Agencias/Ciudad de México.- En los últimos años, las grandes franquicias de Hollywood como Marvel y ‘Star Wars’ alcanzaron un poder sin precedentes. Estas superproducciones no solo dominan la taquilla mundial, sino que también han generado inmensas bases de fanáticos que viven y respiran por cada nuevo proyecto. Sin embargo, ese mismo grupo de seguidores apasionados puede ser, en ocasiones, un juez implacable.
El fervor que siente el público por sus sagas favoritas no siempre es positivo y, con el crecimiento de las redes sociales, las críticas extremas se han vuelto más visibles y, a veces, hasta tóxicas. Esto provoca una desconexión preocupante entre los estudios y aquellos que alguna vez fueron sus más leales seguidores.
Uno de los mayores desafíos que enfrentan hoy en día los estudios de Hollywood es la creciente brecha entre lo que creen que los fanáticos quieren y lo que realmente desean. A pesar de contar con recursos ilimitados para realizar estudios de mercado, pareciera que las decisiones creativas a menudo dejan insatisfecho al público más exigente.
Toxic Fandom: How Hollywood Is Battling Fans Who Are ‘Just Out For Blood’ — From Social Media Boot Camps to Superfan Focus Groups https://t.co/C0WHIduqF3
— Variety (@Variety) October 3, 2024
Los fans esperan autenticidad, respeto por el canon y evolución en sus personajes favoritos, pero cuando los estudios intentan complacer a todos o seguir tendencias, suelen fracasar. En muchas ocasiones, en lugar de mantenerse fieles a la esencia de una franquicia, los creativos introducen cambios radicales que terminan alienando a la audiencia.
En un intento por solucionar este distanciamiento, algunos estudios comienzar a implementar estrategias poco convencionales. Según Variety, ciertos proyectos de grandes franquicias están utilizando grupos especializados de “superfans” para evaluar materiales promocionales o, incluso, influir en el contenido de las películas y series antes de su lanzamiento. El objetivo es prevenir posibles reacciones negativas antes de que el producto llegue al público general.
Sin embargo, este enfoque ha levantado algunas cejas. Al depender de un grupo selecto de seguidores, los estudios podrían estar tomando decisiones basadas en un sector muy específico y, muchas veces, radical, lo que podría generar aún más insatisfacción en el público en general.
El caso de ‘Star Wars’ y ‘Marvel’ es especialmente notable. Ambas franquicias son elogiadas y criticadas por igual en los últimos años. Mientras que Marvel domina la taquilla con su Universo Cinematográfico, también enfrenta críticas por la sobreproducción de contenido y la percepción de fatiga en el público.
Por otro lado, ‘Star Wars’ experimenta una división profunda en su base de fanáticos, en parte debido a las decisiones creativas que algunos seguidores consideran innecesarias o mal ejecutadas. Desde la introducción de personajes hasta la forma en que se manejan temas de diversidad, ambas franquicias han sido objeto de acalorados debates.
A pesar de los desafíos, el futuro de los fandoms aún podría ser prometedor si los estudios logran encontrar un equilibrio entre la innovación y el respeto por sus audiencias. Escuchar a los fanáticos es importante, pero es crucial que los creativos no se dejen llevar por las voces más estridentes. En lugar de centrarse en complacer a todos, los estudios deberían enfocarse en contar historias auténticas que se mantengan fieles a la esencia de sus personajes y universos. Si logran esto, podrían restaurar la confianza de sus audiencias y evitar los errores del pasado.
En definitiva, las grandes franquicias de Hollywood tienen en sus manos un enorme poder, pero también una gran responsabilidad. ¿Serán capaces de reconectar con sus bases de fans? Solo el tiempo lo dirá.