Desde el Sótano/Por Ery Acuña/Tuxtla Gutiérrez.- EN LOS PASILLOS DEL PALACIO se comenta que a más de un funcionario les ‘dio frío la detención de Giovanny Alexander N.,’ quien hasta el mes pasado fungía como subsecretario de Servicios y Gobernanza Política de la Secretaría de Gobierno, un alto puesto en la administración pública.
De hecho Giovanny era cercano al mandatario. En campaña, estaba cerca. Pero Rutilio tenía que ponerle un sello a su gobierno y marcar su divorcio total, que sonara con fuerza, al estilo perverso e inhumano con que gobernó su predecesor, Manuel Velasco Coello, el más corrupto gobernador que ha tenido Chiapas.
“No más influyentismo, corrupción, ni arrogancia. No vayan a andar de mano larga como lo hacían los de antes”, les repite Rutilio a los funcionarios en cada reunión de gabinete. Pero el problema es que algunos no quieren andar de mancos.
Lo que sí sorprendió a las feministas fue el arresto de Lorena N., también colaboradora de Giovanny, reconocida por su lucha en favor de los derechos de las mujeres, y quien ahora es investigada por presuntamente usar sus influencias para cometer actos de corrupción.
Los otros tres exfuncionarios recientemente cesados, fueron sorprendidos haciendo negocios en sus puestos en la Secretaría de Obras Púbicas.
Rutilio ya trae brújula en mano. Esta semana también pidió a los funcionarios del gobierno que ostentan una notaría, que si quieren seguir en sus cargos, renuncien a este privilegio. Juan Óscar Trinidad Palacios, presidente del Tribunal de Justicia de Chiapas, fue el primero en decir, “yo, señor, gobernador”, me quedo con usted.
A 14 meses de Gobierno, Rutilio Escandón está enlistado como uno de los 5 gobernadores con mayor aceptación ciudadana del país. Pero el problema es que la mitad de los chiapanecos aún no la creen,* y tendrá que seguir cortando la maleza para recobrar la confianza de la sociedad que se derrumbó con el desastroso pasado del Gobierno Verde.
Y mientras en las calles el calor es infernal, en varias oficinas de Gobierno hay un frío glaciar, y no por los aires acondicionados, sino por la advertencia del Fiscal General, Jorge Luis Llaven: Hay más funcionarios en la mira, y vamos por ellos.
Así que la gente ahora se pregunta… a ver si como gritan, cantan.