Agencias / InsurgentePress, Ciudad de México.- El cambio climático global está amenazando con dejar expuestos al aire a desechos peligrosos en un campamento militar abandonado que se creía enterrado para siempre en la Capa de Hielo de Groenlandia. Este peligro inesperado se ha descubierto en una investigación realizada por el equipo de William Colgan, de la Universidad de York en Toronto, Canadá.
Un campamento o una base militar estadounidense que se construyó sobre la capa de hielo de Groenlandia en 1959 conocida como El Camp Century, sirvió de lugar secreto para demostrar la posibilidad de desplegar misiles nucleares desde el Ártico durante la Guerra Fría. Cuando la base fue retirada del servicio y parcialmente desmantelada en 1967, sus peligrosos desechos fueron abandonados allí junto con infraestructuras, al suponerse que quedarían sepultados para siempre bajo las nieves perpetuas.
Cuando se abandonó la base militar, tanto el gobierno de Estados Unidos como el de Dinamarca dieron por hecho que los desechos iban a permanecer sepultados para siempre en la corteza de hielo. Ahora que comienza a verse que eso no será así, se desencadenarán fuertes polémicas, como por ejemplo la vinculada a determinar quién es el responsable de la limpieza de los desechos. Este conflicto podría llevar a disputas diplomáticas en las que ni siquiera pensaron los responsables de tomar las decisiones políticas en aquella época.
El cambio climático global ha calentado el Ártico más que ninguna otra región en la Tierra, y la nueva investigación ha determinado que la porción de capa de hielo que cubre Camp Century podría empezar a fundirse hacia finales de siglo. Si ese hielo se derrite, las infraestructuras de la base, así como los restantes desechos biológicos, químicos y radiactivos, podrían quedar expuestos al exterior y envenenar potencialmente los ecosistemas cercanos.
Los autores del nuevo estudio analizaron también los documentos de ingeniería históricos del Ejército Estadounidense para determinar dónde y a qué profundidad fueron enterrados los desechos. La zona ocupada por Camp Century cubre 55 hectáreas.
Durante la Guerra Fría, la atención militar estadounidense se desplazó al Ártico (la ruta más corta entre su país y la antigua Unión Soviética). En abril de 1951, Estados Unidos y Dinamarca acordaron defender Groenlandia, un territorio danés, de hipotéticos ataques soviéticos, y los estadounidenses construyeron varias bases aéreas en la región ese año.
En 1959, el Cuerpo de Ingenieros del Ejército Estadounidense construyó Camp Century a 200 kilómetros de la costa de Groenlandia. Recubierta por una capa de hielo, Camp Century fue conocida en la época como la “ciudad bajo el hielo”.
La base también actuó como prueba de concepto para un programa secreto dedicado a ensayar la viabilidad de construir instalaciones de lanzamiento de misiles lo bastante cercanas a la Unión Soviética como para alcanzarla con facilidad y máxima rapidez, aunque finalmente nunca se construyó este complejo de misiles nucleares.
El objetivo oficial de la base era ensayar técnicas de construcción en el Ártico y llevar a cabo investigaciones científicas. Mientras estuvo operativa, la base albergó de 85 a 200 soldados y estuvo energizada por un reactor nuclear.
Aunque la base fue construida con la aprobación de Dinamarca, el programa de lanzamiento de misiles nucleares, referido como Project Iceworm, fue mantenido en secreto y se ocultó al gobierno danés. Varios años después de que la base pasase a ser operativa, el Project Iceworm fue desestimado por el Estado Mayor Conjunto y fue retirado del servicio y desmantelado parcialmente. El Cuerpo de Ingenieros del Ejército Estadounidense retiró la cámara de reacción nuclear pero dejó otras infraestructuras de la base y todos los desechos, suponiendo que la capa de hielo los mantendría bien aislados para siempre.
Fuente: Universidad de York