener el crecimiento de la incidencia delictiva en casi todos los delitos, menos en dos: en extorsión y homicidios dolosos”, concedió.
El mandatario mexicano atribuyó ‘un 75 % de todos los homicidios del país’ al crimen organizado, en un momento en el que hay al menos 10 bandas pugnando por el control de los diferentes territorios en México.
“¿Por qué nos ha costado reducir el número de homicidios? Porque tiene que ver mucho con la delincuencia organizada y constantemente hay confrontación, enfrentamientos entre grupos. Eso nos aumenta el número de homicidios”, indicó.
López Obrador recordó que su Gobierno heredó la existencia de “grupos con estructuras”, aunque aseveró que eso no es “ningún tipo de justificación”.
El pasado mes de julio, las autoridades detuvieron en Guanajuato, el estado con mayor número de homicidios, al líder del Cartel Santa Rosa de Lima, José Antonio Yépez Ortiz, conocido como El Marro.
Esa detención, como reconoció el Presidente este miércoles, no acabó con la violencia en el estado y “sigue habiendo problemas”.
En julio, mes del arresto de El Marro, hubo un alza de los asesinatos a nivel federal, con 2.980 casos, un dato pese al que López Obrador se mantiene optimista.
“Tengo confianza de que vamos a serenar al país, se va a disminuir la incidencia delictiva, porque ya no hay contubernio. No hay asociación delictuosa entre la delincuencia organizada y las autoridades. Está bien pintada la raya”, sostuvo.