julio 22, 2024

Allá en la Sierra

Desde El Sótano/Por Ery Acuña/Tuxtla Gutiérrez.- Es como un “holocausto”, dicen pobladores de la Sierra que viven los efectos de la guerra entre bandas rivales, en referencia a los horrores Nazis durante la Segunda Guerra Mundial,* donde los alemanes obligaban a los pueblos avasallados a no salir de sus casas, además de ser reclutados para el trabajo forzado, y hasta asesinados.

Tal parece que esta violencia que se vive en la Sierra no se generó sola: fue activada. Se piensa que alguien lanzó fuego a esa gasolina esparcida de la pobreza, la marginación* y las montañas agrestes.

Hay versiones que en Chiapas hay una activa presencia de la CIA y la DEA, las agencias gringas encargadas de controlar, vigilar y contener el paso de drogas, y en el caso de la primera, la CIA, de vigilar los movimientos de cada país en todo el mundo, y hasta de desestabilizar regiones, si es necesario, para beneficio del país de las 50 estrellas.

Dice un dicho que en las grandes tragedias siempre “hay alguien que llora, y alguien que vende pañuelos”.

Se trata de un asunto federal, porque los delitos del fuero común los atiende el gobierno estatal, en tanto que las armas, el narco, los migrantes y la violencia generada por ello, son delitos federales.

Pero aquí no se trata de repartir culpas. *Cuando las noticias de matanzas entre grupos rivales se esparcían por las redes por enfrentamientos entre ellos mismos, era una cosa; pero otra muy diferente es que, si como se dice, se está reclutando por la fuerza a personas* a unirse a los grupos rivales.

Una versión es que quienes estaban en “la bola” trataron de salirse y están siendo obligados a regresar, pero otra que circula es que son personas sin “velo en el entierro” que son obligadas a unirse a los bandos rivales.

Qué curioso que en medio de un ‘reacomodo económico mundial entre China, Rusia y Estados Unidos, en el marco del Bicentenario de la Federación de Chiapas a México y en medio de la elección muy reñida en EEUU, además de la transición de Gobierno en México’ -en una región clave en todo el mundo para el cruce de migrantes y sustancias prohibidas de todo tipo, donde nació incluso hasta el EZLN-, surjan de nuevo las “caravanas migrantes” desde Chiapas, y el recrudecimiento de la violencia entre bandas delictivas en la Sierra, donde nadie sale ni entra sin su permiso, con las consecuencias que esto genera: falta de servicios médicos, alimentos, combustible, y mucha desinformación.

¿Cómo llegan tantas amas a Chiapas? ¿Quién las proporciona? ¿Quién lo permite? A los grupos delictivos les cuesta mucho dinero estas guerras, no la quieren, no les sirve para “el negocio”.

A los hermanos de la Sierra, esto les provoca miedo, pánico, hambre, falta de libertad y de paz.

Qué terrible momento para cumplir 200 años como mexicanos, donde no queremos balazos, pero tampoco abrazos sin ningún beneficio.

@Eryacuna

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