Agencias/Medellín.- El piloto del avión que se estrelló en Colombia cuando trasladaba al equipo del Real Chapecoense también era el dueño de la aerolínea venezolana LaMia (Línea Aérea Mérida Internacional de aviación, Compañía Anónima) a la que pertenecía el aparato.
De hecho, era el único avión de los tres que posee la compañía que podía volar. Las otras dos aeronaves de la aerolínea con capital venezolano y que opera desde Bolivia estaban en reparación.
El avión de LaMia no pudo partir desde Sao Paulo por impedimentos legales, aclaró la Agencia Nacional de Aviación Civil (ANAC) de Brasil, ya que debido a acuerdos internacionales un avión fletado debe pertenecer a una empresa que opera en el país de partida o de destino.
El comunicado agrega que el club “fue avisado de esa negativa” y de que “la operación sólo podría ser hecha por una empresa brasileña o colombiana”.
Aún así, frente a esa situación, el Chapecoense optó por mantener el vuelo con la empresa venezolana que opera desde Bolivia. Al parecer, la decisión fue tomada porque LaMia tiene experiencia en el traslado de equipos de fútbol y ha trabajado ya con varios clubes sudamericanos.